“La atmósfera del encuentro fue profesional y hubo un acuerdo general sobre la ruta hacia adelante para un diálogo sustantivo futuro, cuyo calendario y ubicación será determinado a través de canales diplomáticos”, señaló el Departamento de Estado.

Las delegaciones de ambos países discutieron la metodología, tópicos y la estructura de las próximas reuniones.

“Cada parte trajo a la mesa preocupaciones sobre asuntos de derechos humanos y ambos lados expresaron su disposición a discutir un amplio abanico de asuntos en futuras pláticas sustantivas”, apuntó la oficina del portavoz de la diplomacia estadunidense.

La delegación estadunidense fue encabezada por el secretario de Estado adjunto de la Oficina de Democracia, Derechos Humanos y Trabajo, Tom Malinoski.

Representantes de alto nivel de Estados Unidos y Cuba han celebrado discusiones sobre la normalización de relaciones alternadamente en Washington y La Habana.

La semana antepasada, el Departamento del Tesoro estadunidense retiró a unas 60 empresas cubanas de la lista de corporaciones presuntamente ligadas con actividades ilegales, incluidas con organizaciones de tráfico de drogas o terroristas.

Entre las empresas que salieron del listado figuran algunas con domicilio en Estados Unidos como Travel Services, en Hialeah, Florida, o en Panamá, como Abastecedora Naval e Industrial, y la agencia de viajes Guama.

También quedaron fuera de la lista barcos con bandera cubana como el Tulip Islands, Caribbean Salvor, Harnamn, Peony Islands, New Grove, Kaspar, Pinecone, Grete, Ravens, Tephys, Pamit y West Islands.

La lista elaborada bajo la Ley de Designaciones de Cabecillas Extranjeros en Narcóticos incluye firmas a las que se prohíbe realizar transacciones comerciales con estadunidenses.

Cuba expresó además su interés de ser eliminada de la Lista de Estados Patrocinadores del Terrorismo, del Departamento de Estado.