Ciudad de México, 5 de diciembre (SinEmbargo).- A partir del próximo 1 de enero Facebook anunció que cambiará su política de privacidad. La noticia –como suele ocurrir cada vez que la red social hace un anuncio similar– no resultó ser del agrado de gran cantidad de sus usuarios por lo que muchos de ellos manifestaron su inconformidad a través de sus muros, de cara a los nuevos cambios.
Los nuevos cambios por los que se va a regir la red social que suma ya mil 200 millones de usuarios en todo el mundo, modificará las condiciones de Facebook, así como su política de datos y la de actualización de cookies.
De acuerdo con el diario español El Economista, la importancia de estas novedades “reside fundamentalmente en la comercialización de productos y servicios, uno de ellos puede ser la ubicación por medio de la cual Facebook podría recomendar servicios de la zona, especialmente para aquellos que usan la red a través de su smartphone“.
Sin embargo, la lectura que las redes sociales hace sobre las preferencias suele despertar la paranoia en gran cantidad de usuarios y más que un ajuste de rutina lo ven como una intromisión.
Así las cosas, desde los últimos días de noviembre una oleada de usuarios de Facebook empezó a publicar una “notificación especial de privacidad” en su muro, en un intento por proteger sus publicaciones y fotos y evitar que éstas sean usadas sin su permiso. Para su mala suerte, esto no les servirá de nada.
De acuerdo con el sitio CNet, las notificaciones recientes pueden haber sido desatadas por una serie de correos electrónicos y notificaciones enviados por el mismo equipo de Facebook en relación a los cambios en sus políticas de datos y términos de uso de la red social que se aproximan en menos de un mes.
Por supuesto, cada persona puede publicar en su cuenta de Facebook lo que se le pegue en gana. Sin embargo, más allá de lo irritante que resulte el nivel de aprensión de muchos de nuestros contactos, lo cierto es que el mayor problema de estas “afirmaciones de privacidad” es que sobrepasan la candido e ingenuo y se vuelven una muestra palpable de incoherencia o, mejor dicho, de falta de memoria.
Dicho de otra manera, la gente no puede cambiar nada más porque sí los términos de la privacidad a los que acordaron en un principio cuando abrieron una cuenta en Facebook, ni tampoco pueden elegir cuáles términos acatar y cuáles no.
Esto pone en evidencia una verdad sabida por todos: al darse de alta en Facebook los usuarios aceptan (sin leer, la mayoría) sus términos y condiciones.
Aún así, la dichosa notificación sigue publicándose y esparciéndose. Mientras tanto, a pesar de que constantemente las noticias hablen de seguridad digital violada y de que programas gubernamentales en todo el mundo amenacen la privacidad en la red, el usuario común se muestra más preocupado acerca de servicios como Facebook. Y no sólo, muchas veces quienes se quejan siguen publicando cosas cada día, incluso más de una vez, según un estudio de septiembre de 2013 del centro Pew Internet.
No obstante, eso no quiere decir que los términos y condiciones de uso de Facebook o cualquier otra red social puedan decir cualquier cosa, ya que de ser contrarios a la ley (dependiendo del país), por mucho que el usuario acepte las condiciones, estas serán nulas. en este caso, se entiende la incomodidad ante los nuevos términos como el de geolocalización.
“Si decides compartir tu ubicación, puede que veas menús de restaurantes cercanos o actualizaciones de amigos que se encuentren en la zona”, anunció la empresa hace días. No obstante hay muchos usuarios que consideran este un dato de carácter personal que no debiera ser puesto en evidencia a la menor provocación.
Mientras tanto, Facebook se defiende al decir que sólo es dueño de la actividad en el servicio. “Tú eres dueño de todo el contenido y la información que publicas en Facebook, y tú puedes controlar cómo se comparte esa información a través de la configuración”, escribió la compañía en página sobre los términos de uso y que un portavoz de Facebook reiteró en un comunicado.
En cuanto a si sirve la protesta hecha a modo de cadena, la respuesta es lamentablemente negativa. Durante años, las políticas de privacidad en la industria de la tecnología han sido una mezcla de lenguaje especializado y complicada jerga legal, mientras que los usuarios simplemente están acostumbrados a dar clic en el botón “Aceptar” del apartado de términos y condiciones y seguir adelante.
En cualquier caso, escribe el diario español El Mundo: “es irrelevante que uno publique ese mensaje en su muro para transmitir un desacuerdo con las nuevas políticas, ya que Facebook es un servicio privado con sus propias reglas y por tanto, si quieres hacer uso de su servicio, tienes que someterte a sus normas, no tienes capacidad de negociación”.