Una pelea a balazos entre mandos de la policía municipal, donde uno de ellos quedó herido de gravedad, desató un enfrentamiento de policías estatales y pobladores que se manifestaron, destrozaron y quemaron parte del edificio de la Presidencia Municipal de Huactzinco, Tlazcala.
Ciudad de México, 30 de agosto (SinEmbargo).- Una manifestación de pobladores terminó en un enfrentamiento con policías estatales luego de que los civiles quemaron y destrozaron parte del edificio de la Presidencia Municipal de Huactzinco, Tlaxcala, en protesta a raíz de una pelea a balazos entre dos mandos de la Policía Municipal en donde uno de ellos resultó herido de gravedad.
De acuerdo a la información trascendida, ésta mañana, durante el cambio de turno de la policía municipal de San Juan Huactzinco, el Comandante, Oscar Hernández se enfrentó a balazos con el subdirector Rufino Guzmán Corona.
El subdirector resultó herido de consideración y fue trasladado por particulares a la Secretaria de Salud de Tlaxcala en donde lo reportan delicado.
Después de la pelea los familiares del subdirector Guzmán Corona acudieron a la presidencia municipal para exigir que el caso no quede impune y castiguen al comandante.
Sin embargo, no obtuvieron mayor respuesta porque el comandante huyó. Los familiares y pobladores se molestaron y empezaron hacer destrozos en el edificio municipal mientras que otros civiles se sumaron a la gresca: lanzaron piedras y quemaron parte del inmueble.
Unos policías estatales que trataron de mediar el asunto fueron agredidos a pedradas Las autoridades respondieron a la protesta y enviaron; estos se enfrentaron con los pobladores, de acuerdo a información preliminar y un comandante herido
El Presidente municipal, Antonio Robles Pineda indicó que la pelea entre los jefes policiacos fue presuntamente por rencillas personales y “conflicto de disciplina”. El edil, también dijo que el subdirector fue el primero que sacó el arma, disparó pero erró, en tanto que el Comandante respondió y lo hirió en la pierna y brazo.
Sin embargo, familiares del subdirector aseguran que recibió cuatro disparos y uno de estos le perforó el hígado, lo que lo tiene entre la vida y la muerte.
La familia asegura que el conflicto no fue por conflictos personales, sino que aseguran que fue por delitos y robos en los que altos mandos están presuntamente relacionados y en los que el subcomandante no aceptó participar.