La petición hecha por Pablo Lyle consistía en suspender el arresto domiciliario que comenzó el pasado 8 de abril para viajar a México a trabajar y juntar 100 mil dólares para su defensa; el juez Alan Fine negó este permiso al actor de Mirreyes vs Godínez.
Ciudad de México, 6 de junio (SinEmbargo).– Un juez de Miami negó retirarle al actor mexicano Pablo Lyle el arresto domiciliario, que comenzó el pasado 8 de abril, para que pudiera regresar a México. El actor está acusado de homicidio involuntario, por la muerte de un anciano de 63 años a quien golpeó en un altercado vial.
Lyle arribó al juzgado en compañía de sus abogados la mañana de este 6 de junio para conocer la respuesta del juez Alan Fine.
La solicitud fue hecha por el actor de Mirreyes vs Godínez con el propósito de poder viajar a México, trabajar y juntar los 100 mil dólares para su defensa. El permiso fue denegado.
Según la información de medios locales, el arresto domiciliario del actor tuvo algunas modificaciones, que dictan que el actor tendrá que permanecer en su domicilio de 7:00 am a 6 pm.
“Ha estado encerrado 24 horas monitoreado con GPS. No ha visto la luz del sol”, refirió uno de sus abogados.
El actor puede salir a reuniones con sus abogados, con su familia e ir a la iglesia diariamente, siempre y cuando pida permiso con anticipación.
El próximo 11 de junio, el mexicano recibirá sentencia, por lo que tendrá que presentarse de nuevo ante la Corte.
ES ACUSADO DE HOMICIDIO INVOLUNTARIO
El actor Pablo Lyle fue acusado de homicidio involuntario por la Corte de Miami, por un caso del altercado de tránsito, en el que le propinó un golpe a un anciano de 63 años, quien falleció días después.
En semanas pasadas, Lyle se presentó frente al juez Alan Fine de la Corte de Miami, para que se le leyeran los nuevos cargos que pasaron de agresión a homicidio involuntario luego de la muerte del agredido. La pelea ocurrió el pasado 31 de marzo con Juan Ricardo Hernández, un hombre de origen cubano con quien el actor y su cuñado Lucas Delfino estaban discutiendo por una mala maniobra.
En esa audiencia, el actor se declaró “no culpable” y el magistrado le leyó los nuevos cargos.
