Esta semana, la Ciudad de México será la sede de la Cumbre de movilidad sustentable. Canadá dejará de pedirles visa a los ciudadanos mexicanos y el fin de semana se realizará el Festival de la risa en el Centro Cultural del Bosque.
Ciudad de México, 28 de noviembre (SinEmbargo).- Entre el 28 y el 30 de noviembre, la Ciudad de México será la sede de la Cumbre de movilidad sustentable.
A partir del 1 de diciembre, los mexicanos que quieran viajar a Canadá no necesitarán tramitar una visa como requisito de entrada a ese país. Sin embargo, sí será necesario contar con una Autorización Electrónica de Viaje que cuesta siete dólares canadienses y se vincula electrónicamente al pasaporte del solicitante durante cinco años.
El 3 y 4 de diciembre el Centro Cultural del Bosque será la sede del cuarto Festival Internacional de la Risa. El objetivo de este evento, con programación nacional e internacional, es generar una catarsis colectiva que, seamos honestos, es bastante necesaria en este momento.
#NoSeNosOlvida
El pasado 15 de septiembre, el Grito de Independencia del Presidente Peña Nieto fue envuelto por las voces que exigían su renuncia alrededor del Zócalo capitalino. Esta no es la primera vez que un acto público del priista está rodeado de reclamos. La historia empezó el día que asumió la presidencia.
Enrique Peña Nieto tomó posesión como Presidente de la República Mexicana en 2012.
En punto de la media noche del primero de diciembre, Felipe Calderón le cedió el poder con la ceremonia de cambio de escolta de bandera en el Patio de Palacio Nacional. A las 11 y cuarto de la mañana de ese día, Peña Nieto rindió protesta en el Palacio Legislativo de San Lázaro, en donde recibió la banda presidencial.
Afuera de ese recinto, cientos de personas se manifestaban desde las siete de la mañana. Hubo enfrentamientos con la Policía Federal tanto ahí como en el Centro Histórico.
104 personas fueron detenidas de manera arbitraria. Pasaron un mes en prisión y después fueron declarados inocentes. Hasta agosto de este año, el Gobierno de la Ciudad de México les había pagado a 20 de ellos indemnizaciones por la violación de derecho humanos que van de los 33 mil a los 248 mil pesos.
Tal vez ellos el Presidente ya no lo recuerde, pero a nosotros no se nos olvida.
