Ciudad de México, 30 de mayo (SinEmbargo).- Los vientos de cambio para renovar la dirigencia nacional del Partido Acción Nacional (PAN) soplan… huracanados. Desde el interior de la bancada en el Senado. Avivados por los “destapes” y “autodestapes” anticipados de algunos legisladores.

Las diferencias entre el actual presidente Gustavo Madero Muñoz y el ex coordinador parlamentario en el Senado, Ernesto Cordero Arroyo, han precipitado la sucesión en la dirigencia panista. Los senadores que todavía se sienten “agraviados” por la decisión de destituir a Cordero Arroyo hablan ya de la urgencia de remover a Gustavo Madero, a pesar de que faltan siete meses para que se emita la convocatoria, bases y requisitos para elegir al líder del partido blanquiazul.

“Este proceso en particular seguramente va a ser un jaloneo al interior del PAN, pero finalmente creo que es lo que muchos panistas estamos esperando, que ya haya una renovación y que en esa renovación tenemos la esperanza de que retomemos el rumbo”, dijo la Senadora panista María del Pilar Ortega.

Aunque el discurso oficial habla de unidad y cohesión al interior de la fracción parlamentaria del PAN en la Cámara Alta, en los hechos los senadores afines a Ernesto Cordero y fieles a la corriente interna conocida como “calderonismo” siguen “desencantados” y todavía “sorprendidos” por las decisiones del presidente Madero.

El Senador Javier Lozano se adelantó a todos y “destapó” al ex Secretario de Hacienda y Crédito Público (SCHP) en el sexenio del Presidente Felipe Calderón como “la mejor opción” para tomar las riendas del partido.

“Ojalá se postule porque yo estoy convencido de que hoy por hoy, el político que verdaderamente encarna la posición más sólida desde la oposición, se llama Ernesto Cordero”, dijo Lozano en un evento organizado por el Instituto Tecnológico Autónomo de México (ITAM), el lunes pasado.

Lo de “encarna la posición más sólida desde la oposición” de refiere, por supuesto, a su oposición al Pacto por México, apoyado por Madero. Una oposición que le costó el liderazgo del grupo parlamentario.

El grupo de Cordero en la Cámara Alta, 24 senadores para ser exactos, no tardó en cerrar filas con su excoordinador parlamentario.

“Yo creo que Ernesto sería un excelente presidente de partido. Desde hace mucho tiempo que lo veo bien y creo que sería muy bueno. (…) Ernesto tiene un gran liderazgo, que se ha venido reforzando en estos días tan complicados”, sostuvo la legisladora por Guanajuato, María del Pilar Ortega.

Pero Cordero no es el único “gallo” para sustituir a Madero. El Senador Juan Carlos Romero Hicks, uno de los firmantes de la carta de extrañamiento al líder nacional por la destitución de Cordero, hizo pública su aspiración para dirigir el PAN.

Tras aclarar que respeta al ex Secretario de Hacienda, Romero Hicks dijo en el PAN hay varios liderazgos, como el suyo, que podrían ocupar la oficina principal de la sede ubicada en la Colonia del Valle.

“Cuando se hagan las convocatorias para participar creo que hay varios liderazgos, yo también estoy pensando en esa posibilidad”, indicó el Senador y ex Gobernador de Guanajuato.

Romero Hicks adelantó sus intenciones porque confía en que la competencia será abierta, “a diferencia de otros partidos políticos aquí en el PAN no es el ‘dedazo’ ni el “gran Tlatoani” el que va a tomar la decisión. Bienvenido que sea Ernesto Cordero y también otras personas” aseveró el legislador panista.

OTROS SENADORES PODRÍAN OCUPAR EL LUGAR DE MADERO

Irremediablemente el recién nombrado coordinador del PAN en el Senado, Jorge Luis Preciado, debía pronunciarse respecto a los “destapes” anticipados al proceso de elección del nuevo dirigente del PAN.

Optimista, el pastor senatorial opinó “lo bueno de todo esto es que tenemos liderazgos hasta para aventar para arriba”.

Y él mismo se encargó de anticipar los nombres de otros senadores que podrían tener la misma intención de dirigir al partido, entre ellos barajeó los nombres de Héctor Larios Córdova, ex coordinador del PAN en la Cámara de Diputados en la LX Legislatura (2006-2009); y a Ernesto Ruffo Appel, ex Gobernador de Baja California (1989-1995).

“Por supuesto Ernesto es un buen liderazgo, como lo es Madero, como los es Josefina, como lo es Romero Hicks, Larios, Ruffo. (…) El hecho de que haya más propuestas le va a dar más opción a los militantes de poder escoger entre todos”, sostuvo el coordinador parlamentario.

El colimense Jorge Luis Preciado descartó que esta ola de “destapes” anticipados rumbo a la dirigencia nacional de su partido, prolongue la fractura que vive la bancada panista en el Senado.

“Creo que eso no nos debe generar ruido, ningún conflicto, qué bueno que haya más liderazgos que se están apuntando para la dirigencia nacional. Y qué bueno que con la reforma estatutaria que hicimos y que va a concluir el 10 de agosto, pues ya van a ser los 400 mil militantes del PAN que van a decidir quién consideran que debe ser el próximo Presidente del PAN”, apuntó.

Mientras tanto, la bancada del PAN en la Cámara de Diputados no se ha “contaminado” de estos vientos de cambio. Por lo pronto, ningún Diputado panista se ha autopostulado como posible sucesor de Gustavo Madero, o por lo menos, no lo ha hecho público.