Madrid, 30 oct (dpa) – Michelle Bachelet regresa hoy a Chile con el compromiso de España de asesorar y apoyar a su país en la lucha antiterrorista tras los atentados con bomba de los últimos meses, así como con el respaldo español a su perseguida renegociación del Acuerdo de Asociación con la Unión Europea (UE).
“Nos vamos con una sensación muy optimista, ha sido una visita de Estado fructífera”, aseguró la Presidenta tras reunirse con el jefe del gobierno español, Mariano Rajoy, en el Palacio de La Moncloa.
Uno de los convenios que suscribieron los dos países es sobre lucha contra el terrorismo. “Lo que permite es dar el marco estable, concreto, jurídico a lo que se ha conversado”, explicó Bachelet.
Rajoy comprometió el asesoramiento de España, que en este tema cuenta con amplios conocimientos tras décadas sufriendo el terrorismo del grupo independentista vasco ETA.
“Como consecuencia de nuestra historia tenemos experiencia en esta materia y la ponemos siempre a disposición de quien tenga necesidad de luchar y ser eficaz contra el terrorismo”, dijo.
En los últimos meses hubo una serie de ataques con bombas a lugares públicos en Chile en los que las sospechas principales apuntan a grupos anarquistas. A principios de septiembre, uno de ellos dejó 14 heridos en el tren subterráneo de Santiago.
El ministro del Interior chileno, Rodrigo Peñailillo, estuvo ya en España recientemente por este asunto y próximamente será su homólogo español, Jorge Fernández Díaz, el que viajará al país latinoamericano “para ayudar en todo lo que sea necesario para garantizar la seguridad de los ciudadanos chilenos”, dijo Rajoy.
Para Bachelet, “esa visita va a ser un elemento muy positivo”, ya que en ella se concretarán los temas en los que se va a trabajar.
Junto a la cooperación española en materia antiterrorista, Bachelet obtuvo en esta primera visita de Estado a España en su segundo mandato el respaldo de Madrid a su pretensión de renegociar del Acuerdo de Asociación con la Unión Europea, en vigor desde 2005.
“Contará para ello con todo el apoyo de España”, dijo Rajoy. Bachelet tiene también el respaldo de la canciller Angela Merkel, que obtuvo durante su visita previa a Alemania.
Rajoy y Bachelet definieron las relaciones entre sus países como “excelentes” y se felicitaron por comenzar a trabajar juntos en 2015 como miembros no permanentes del Consejo de Seguridad de la ONU.
La Presidenta de Chile, que ya realizó una visita de Estado a España en 2006, durante su primer mandato, estuvo en el Congreso de los Diputados antes de reunirse con Rajoy y de participar en un foro económico organizado por el diario “El País”.
En la cámara baja del Parlamento español, representantes de la izquierda gritaron en su presencia vivas a Chile y al Presidente Salvador Allende. La Presidenta es hija de Alberto Bachelet, un militar que se mantuvo fiel al gobierno en el golpe de Estado que el socialista sufrió en 1973. Su padre fue torturado en prisión, condenado por “traición a la patria” y murió en 1974.
Ante Diputados, Senadores y miembros del gobierno español, Bachelet habló del malestar ciudadano con la clase política tanto en su país como en España. Y ella y el jefe del Ejecutivo español se pronunciaron de nuevo sobre el tema en La Moncloa ante las preguntas de la prensa española, en un momento en el que se han destapado nuevos escándalos de corrupción en el Partido Popular (PP) de Rajoy.
“Quien la hace, la paga”, dijo este, a quien estos casos de corrupción en la formación conservadora amenazan con complicarle mucho 2015, un año con elecciones municipales y autonómicas en mayo y generales en noviembre. Esta semana pidió perdón públicamente.
“Lo importante es cómo desde los partidos y gobiernos podamos asegurar prácticas de buena política para que los ciudadanos se den cuenta de que se necesitan instituciones”, dijo Bachelet.
La Presidenta chilena tenía esta tarde en su agenda una reunión con el líder de la oposición, el socialista Pedro Sánchez, antes de ofrecer una recepción a los reyes de España, Felipe y Letizia, y volar de vuelta a Santiago por la noche.
