Acullá

La indignante historia de un oso polar encerrado en un centro comercial para que clientes se tomen selfies

26/07/2016 - 3:03 pm

Recientemente, la muerte del oso polar Arturo, que permaneció durante 23 años en cautiverio en un zoológico de Argentina, abrió polémica respecto a las condiciones del hábitat que lo rodearon.

Ciudad de México, 26 de julio (SinEmbargo).- Un oso polar llamado Pizza ha sido nombrado como el “más triste del mundo” luego de que un video y diversas imágenes que exhiben su cautiverio en un estanque dentro de un centro comercial en China para que los clientes se tomen selfies con él.

La organización Animals Asia compartió un video una grabación de Pizza tirado en el suelo del estanque en el que se encuentra encarcelado. El oso se ve decaído, y algunos incluso han asegurado que está llorando.

“Atrapado en medio de un centro comercial en China -su piel blanca contrasta con la luz azul artificial de la que él forma parte de forma involuntaria – este triste oso polar no tiene salida”, escribe la organización en una petición que ya ha sumado más de 492 mil firmas para que cierren este acuario instalado en el centro comercial Grandview en Guangzhou, China.

Animals Asia denuncia que el oso vive en un espacio reducido, donde no tienen ningún lugar para esconderse de las personas que toman fotos, golpeando las ventanas y gritando.

“Sacar a los animales de su entorno natural es algo que no puede defenderse, pero la peor situación posible es cuando viven en las condiciones que estamos viendo en el acuario de Grandview […] Todos tenemos que continuar oponiéndonos públicamente a dichas instalaciones”, exigió la organización.

Pizza, el oso polar que vive encerrado en un centro comercial de China. Foto: Especial
Pizza, el oso polar que vive encerrado en un centro comercial de China. Foto: Especial

Recientemente, la muerte del oso polar Arturo, que permaneció durante 23 años en cautiverio en un zoológico de Argentina, abrió polémica respecto a las condiciones del hábitat que lo rodearon.

El que fuera conocido como “el oso más triste del mundo” nunca conoció la tundra, ni las auroras boreales. No pudo correr, ni nadar, ni cazar, como hacen los osos de su especie. Durante su largo encierro, soportó con dignidad el calor, el Zonda, los barrotes y el cemento de un espacio reducido, soportó la soledad y la inmovilización a la que fue condenado desde su nacimiento.

Ahora la imagen de Pizza ha comenzado a darle la vuelta al mundo en busca de ser liberado de su cautiverio.

en Sinembargo al Aire

Opinión

Opinión en video