Se acerca la Navidad y el Año Nuevo, momentos en los que generalmente se realiza un brindis y los más buscados son los vinos espumosos. En esta ocasión compartimos las diferencias entre Champagne, Prosecco y Cava, una de ellas es el método con el que se crean, además del tipo de uva.
Ciudad de México, 11 de diciembre (SinEmbargo).- Llegó el mes de diciembre y con él las fechas de Navidad y Año Nuevo, dos momentos muy especiales que suelen celebrarse en familia, aunque en esta ocasión las circunstancias son diferentes, una opción que se adapta a la situación actual podría ser conectarse en una videollamada y brindar. ¿Qué usamos para brindar? Existen muchas opciones, sin embargo las clásicas se inclinan hacía la Champgne, Prosecco y Cava, vinos espumosos que quedan muy bien para chocar las copas.
Para conocer las diferencias entre estas tres opciones y elegir la mejor de acuerdo a sus características y precios, consultamos a Sophie Avernin, reconocida sommelier y directora de Grandes Viñedos, quien compartió datos importantes con los lectores de Mundano.
MÉTODO DE ELABORACIÓN
Como punto de partida, Sophie explicó que existen varios métodos para crear un vino espumoso, sin embargo, los más utilizados son el tradicional (que antes se llamaba champenoise y es con el que se elabora la Champagne) y el charmat.
“El método tradicional es el más complicado, por eso también es la razón por la que la champagne es cara, la primera fermentación que transforma el azúcar en alcohol, esa es la normal como todos los vinos, la segunda fermentación que es en la cual haces todo este proceso de la burbuja, esa a diferencia de los otros métodos se hace en botella, entonces tú ya tiene un vino hecho […], meten ese vino en botella, le agregan azúcar y otro tipo de levaduras, cierran la botella y allá adentro se va a hacer el gas carbónico, la burbuja”, dijo Sophie.
El proceso no termina ahí, después las levaduras se mueren y crean lo que en los viñedos llaman lía de vino, en este método quedan al final y al fondo de la botella por lo que poco a poco deben girar las botellas. “Esto lo hacían antes en unos muebles de madera que llamaban que se llaman pupitres, poco a poco van volteando las botellas hasta que las lías quedan en el cuello de la botella. Lo que hacen es, agarran la botella todavía tapada, meten este cuello en una solución de nitrógeno, se congela este corcho con lia y uno por uno la van destapando a mano y con el gas que hay se expulsa este hielo con las lias muertas, rellenan el vino y lo vuelven a tapar y se va otra vez a bodega”, agregó la sommelier.
El otro método es el charmat, este se realiza en tanques gigantescos en los que integran las levaduras por lo que el filtrado es mucho más fácil, lo que provoca que el vino que resulta de este, sea más barato.
CHAMPAGNE
Este vino se realiza con el método tradicional, que requiere más tiempo, cuidado y mucha atención, lo que sin duda influye en el resultado y en el precio. Además esta bebida cuenta con denominación de origen, es decir, para llevar el nombre de Champagne debe producirse en la Campaña Francesa.
Un dato interesante es que este vino blanco puede estar hecho de uvas tintas. “Eso es una maravilla del Champagne, muchos de los champagne están hechos con uvas tintas, ahí lo que hacen es que prensan y el jugo no entra en contacto con las pieles, por eso tienes un vino blanco”, señaló Avernin.
Otro factor de diferencia es el clima, siendo el de Champagne el más frío. Las uvas con las que se elabora son chardonnay, pinot noir y pinot meunier, estas últimas son tintas. Este vino tiene una acidez más marcada que los otros dos, además de burbujas suaves, además acompaña muy bien los alimentos. La sommelier recomendó las etiquetas Billecart salmon, ellos inventaron la categoría de champagne rosado y es uno sin tanta acidez marcada con sabores tostados, otra es Krug.
PROSECCO
Para este vino se usa el método charmat y viene de la parte fría de Italia, es decir, Friuli Venezia Giulia en donde hay montañas y por supuesto viñedos de uvas blancas. Para el Prosecco se usa la uva Glera, sus burbujas son más marcadas y cuenta con más dulzor, además de dejar una senasción de frescura. De acuerdo con Sophie, el Prosecco es un vino “para pararse” y estar activo debido al alcohol que contiene. Las etiquetas de Proescco recomendadas son Naonis o Nigne la delizia.
CAVA
Este vino, cuyo origen se encuentra en Cataluña y también cuenta con denominación de origen, se elabora con el método tradicional. Las uvas que se usan son macabeo, xarel lo y parellada. El vino Cava tiene un poco más de alcohol que los otros dos debido al clima en el que crecen las uvas. Una etiquetas que pueden ser opción es Gramona.
¿CUÁL REGALAR EN EN NAVIDAD O AÑO NUEVO?
Sophie explicó que donde hay mucho cariño y una familia poco numerosa, la opción puede ser Champagne; si es una familia muy numerosa el Prosecco es una gran opción que te hace quedar bien sin gastar demasiado; el Cava es para las familias no tan numerosas.
