Las agresiones se acreditaron en tres preescolares privados, cuatro escuelas primarias y una secundaria públicas de la Ciudad de México; un preescolar comunitario del CONAFE en Hidalgo, y una secundaria pública en Tabasco.
De acuerdo con la CNDH, los hechos se disfrazaron como “juegos”, “bromas” o “cariños”, lo que impediría que las y los menores de edad afectados identifiquen los ataques y decidan ocultarlos por temor y vergüenza.
Ciudad de México, 7 de enero (SinEmbargo).– La Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) acreditó la violación a derechos humanos como el de una vida libre de violencia y el acceso a la educación de 9 niñas, 7 niños y 4 adolescentes de 10 escuelas de educación básica ubicadas en Hidalgo, Tabasco y la Ciudad de México, por lo que emitió una recomendación con la que demanda a la Secretaría de Educación Pública (SEP) reparar el daño a las víctimas directas e indirectas e iniciar su inscripción al Registro Nacional de Víctimas.
En la Recomendación 86/2018, también dirigida al Secretario de Educación Pública, al presidente de la Junta de Gobierno del Consejo Nacional de Fomento Educativo (CONAFE), a la Secretaria de la Función Pública y al Gobernador de Tabasco, la CNDH concluyó que docentes o autoridades escolares, así como los mismos alumnos, violentaron a niñas, niños y adolescentes, situaciones que se agravaron porque docentes no supervisaron continuamente a las y los estudiantes.
Las agresiones se acreditaron en tres preescolares privados, cuatro escuelas primarias y una secundaria públicas de la Ciudad de México; un preescolar comunitario del CONAFE en Hidalgo, y una secundaria pública en Tabasco.
“Las agresiones ocurrieron al interior de instalaciones educativas, en horarios escolares, cuando los alumnos se encontraban sin vigilancia ni supervisión de las autoridades escolares o educativas, a pesar de la regla general de que en las escuelas de educación básica por ningún motivo y bajo ninguna circunstancia los alumnos deben quedar solos”, señaló el organismo defensor de derechos humanos en un comunicado.
De acuerdo con la instancia, las agresiones se disfrazaron como “juegos”, “bromas” o “cariños”, lo que impediría que las y los menores de edad afectados identifiquen los ataques y decidan ocultarlos por temor y vergüenza.
La CNDH determinó, luego de revisar nueve expedientes, que en todos los casos había condiciones que propiciaban la presencia de violencia escolar, como infraestructura escolar inadecuada, la falta de supervisión o vigilancia, bajo perfil profesional del personal docente, además, dijo que aunque se conocieron las agresiones “las autoridades fueron negligentes y omisas en la investigación y atención de las personas afectadas, antes, durante y después de los hechos violentos”.
Por ello, la comisión solicitó a la Secretaría de la Función Pública dar seguimiento de las quejas que presente en contra de los servidores públicos involucrados y que la Recomendación conste en sus expedientes personales; le pidió diseñar e impartir un curso integral al personal del Órgano Interno de Control en la Autoridad Educativa Federal y del Órgano Interno de Control en el CONAFE, sobre capacitación y derechos humanos, de acceso a la justicia en sede administrativa y el deber de investigar con debida diligencia la violencia contra menores de edad.
Al Gobernador de Tabasco le solicitó la reparación del daño de una de las víctimas y las víctimas indirectas, así como diseñar e impartir en el plazo de tres meses a partir de la aceptación de la Recomendación un curso de capacitación y sensibilización al personal de la Secretaría de Educación estatal, sobre los efectos que causa la violencia escolar en las personas menores de edad.
