Y de pronto, Julianne Moore se convirtió en musa lo mismo de Amedeo Modigliani y de Gustav Klimt, que de Egon Shiele y Edgar Degas. La laureada actriz es la protagonista de un serie de fotos surgidas de la imaginación de uno de los más famosos fotógrafos de moda, el alemán Peter Lindbergh –conocido como “El poeta del glamour”–, y que han sido publicadas en la más reciente edición de la no menos famosa revista Harper’s Bazaar.
Lindbergh expone los retratos de Moore al lado de sus inspiraciones originales, para ser vistas, como en un museo. Llama la atención el meticuloso trabajo de arte, que hace eco de las consagradas obras, pero que también rescata la importancia de la alta costura. Por su parte, la actriz realizó un espléndido trabajo de interpretación de las musas originales, reviviendo incluso el vigor y glamour de la famosa “La coja” de John Currin.
Peter Lindbergh es un protagonista central en publicaciones como Vanity Fair, las ediciones inglesa, francesa, americana e italiana de Vogue, Rolling Stone, y la propia Harper’s Bazaar.
Julianne Moore, como “Mujer sentada con su rodilla flexionada”, de Egon Schiele.
Julianne Moore, como “La coja”, de John Currin.
Julianne Moore, como “Mujer con abanico”, de Amedeo Modigliani.
Julianne Moore, como “Adele Bloch Bauer I”, de Gustav Klimt.
Julianne Moore, como “Enfermera de un hombre loco #3”, de Richard Prince.
Julianne Moore, como “Madame X”, de John Singer Sargent.
Julianne Moore, como “Pequeña danzarina de catorce años”, de Edgar Degas.
