Damasco, 8 feb (EFE).- El Gobierno sirio culpó hoy a la comunidad internacional del retraso en la destrucción de su arsenal químico por no prestar los equipos necesarios, en medio del deterioro de la seguridad, lo que considera que dificulta aún más el proceso.
Según la agencia oficial de noticias Sana, el Ministerio sirio de Asuntos Exteriores envió dos cartas idénticas a la ONU y al Consejo de Seguridad de ese organismo para criticar las presiones internacionales que su país recibe.
Damasco se comprometió a entregar sus armas químicas para que sean destruidas en los plazos establecidos con la Organización para la Prohibición de las Armas Químicas (OPAQ).
El régimen explicó que actualmente hay un retraso de las operaciones debido al deterioro de la situación de seguridad en el país y la escasez de equipos para el embalaje, la carga y el transporte de dicho arsenal.
Por eso, pidió a la comunidad internacional que “asuma sus responsabilidades para presentar la ayuda a Siria con el objetivo de superar estos desafíos, que previsiblemente harán retrasar la operación”.
“Siria está haciendo esfuerzos para preparar el transporte de una gran cantidad de productos químicos y acelerar su envío fuera del país para cumplir con la operación lo antes posible”, afirmó en la carta.
El Gobierno acusó a los grupos terroristas, como denomina a los rebeldes, de haber atacado almacenes de armas químicas y cargas que estaban de camino al puerto de Latakia, en la costa mediterránea.
Además, hizo hincapié en que los equipos técnicos que han llegado a Siria “no están preparados para funcionar” y que varios países han rechazado ofrecer ayuda a Siria.
El pasado 6 de febrero, la coordinadora de la misión de la OPAQ, Sigrid Kaag, consideró posible destruir el arsenal sirio en los plazos previstos.
“Creemos que la fecha límite del 30 de junio todavía puede cumplirse”, dijo la diplomática holandesa después de reunirse a puerta cerrada con los miembros del Consejo de Seguridad de la ONU.
Kaag, que recordó que la responsabilidad final recae en el gobierno del presidente Bachar al Asad, hizo un llamamiento a las autoridades sirias para que “aceleren” la entrega del resto de las armas en el puerto de Latakia para su posterior destrucción.
Según el calendario original, todas las sustancias químicas en poder del régimen sirio, excepto el isopropanol, debían haber salido del territorio sirio como muy tarde el pasado miércoles para que fueran neutralizadas en la primera mitad de 2014. EFE