Saúl e Ivonne perdieron la vida tras un asalto cometido la noche del lunes 5 de noviembre al interior de una tienda en la capital poblana. Los hermanos intentaron defenderse de sus atacantes, quienes se llevaron el dinero de la caja, pero sólo alcanzaron a apuñalar a uno de los atacantes, mientras otro de ellos les disparaba.
El asesinato de los hermanos Flores Reyes provocó la indignación de los habitantes de la colonia Aquiles Serdán, así como de amigos y profesores de los jóvenes. Cuestionamientos como “por qué le pasa esto a gente buena” o “la violencia llegó a mi salón de clases”, son una muestra de la inseguridad que se vive en la entidad gobernada por José Antonio Gali Fayad.
A la fecha, ocho jóvenes universitarios de Puebla han sido asesinados por sus propios compañeros de clases e, incluso, por quienes consideraban sus amigos. Aunque en la mayoría de los casos la intención era secuestrarlos para conseguir dinero, en todos ellos la situación se salió de control debido a que las víctimas reconocieron a sus plagiarios; entonces, decidieron asesinarlos.
Puebla/Ciudad de México, 8 de noviembre, (SinEmbargo/Central).- La noche del lunes 5 de noviembre, Saúl e Ivonne atendían un establecimiento ubicado en la colonia Aquiles Serdán de la capital poblana. Cuatro sujetos armados ingresaron al lugar para asaltaros. Los hermanos opusieron resistencia, pero fueron atacados a balazos.
Los atacantes huyeron del lugar con el dinero sustraído de la caja. Policías acordonaron la zona sin que hasta el momento hayan podido detener a los responsables.
El asesinato de los hermanos Flores Rey provocó la indignación de sus familiares, amigos y profesores. Quienes exigieron castigo a los culpables y una pronta investigación para deslindar responsabilidades.
Con lágrimas en los ojos y sin mucho que decir, compañeras de Ivonne, de 19 años de edad, lamentaron que “este tipo de situaciones le pasen a las personas más buenas”.
La noche de ayer, los cuerpos fueron velados entre amigos, familiares y conocidos. Los dueños del establecimiento donde fueron asesinados, también se presentaron.
Una de las compañeras de Ivonne, en llanto, solo alcanzó a decir que cuando ven noticias de este tipo de situaciones “jamás piensas que le va a pasar a alguien tan cercano y que quieres mucho”.
El resto de las compañeras de Ivonne platicaron que la joven siempre había trabajado y estudiado, le gustaba mucho la historia y era muy buena estudiante pues siempre sobresalía por sus calificaciones.
Los jóvenes fueron velados entre la compañía de sus seres queridos, música y muchas flores. Tenían cerca de 10 coronas entre las que destaca la que llevaron estudiante de Criminología de la Facultad de Derecho y Ciencias Sociales de la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla (BUAP), pues Ivone cursaba el primer semestre de la carrera.
Afuera de su casa, había una lona blanca, mesas y sillas, pues la familia ofrecía de comer a todos aquellos que llegaron para acompañarlos y darles el pésame. Los dos hermanos serán enterrados mañana por la tarde.
“LA VIOLENCIA LLEGÓ A MI SALÓN”
A través de una carta escrita en su cuenta de Facebook, la maestra Karla Lizaola lamentó la muerte de su alumna, Ivonne Flores Rey, quien fue asesinada a sangre fría junto a su hermano la noche del pasado lunes 5 de noviembre.
En la carta, la docente narró cómo vivió la terrible noticia de perder a una alumna, pues se sentía sumamente conmocionada e impotente.
Asimismo la académica le pidió disculpas a su estudiante, pues aseguró que le falló como ciudadana, ya que ante la violencia que se vive en el estado, nunca alzó la voz.
Yo vi a México ahogarse en la corrupción, vi a mi estado someterse al narcotráfico, vi como los delitos aumentaban cada día y como las personas dejaron de temerle a la violencia y empezaron a ser indiferentes. Dejé que todo eso sucediera sin hacer algo, sin levantar la voz”, dice el mensaje.
Recientemente, la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla (BUAP), emitió un comunicado a través de su cuenta de Facebook, expresando su indignación por la trágica muerte de la alumna, que estudiaba Criminología en la Facultad de Derecho y Ciencias Sociales.
Tras el hecho, un grupo grande de vecinos de la colonia Aquiles Serdán y otras colonias ubicadas al sur de la capital poblana, la cuales, en su mayoría son habitadas por integrantes de la organización Antorcha Campesina, se manifestaron, la mañana del martes, frente a Palacio Municipal para exigir una reunión con la titular de la Secretaría de Seguridad Pública y Tránsito Municipal (SSPTM), María de Lourdes Rosales Martínez.
Tras la manifestación fueron atendidos por Rosales Martínez, directora de Seguridad Pública Municipal, Humberto Rivera, el jefe del Sector Seis, Ernesto Escamilla y representantes de la Secretaría de Gobernación Municipal y en la reunión las autoridades se comprometieron a mejorar los esquemas de prevención del delito y reacción policial.
ESTUDIANTES, BLANCO DE VIOLENCIA
A la fecha, ocho jóvenes universitarios en Puebla fueron asesinados por sus propios compañeros de clases e, incluso, por quienes consideraban sus amigos. Aunque en la mayoría de los casos la intención era secuestrarlos para conseguir dinero, en todos ellos la situación se salió de control debido a que las víctimas reconocieron a sus plagiarios; entonces, decidieron asesinarlos.
Aún así, los delincuentes ―para quienes en la mayoría de los casos fue su primera vez en realizar este tipo de delito― solicitaron dinero a su familia a cambio del supuesto rescate; y esto, en algunos casos, ayudó a su detención.
De los ocho jóvenes universitarios asesinados, tres estudiaban en la Universidad Popular Autónoma del Estado de Puebla (UPAEP) y tres en la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla (BUAP), uno en el Tecnológico de Monterrey y el último caso registrado en la Universidad de Ciencias y Desarrollo (UDES).