Ciudad de México, 1 de junio (SinEmbargo).- Muy pocos tienen su talento, su voz, su trayectoria en la música pop. Muy pocos también han logrado tirar tantas veces los privilegios y dones obtenidos tras una fantástica carrera profesional.
George Michael, nacido en Londres como Georgios Kyriacos Panaiotou el 25 de julio de 1963, ha vuelto a ser noticia por un episodio ajeno a la música y que muestra su fragilidad frente a su propia personalidad controvertida y a menudo presa de las adicciones y los escándalos narcisistas.
Aunque esta vez ha sido su salud y no su casi enfermiza tendencia a hacerse notar la que lo ha vuelto a poner en el centro de la atención mediática, al saberse por la prensa inglesa que el ex integrante de Wham!, según información proporcionada por el representante del artista, volvió a ser hospitalizado.
Desde el 22 de mayo pasado que George Michael permanecía internado en un hospital londinense, por causas que no fueron reveladas oficialmente, víctima de un colapso y luego de que un amigo llamara a los servicios de emergencia, de acuerdo a los rumores no constatados con certeza.
En todo caso, lo cierto es que por exámenes de rutina o por un “colapso misterioso”, el artista visitó otra vez a los médicos y despertó las alertas en torno a su siempre atribulada existencia.
UNA HISTORIA ACCIDENTADA
En mayo de 2013, George Michael fue internado en un hospital con una herida en la cabeza, luego de haber caído de un automóvil en movimiento en una autopista. Meses antes había sido atendido por neumonía.
En el 2010 pasó ocho semanas en la cárcel por posesión de marihuana y por manejar drogado, luego de que estrellara su Range Rover contra una tienda.
El artista, gran éxito de ventas con temas como "Careless whisper", "Faith" y "Freedom", ha tenido varios problemas de salud en los últimos tiempos, al que se suma sus larga relación con las drogas, un hábito que le ha hecho perder la licencia de conducir y lo ha obligado a realizar trabajos comunitarios para evitar otra temporada en la prisión.
En 2006, fue sorprendido mientras se bajaba los pantalones en un parque en Londres y un grupo de paparazzi lo fotografió en pleno acto sexual con un amigo que no era su pareja habitual de entonces, el diseñador Kenny Goss.
En marzo pasado, el cantante otorgó su primera entrevista en cinco años y en dicho contexto aseguraba haber dejado por completo el consumo de marihuana.
En declaraciones al semanario The Big Issue, para apoyar la salida del disco Symphonica, grabado durante una gira en 2011, Michael, que ha vendido más de 120 millones de copias en todo el mundo, habló de su deseo de dejar atrás las adicciones
“Decidí cambiar mi vida y no la he vuelto a tocar (la droga). Ahora tengo un estilo de vida más sosegado”, afirmó, al tiempo de calificar de “espantosa y horrible” la neumonía que casi lo lleva a la muerte.
La popularidad de George Michael en los 80 y 90 se tradujo en numerosos premios en sus tres décadas de carrera, entre ellos tres Brit, un MTV y ocho postulaciones a los Grammy, de los que ganó dos.
