Ciudad de México, 27 de febrero (SinEmbargo).– A tres días de que se conforme la Policía Comunitaria de los Bienes Comunales de Cacahuatepec, en la zona rural de Acapulco, elementos del Ejército, de la Policía Federal, Estatal y Municipal irrumpieron de manera violenta a esta localidad, según denunciaron los pobladores.
Marco Antonio Suástegui Muñoz, líder del Consejo de Ejidos y Comunidades Opositoras a la Parota (CECOP), dijo a la prensa que para detenerlo militares y policías “allanaron” por la madrugada de este jueves varias viviendas del poblado La Concepción. Sin embargo, dijo que al no encontrarlo los elementos de seguridad amagaron con sus armas a los campesinos.
Suástegui Muñoz aseguró que dichas autoridades se presentaron de manera agresiva y robaron algunos ahorros de las familias. Asimismo afirmó que sacaron a jalones a dos jóvenes, manosearon a las mujeres, aventaron a los niños y que los ancianos también fueron maltratados.
“Fueron cuatro unidades del Ejercito Mexicano, tres patrullas de los ministeriales, seis de policías federales y dos más de municipales los que entraron a la comunidad, quienes a la altura de la Ceiba una de las entradas para La Concepción fueron vistos por los guardias del CECOP que hacían guardia en los retenes asignados, para el resguardo de los pueblos”, comentó al diario Novedades de Acapulco.
El líder comunero adelantó que por ello se interpondrán denuncias contra los mandatarios municipal y estatal, ante la secretaría de Derechos Humanos por ordenar el ataque a los comuneros. Indicó que es la primera vez en 11 años que el Ejército irrumpe en Cacahuatepec.
“Pudo generarse una masacre”, dijo Suástegui al asegurar que la gente estaba dispuesta a defenderse con machete en mano.
Según se dio a conocer, fue ante la concentración de los pobladores que los militares y los cuerpos policiacos decidieron retirarse de la zona.
Tras la incursión, los comuneros colocaron retenes en distintos puntos de las comunidades para impedir el paso a las autoridades de los tres niveles de gobierno e implementar un toque de queda.
Desde hace dos semanas los pobladores impiden a empresas la construcción de la hidroeléctrica la Parota en el Río Papagayo.
Suástegui Muñoz es uno de los líderes del movimiento que impide a la Comisión Federal de Electricidad edificar esta obra, pues consideran que perjudicaría a sus poblados.
