La Fiscalía detalló que los vehículos fueron asegurados en diversos enfrentamientos en la entidad y que están relacionados con 18 expedientes.
Ciudad de México, 8 de septiembre (SinEmbargo).– La Fiscalía General de la República (FGR) decomisó y destruyó 25 vehículos blindados en Reynosa, Tamaulipas, presuntamente pertenecientes al crimen organizado, pues están relacionados a distintas carpetas de investigación.
De acuerdo con un comunicado de la FGR, la Fiscalía federal en Tamaulipas dio cumplimiento al Programa Destino de Bienes y Objetos del Delito, dispuesto en el Código Nacional de Procedimientos Penales, el cual prevé la destrucción de los objetos que son instrumentos del delito.
El evento de destrucción de 25 vehículos con blindaje artesanal se llevó a cabo en las instalaciones de la Fiscalía federal de Tamaulipas, ubicadas en la ciudad de Reynosa.
#FGR, en su Fiscalía Federal en @FGR_Tamps, destruyó 25 vehículos con blindaje artesanal, denominados “monstruos”, en cumplimiento al Programa Destino de Bienes y Objetos del Delito.
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— FGR México (@FGRMexico) September 8, 2024
La Fiscalía detalló que los vehículos fueron asegurados en diversos enfrentamientos en la entidad y que están relacionados con 18 expedientes.
Asimismo, la dependencia señaló que las unidades, denominadas como “monstruos”, presuntamente fueron utilizadas por personas pertenecientes a grupos delictivos.
“En el desarrollo del acto, se contó con la presencia del Ministerio Público Federal (MPF), quien coordinó el evento de identificación y realizó las diligencias. Peritos oficiales y personal del Órgano Interno de Control de la FGR, verificaron que el procedimiento se llevara a cabo en los términos de la norma aplicable”, se lee en el boletín.
Los narcotanques aparecieron en México alrededor del 2010, cuando el Cártel del Golfo y los Zetas innovaron con el desarrollo de los vehículos modificados. Por lo general, se adaptaban las camionetas con blindaje total diseñado para soportar los ataques de otros cárteles.
Los narcos usan talleres clandestinos para la adaptación de los automotores, en su mayoría camionetas y SUV como el Ford F-350, Dodge RAM y Chevrolet Tahoe.
Los vehículos blindados se encuentran por lo general en zonas azotadas por la violencia de los cárteles. Tamaulipas y el estado de Michoacán, al oeste, están en el centro de una feroz disputa entre múltiples cárteles.
En dichos estados, las alianzas cambiantes y la fragmentación de los cárteles de drogas han desencadenado una espiral de violencia que, además de los narcotanques, ha evolucionado al uso de lanzagranadas y drones con capacidad de arrojar explosivos en esos campos de batalla.