Al realizarle la necropsia, se encontraron en su interior desde plásticos –vasos, bolsas, guantes, tubos– hasta redes de pescas y cuerdas. Los expertos no están seguros de que los desechos fuesen la causa de la muerte, porque algunos llevaban bastante tiempo en su interior.
Ciudad de México, 4 de diciembre (RT).- Un cachalote murió en una playa de Escocia con 100 kilos de basura en su estómago lo que, según los especialistas, pudo provocar que perdiera su movilidad y quedarse encallado.
La organización Scottish Marine Animal Strandings Scheme (SMASS), dedicada a la protección de especies marinas en Escocia, explicó en un comunicado que cuando llegaron este fin de semana a la playa de Seilebost, en la isla de Harris, el cachalote llevaba muerto 48 horas.
Al realizarle la necropsia, se encontraron en su interior desde plásticos –vasos, bolsas, guantes, tubos– hasta redes de pescas y cuerdas. Los expertos no están seguros de que los desechos fuesen la causa de la muerte, porque algunos llevaban bastante tiempo en su interior.
“El animal no estaba en condiciones particularmente malas, y aunque es ciertamente plausible que esta cantidad de escombros fuera un factor en su encallamiento vivo, en realidad no pudimos encontrar evidencia de que esto haya impactado u obstruido los intestinos”.
Sin embargo, la organización advirtió que la cantidad de plástico encontrado es “horrible” y sirve “una vez más” para demostrar “el peligro que la basura marina y las redes de pesca perdidas o desechadas pueden causar en la vida marina”.
UN PROBLEMA GLOBAL
Asimismo, recordó que este es un ejemplo de un problema global causado por “una gran cantidad de actividades humanas”. “La ballena tenía desechos en el estómago que parecían haberse originado tanto por causa del sector terrestre como del pesquero, y podría habérselos tragado en cualquier punto entre Noruega y las Azores”, añadió.
La organización comunicó que el animal, que pesaba unas 20 toneladas, se encontraba rodeado por “un frágil ecosistema de dunas”, por lo que no hubo opción de remolcarlo hasta el mar y se enterró en ese mismo lugar.
“Estuve allí el jueves con los guardacostas cuando la pobre y hermosa criatura falleció (…) qué pena ver una criatura tan bella sucumbir de esta manera”, lamentó en Facebook el fotógrafo Melvin Nicholson, quien relató en un extenso mensaje cómo divisó al animal todavía vivo.
La publicación en las redes sociales de SMASS, con fotos del cachalote, ha sido compartida casi por 9 mil personas y son cientos los comentarios en los que se denuncia lo ocurrido.
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