El sector de telecomunicaciones en Brasil es uno de sus principales mercados. Su recesión va a “frenar” los resultados trimestrales de América Móvil pese a un esperado aumento de la base de suscriptores.
Por África Semprún
Ciudad de México, 14 de septiembre (SinEmbargo/EconomíaHoy).– Los problemas de Brasil y la nueva conformación del mercado mexicano se han convertido en los principales lastres de América Móvil. Mientras el mundo mira con preocupación a la crisis griega, a la caída del precio de las materias primas y a la desaceleración de China, la multinacional de Carlos Slim está pendiente de la recesión de Brasil y el desembarco de AT&T en el mercado, una maniobra que junto a la llegada del Triple Play de Izzi ha hundido los precios de la telefonía y el internet en el mercado azteca.
La entrada en recesión del gigante latinoamericano –el Fondo Monetario Internacional (FMI) prevé que su Producto Interno Bruto (PIB) se contraiga un 3 por ciento en 2015 por el menor consumo y la inversión– y la depreciación del real, que acumula un descenso de más del 34 por ciento frente al dólar, va a golpear los resultados de la telecom en el país carioca, uno de sus principales mercados y donde tiene el 30 por ciento de las líneas de acceso (móvil y fijas).
Según las previsiones de la Casa de Inversión Monex, Brasil va a “frenar” los resultados trimestrales de la propietaria de Telcel y Claro pese a un esperado aumento de la base de suscriptores.
Monex estima que los ingresos totales en pesos de América Móvil en el país carioca caigan un 18.3 por ciento “afectados principalmente por las dificultades económicas del país, así como por un real brasileño más débil”, asegura la firma de inversión en un informe.
En este punto, el ebitda (resultado operativo bruto) se contraerá un 13.4 por ciento en el tercer trimestre del año por la caída de las ventas y el ajuste de los precios que la firma está llevando a cabo debido al aumento de competencia en el país y la caída de la capacidad de consumo de la población con el objetivo de mantener o aumentar la cuota de mercado.
En cuanto a México, la región presentará un débil crecimiento que afectará al ebitda por la caída de los precios generada a raíz de la reforma de las telecomunicaciones que abre la puerta a la entrada de grandes competidores y le obliga a compartir sus redes a bajos precios, lo que elimina una fuente de ingresos, y le impide desarrollar la tele de pago en México.
El crecimiento de América Móvil entonces vendrá por América Central, Caribe y Estados Unidos, los mercados en los que tiene menos presencia.
PESIMISMO ENTRE LOS ANALISTAS
El ajuste de previsiones de Monex va en línea con el pesimismo del consenso de mercado recogido por FacSet y el mal desempeño en bolsa registrado por la compañía.
Los analistas han ido reduciendo las estimaciones conforme se ha ido agravando la situación en Brasil, que entró en recesión en el segundo trimestre del año y obligó al gobierno de Dilma Rousseff a aprobar un paquete de ajustes y revisar a la baja su PIB. Han bajado las previsiones de beneficios de la firma y se han ratificado en su recomendación de mantener (Monex recomiendo venta).
En lo que va de año, las estimaciones de beneficio de cara a 2015 y a 2016 para el gigante propiedad de Carlos Slim se han rebajado en 25 mil 738 millones (31 por ciento menos) y 10 mil 669 millones de pesos, respectivamente hasta los 57 mil 254 millones de pesos este año y los 75 mil 121 millones en 2016.
Solamente en los últimos cuatro meses, el consenso de analistas de Facset ha recortado las previsiones de beneficio neto para este año en 16 mil 800 millones de pesos para 2015 con respecto a la revisión a la baja de mayo.
Aun así, el mercado espera que gane más que en 2014, entre otras cosas porque ya no tiene la depreciación de Austria Telekom, aunque en el primer semestre del año su utilidad neta en pesos cayó un 28 por ciento hasta os 22,276 millones de pesos mientras el ebitda se contrajo un 4.1 por ciento hasta los 136 mil 581 millones de pesos.
En esta línea, América Móvil acumula un descenso en bolsa del 11.52 por ciento lo que le ha llevado a cerrar con una capitalización de 959,874 millones de pesos, la más alta del IPC con diferencia.s Por su parte, el conseso de analistas de FacSet confían en el potencial alcista e la firma en bolsa y han elevado un 4.95 por ciento su precio objetivo hasta los 17.24 pesos por acción.
Ayer cerró en bolsa en los 14.51 pesos tras subir un 0.14 por ciento.