Maria Kozhevnikova fue la portada de la edición rusa de la revista Playboy hace dos años, días después de haber dejado a su novio. Y ahora la publicación ha dedicado siete páginas a mostrar la belleza de esta sexy siberiana, que desistió de su idea de ser gimnasta profesional para dedicarse a la música y la actuación. Y ahora, a la política.
Según el Daily Mail, Kozhevnikova es hija de un famoso jugador de hockey sobre hielo que, hasta hace poco, se destacaba por su participación en Univers, una serie de TV que gira en torno a la vida de los estudiantes.
Al igual que Anna Chapman, la espía que fue detenida en los Estados Unidos en 2010 junto a otras nueve personas, la flamante diputada surgió del ala juvenil del partido que lidera Vladimir Putin, que en las últimas semanas es blanco de denuncias por fraude en los comicios legislativos en los que se impuso.
Al respecto, Kozhevnikova se ha mostrado en línea con los duros ataques lanzados contra los manifestantes por dirigentes de Rusia Unida. Dijo que las protestas fueron "encendidas por provocadores profesionales" y alertó que eso "puede llevar a una gran cantidad de víctimas entre la gente común".
En los casi diez años posteriores a la caída de la Unión Soviética, el Parlamento ruso fue un combativo bastión de la oposición donde los diputados se enzarzaban en duras discusiones y las votaciones podían ser estrechamente ajustadas.
Todo eso cambió cuando Vladimir Putin ascendió al poder en 1999.
Dominado por el partido de Putin Rusia Unida, el Parlamento ruso ha aprobado sus políticas en votaciones que son a menudo predecibles, mientras los duros debates han sido ignorados en su mayoría por los rusos.
No es que todo eso vaya a cambiar tras las elecciones, que dejaron a Rusia Unida con sólo una estrecha mayoría en la Duma Estatal, la Cámara Baja, y que originaron una ola de protestas callejeras contra un supuesto fraude electoral, dañando la autoridad del primer ministro.
Pero por primera vez en años, se espera que la Duma se anime un poco cuando se reúna el miércoles para su primera sesión desde los comicios, con nuevos miembros como Kozhevnikova, el campeón de boxeo Nikolai Valuyev y un ex tenista de primera línea como Marat Safin.
"Espero que los líderes del país se hayan dado cuenta que el sistema político tiene que cambiar. Si es así, el Parlamento es un buen punto de partida", comentó Boris Makarenko, analista político del centro de estudios Tecnologías Políticas.
"Rusia Unida aún tiene una mayoría, pero ahora es mucho más pequeña y parece que el Parlamento se convertirá en un lugar apropiado para el debate", señaló.
Es improbable que eso implique grandes enfrentamientos como los de la década de 1990, cuando los comunistas intentaron impugnar al presidente Boris Yeltsin al final de su legislatura.