Los padres de familia aseguran que los artefactos explosivos que supuestamente portaban sus hijos les fueron sembrados por los propios cuerpos de seguridad quienes tienen la intención de incriminarlos en hechos delictivos.
Por Ana María Cano e Isabel Andrade
Ciudad de México, 10 de diciembre (SinEmbargo/Provincia).– Con casas de campaña y algunos toldos y lonas, docentes, padres de familia y normalistas instalaron un plantón en el centro de Morelia, Michoacán, el cual, indicaron, se mantendrá de manera indefinida hasta lograr la liberación de los 52 normalistas quienes enfrentan cargos como presuntos responsables de la comisión del delito de violación a la Ley Federal de Armas de Fuego y Explosivos así como de robo con violencia.
De igual forma tomaron y cerraron las instalaciones de la Secretaría de Educación en el Estado (SEE) también de manera indefinida para lograr lo más rápido posible la liberación de los jóvenes estudiantes. Dijeron que las medidas de presión son indispensables para que el gobierno del estado no haga caso omiso de sus reclamos.
Los padres de familia insisten en que sus hijos no son delincuentes y señalaron que los artefactos explosivos que supuestamente portaban les fueron sembrados por los propios cuerpos de seguridad quienes tienen la intención de incriminarlos en hechos delictivos.
Sin embargo, los líderes y quienes representan a los estudiantes de las ocho normales del Estado, no se han presentado ni en las marchas ni el plantón que se mantiene en el centro. Se ha deslindado de las actividades argumentando que son acciones de los padres de familia.
Mientras que habitantes de la comunidad indígena de Caltzontzin, en Uruapan, realizaron un bloque carretero en el Boulevard Industrial a la altura del Cereso local y retuvieron unidades, entre las cuales se encuentra una pipa de Petróleos Mexicanos (Pemex) y una de la Comisión Federal de Electricidad (CFE).