El funcionario señaló que, por ese motivo, se habilitará un sistema de entrega de agua para consumo humano a través de camiones cisterna y estanques en algunos puntos de las zonas más afectadas por la intensa lluvia, la que generó inundaciones y aluviones.

Una de las localidades más afectadas es Diego de Almagro, en la Región de Atacama, distante 957 kilómetros al norte de Santiago, donde “nos vamos a demorar meses en recuperar el sistema de agua potable”, apuntó en declaraciones a periodistas.

“No hay agua potable porque la crecida del río rompió todos los sistemas de producción, la planta de osmosis que transformaba las aguas con minerales en agua potable desapareció, el pozo también y por lo tanto la solución más estructural va a durar meses”, dijo.

En la capital regional, Copiapó, el 90 por ciento de la población cuenta con agua potable, mientras que en localidades como Paipote y Chañaral está al 50 por ciento, detalló.

Undurraga indicó que ya se tiene “conectividad terrestre para todos los centros urbanos a nivel de emergencia, lo que quiere decir que se puede llegar por tierra a todos los centros urbanos en vehículos normales pero con mucha precaución”.

La Oficina Nacional de Emergencia (Onemi) precisó por su parte que los damnificados por el frente de mal tiempo de la semana pasada suman 10 mil 996, de los cuales cuatro mil 699 se encuentran en albergues.

El número oficial de desaparecidos se mantiene en 20, mientras que los fallecidos suman 12, aunque este domingo se encontró un nuevo cuerpo en la localidad de San Antonio que será incorporado a la estadística oficial en las próximas horas.

Al menos 300 trabajadores, en tanto, se encuentran aislados en la Región de Atacama a la espera que se puedan habilitar caminos hasta los lugares de faena donde se encuentran.

El intendente de la Región de Atacama, Miguel Vargas, informó por otra parte que la reconstrucción de viviendas en la zona del desastre se realizará en sectores seguros para evitar que un nuevo temporal genere otra tragedia.

De acuerdo con sus estimaciones, unas cinco mil viviendas se encuentran dañadas, parte de las cuales deberán ser reconstruidas en zonas alejadas de quebradas para evitar que futuros aluviones arrasen con las construcciones.

El temporal de lluvia, que provocó inundaciones y aluviones, afectó desde el pasado martes a las regiones de Antofagasta, mil 370 kilómetros al norte de esta capital; Atacama, 805 kilómetros al norte de Santiago, y Coquimbo, 471 kilómetros al norte de aquí.

En Copiapó, capital de la Región de Atacama, habitualmente caen 10 milímetros de lluvia al año, pero en esta oportunidad precipitaron 30 milímetros en pocas horas, cifra que sobrepasó los 40 milímetros en las zonas precordilleranas.

Las comunas más afectadas por la catástrofe son Alto del Carmen, Chañaral, Diego de Almagro y Tierra Amarilla, todas ellas en Atacama.