Ciudad de México, 13 de febrero (SinEmbargo).- Mañana se festeja el Día de San Valentín. Muchos no recibirán ni chocolates ni corazones de plástico rojo. Menos mal. Hay que cuidar la figura y el medioambiente. Ni dulces ni materiales contaminantes.
Mejor un tequila (blanco, aunque hay para todos los gustos) o un mezcal a tono con las modas y, por supuesto, las canciones azotadas de siempre.
En este rango, el imbatible es José José. No hay quien lo saque del primer lugar de llorar y sufrir por ese amor que se nos va como arena de los dedos (en esta época se valen los lugares comunes), por el amor que nunca encontraremos o por ese/esa que se nos pone frente al televisor y no nos deja ver nuestro programa favorito.
Como sea, es buena siempre la innovación y aquí van 10 canciones de nuestro continente con las que suicidarnos de mentirita, volvernos sensibles sin remedio que para eso es el 14 de febrero o simplemente para declararle nuestro amor eterno a la música, esa criatura alada que nunca nos abandona.
“Tristesse”, por Milton Nascimento
“¿Cómo puedes pedirme que deje de hablar de nuestro amor, que fue tan fuerte y todavía es?”, canta el brasileño Milton Nascimento en un tema que forma parte de su disco Pietá, publicado en 2003. La grabación original fue un dúo con María Rita Camargo, la hija de la extinta Elis Regina (1945-1982), la gran musa del famoso artista de Minas Gerais. Elegimos la versión en vivo que está en el DVD del disco mencionado, donde Milton canta con la inigualable Marina Machado.
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“Y mientras tanto el sol se muere”, por el Indio Solari y los Fundamentalistas del aire acondicionado
“Si pasa algo malo esta vez te voy a buscar”, promete el ex líder de Patricio Rey y los Redonditos de Ricota, en lo que probablemente se constituya –sin exagerar- en una de las mejores canciones de amor de la historia del rock en español. El tema forma parte de su disco en solitario Porco Rex y es adictiva.
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“Amándote”, por Jaime Roos
La música uruguaya, poco difundida en México, ha logrado crear un discurso propio entre los dos gigantes, Brasil y Argentina, ofreciendo canciones que son como perlas inmarcesibles y poderosas. Del mayor cantautor uruguayo de todos los tiempos, Jaime Roos, elegimos aquella que dice “algún día verás que me voy a morir amándote, amándote, amándote” en la versión de Rubén Blades, quien la grabó para su disco La rosa de los vientos.
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“Amor profundo”, por Jaime Roos
Jaime Roos, nacido en 1953, tiene muchas canciones de amor prodigiosas. Algunas como esta son la síntesis perfecta entre la melancolía tanguera y el fervor de murga que caracterizan al “paisito”. “Es el amor, amor profundo, es lo que siento al cantar. Poco hay en el mundo que me haga así vibrar”, canta Freddy Zurdo Bessio, mientras la voz gruesa de Jaime le hace unos coros conmovedores. Un detalle nada desdeñable: la canción es en realidad de Alberto Wolf y Roos la popularizó al grabarla para su disco Contraseña.
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“Sin la luna”, por Alejandro Filio
“Puedo hablar de ti con mis amigos / mi canto, mi silencio mi conmigo / puedo ver tu rastro si lo quiero hoy / sé perfectamente donde lo dejé”, hermosa letra de una canción memorable del mexicano Alejandro Filio, uno de nuestros insignes cantautores. Hay una versión muy interesante grabada a dúo con la peruana Tania Libertad para el disco Secreto a voces, pero nos quedamos esta vez con la original de autor, más seca, menos engolada y por lo mismo más pegadora.
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“Respiro”, por Franco Simone
Es cierto que el italiano Franco Simone poco tiene de latinoamericano, pero hace unas décadas los habitantes de este continente aprendimos a hacer nuestras sus canciones azotadas y ya clásicas. “Quiero que sea un respiro este mutuo, para que nunca muera y darnos calor”, clama una letra que parece encenderse doblemente en la voz de la chilena Javiera Parra –nieta de la gran Violeta-, quien la grabó hace unos años con su grupo Javiera y Los Imposibles.
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“África Bamba”, por Carlos Santana
Ya se sabe que todas las canciones de Supernatural, esa joya del fin de milenio a cargo de Carlos Santana y Clive Davis son imprescindibles, pero esta tiene una melancolía arrolladora, quizás porque es una de las pocas donde el inmenso guitarrista mexicano pone la voz. “Con calma se baila esta danza / Y con amor canto yo esta canción / África bamba hace a un lado a la tristeza / Y otra más dulce no la podrás encontrar / Oye eso te vas a sentir feliz”, promete el artista jalisciense.
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“No te apartes de mí”, por Roberto Carlos
Como cantautor que siempre ha interpretado en brasileño, no es nada menor su trabajo con la traducción de los temas al español y que lo han convertido en un grande de la canción romántica en nuestro idioma.
Si en Brasil, Roberto Carlos en Rey, en el resto de Latinoamérica tiene un cetro que sólo le corresponde a sus bellas melodías amorosas. Elegimos “No te apartes de mí” en la versión del argentino Vicentico, junto a su mujer, la actriz Valeria Bertuccelli.
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“Eres”, por Café Tacvba
No sólo folclóricos, también románticos. Esta etapa de la gran banda mexicana tiene el color, el sabor y el aroma de Meme del Real, un sensible de aquellos, que le dio a Café Tacvba un tono más introspectivo, como si de pronto el cuarteto se hubiera animado a mostrar emociones más desnudas e íntimas.
“El que por ti daría la vida ese soy”, canta Meme y todos cantamos con él una canción de amor inolvidable.
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“Bohemio”, por Andrés Calamaro
“Te quiero porque a pesar de todo me vas a seguir queriendo un poco más, permite que me saque el sombrero para saludarte, libertad”, canta Andrés Calamaro, el gran cronista del amor en el rock en español.
Es una canción de amor a la libertad, porque nada nos hace más libres que el amor y para amar necesitamos esencialmente libertad.
“Anoche te escribí nuevas canciones y eso sólo significa que le robé palabras a tu ausencia para tratar de seguir”, El Salmón dixit.
