Ciudad de México, 6 diciembre (SinEmbargo).- Con el estreno de la nueva temporada de la serie Vera, por Film & Arts, vuelve a ponerse en el centro de atención el oficio de detective aplicado a una mujer.
Se trata, como sabemos, de una profesión que asociamos con hombres pasados de peso, hastiados de la vida, generalmente cínicos y la mayoría de las veces perdedores, pero que en estos nuevos tiempos televisivos han sido reemplazados por mujeres maduras, con aspecto generalmente inofensivo.
Sin embargo, en la figura de la impresionante actriz inglesa Brenda Blethyn, una detective puede volverse salvaje, cáustica, astuta y sin duda valiente.
Vera está basada en los libros de Ann Cleeves (1954), autora británica y prolífica, verdadera luminaria de la nueva generación de autores dedicados al género policial.
LAS DAMAS PERSPICACES
Entre las mejores detectives de la pantalla chica no puede faltar el personaje de la legendaria serie Expedientes X, Dana Scully, soberbiamente interpretado por la actriz Gillian Anderson, quien esta semana ha sido noticia por haberse desnudado junto a una anguila, protestando contra la pesca indiscriminada.
Como agente especial del FBI fue la compañera perfecta del también agente Fox Mulder, el inolvidable personaje de David Duchovny.
Anderson ahora “trabaja” como psiquiatra de Lecter en la serie Hannibal, pero es difícil verla y no evocar sus peripecias detectivescas, tanto la marcó dicho personaje en X Files.
Aunque en CSI Las Vegas el mero mero era Grissom (personaje a cargo de William Petersen), su compañera de equipo, Marg Helgenberger, en la voz y en la figura de Catherine Wilows, no se quedaba atrás en eso de salir al frente para poner el mundo en orden.
Kathryn Morris como la investigadora Lilly Rush en Cold Case, serie que concluyó en 2010.
Olivia Dunham u Olivia Warren (Anna Torv) en Fringe, muestra el caso de una hermosa y particularmente invencible agente especial del FBI dedicada a controlar fenómenos que no tienen mucha explicación.
Lidera el equipo científico del doctor Walter Bishop, personaje a cargo del actor australiano John Noble.
Una de nuestras favoritas es sin duda la despistada y rellenita Patricia Arquette, quien al frente de Medium demostró lo buena detective que puede ser y sobre todo lo creíble que resulta en sus raptos paranormales, algo que no llama mucho la atención si se piensa que la actriz estuvo mucho tiempo casada con Nicolas Cage (¡Sarcasmo!, diría Sheldon Cooper en The Big Bang Theory).
Una detective peculiar y reciente es la encarnada por la estadounidense Elisabeth Moss para el debut televisivo de la directora neocelandesa Jane Campion en la complicada y a veces demasiado melodramática serie Top of the Lake.
Moss, que es una gran actriz como lo demostró en Mad Men, remontó un guión a veces demasiado oscuro (en el medio casos de abusos de niños, un tema difícil de tratar y de digerir como espectador), llevando a cabo investigaciones en las que parecía estar demasiado involucrada personalmente.
El último capítulo la redime porque la detective Robin Griffin termina descubriendo lo que nadie podría imaginarse en un final tan crudo como crudos fueron los siete capítulos dirigidos por la célebre Campion.
En español, mucha risa causaba la actriz gallega María Pujalte, estrella de la muy vista serie Los misterios de Laura, de la TVE. Como la detective Laura Lebrel, un marido que era su jefe y del que se estaba divorciando en buenos/malos términos (un sublime Fernando Guillén Cuervo) la volvía loca, aunque la apoyaba en los momentos más difíciles, que eran todos.
Su aire de mosquita muerta, su rostro como distraído y esa manera de abrir la bocota en el momento menos oportuno hacían caer en la trampa a los asesinos más feroces. Al final, Laura siempre resolvía los casos.
Están las detectives hermosas y con glamour, está Vera, en la figura de la madura Brenda Blethyn y está la diosa Helen Mirren en Prime Suspect, una policía por todo lo alto y, como corresponde, la protagonista de su propia serie, que para eso es La Reina de las actrices.