México, 6 Feb. (Notimex).- A fin de preservar más de 200 abanicos de la época colonial, que forman parte de la colección del Museo Nacional de Historia (MNH) “Castillo de Chapultepec”, expertos del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) sometieron las piezas a un proceso de restauración.
Luego de los trabajos de diagnóstico y conservación preventiva, realizados como parte del proyecto “Tratamientos de conservación emergente aplicados a la colección de abanicos”, cerca del 80 por ciento de las piezas han recuperado su estabilidad necesaria para ser expuestas o investigadas.
El proceso de rehabilitación de la colección, compuesta por 230 abanicos de marfil, concha, hueso y madera, de entre los siglos XVII y XX, estuvo constituido en dos fases. La primera de ellas consistió en la identificación según las condiciones de cada pieza, y en la segunda se trataron las estructuras de los mismos.
De acuerdo con María Esther Gámez González, restauradora responsable del proyecto, el sistema de calcomanías estuvo basado en los colores del semáforo, donde el color verde es para las piezas que pueden exhibirse, el amarillo para las que necesitan alguna intervención y el rojo para las que no pueden manipularse sin antes ser restauradas.
“Con este proceso llevamos el 50 por ciento de la colección del amarillo al verde, es decir, que el 80 por ciento de los 230 abanicos ahora está estable”, informó Emmanuel Lara, alumno de la Licenciatura en Restauración de la Escuela Nacional de Conservación, Restauración y Museografía (ENCRyM).
Lara abundó que tras la limpieza superficial y profunda, la colección de abanicos del Castillo de Chapultepec fue depositada en un contenedor con estuches individuales, de tal manera que las piezas puedan ser consultadas por investigadores, sin la necesidad de manipularlas.
Los trabajos de restauración, realizados por Lara, Mariana Almaraz Reyes y Ana Lanzagorta Cumming, estudiantes de la ENCRyM, les valieron la invitación a participar en el “Viena Congress. The Decorative: Conservation and applied arts”, celebrado en 2012 por el International Institute for Conservation of Historic and Artistic Works (IIC, por sus siglas en inglés).
Al respecto, Mariana Almaraz dijo que de los 230 abanicos del Museo Nacional de Historia, eligieron el más representativo de toda la colección, por la variedad de sus materiales como concha nácar y madera.
La escena principal, detalló, “es una litografía sobre papel, que además está decorada a mano con la técnica de acuarela y gouache, y que cuenta con adornos de plata sobredorada en las varillas y plumas de ave en el friso”.
Dicho abanico fue el motivo de un cartel realizado por los estudiantes, en el cual retrataron su proceso de restauración.
“Nuestro cartel fue exhibido durante el congreso del IIC, junto con los de otros estudiantes y profesionales de diferentes partes del mundo, además participamos en todas las conferencias y actividades académicas”, refirió Almaraz.