De acuerdo con la Empresa Productiva del Estado, Pemex Exploración y Producción representa, en promedio, más del 80 por ciento de la inversión total de la empresa; sin embargo esta subsidiaria es la que más problemas causa al ambiente, ya sea por la emisión de gases contaminantes o por los derrames de hidrocarburos durante alguna operación.
Ciudad de México, 13 de diciembre (SinEmbargo).– El 31 de marzo pasado la plataforma Abkatun Alfa de Petróleos Mexicanos (Pemex), ubicada en la Sonda de Campeche, explotó y un derrame de petróleo contaminó el mar. Los hidrocarburos se expandieron aproximadamente 10 kilómetros en el agua y la flora y fauna de la región quedaron contaminados.
Por lo anterior, el 25 de noviembre de 2015, Acciones Colectivas de Sinaloa A.C interpusieron una demanda de Acción Colectiva Difusa contra Pemex para que un juez de distrito ordene a la petrolera reparar el daño ambiental. Luis Pérez de Acha, abogado de la organización, explicó a SinEmbargo que el proceso de resolución podría demorar al menos 24 meses, tiempo en que las afectaciones podrían extenderse.
“Yo creo que en dos años se van a ocasionar más daños y todo eso tendrá que evaluarlo el juez al dictar la sentencia, las medidas de remediación deben ser definitivas. Tiene que haber un punto final a la contaminación con independencia del monto de la indemnización económica que se le imponga a Pemex”, comentó Pérez de Acha.
Esta no es la primera vez que Pemex debe hacer frente a los impactos ambientales que le ha costado su baja inversión en temas de prevención y mitigación por daños. En octubre pasado, la delegación de la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) de Jalisco informó que desde 2011 los derrames han costado a Pemex más de 28 millones de pesos en multas.
Especialistas en el sector energético y protección al medio ambiente coinciden en que Petróleos Mexicanos da a conocer en sus informes anuales que gasta miles de millones de pesos en la batalla contra el cambio climático, en mitigación de daños ambientales, en infraestructura o proyectos que contaminan menos; sin embargo todos los “esfuerzos” que realiza son insuficientes para “compensar” las afectaciones que provoca la emisión de gases de sus plataformas y derrames.
A principios de octubre de este año, Emilio Lozoya Austin, director general de la empresa, aseguró ante 9 petroleras de talla internacional en la reunión Iniciativa Climática de Petróleo y Gas (OGCI por sus siglas en inglés) que “Pemex quiere ser parte de la solución de la problemática ambiental que enfrenta el planeta”.
En ese sentido, Lozoya argumentó que una vez que entren en operación la totalidad de los proyectos planteados en la estrategia nacional planteada desde la Reforma Energética “se reducirán emisiones equivalentes a las emisiones anuales de 2.7 millones de vehículos de pasajeros y la energía usada por 1.18 millones de hogares anualmente”. Sin embargo no dijo con qué tipo de inversión se cumpliría dicha estrategia.
El representante de Petróleos Mexicanos destacó la inversión de mil 460 millones de dólares en el activo petrolero Cantarell para reducir la quema de gas, proyecto por el que Pemex recibió un reconocimiento de Global Gas Flaring Reduction Initiative del Banco Mundial.
Al respecto, Aroa de la Fuente, investigadora de Fundar, Centro de Análisis e Investigación, comentó que “Pemex y el Gobierno federal pueden tomar medidas para mitigar emisiones, pero si la política central energética está basada en la extracción de hidrocarburos y el modelo de su explotación sólo pretende poner ‘algunas contenciones’ va tener un impacto ambiental que no se ajusta a los compromisos que tiene el país sobre la materia”.
Hasta el propio Informe de Sustentabilidad 2014 de Pemex reconoce que “en materia ambiental, las emisiones de CO2 ascendieron a 45 millones de toneladas, 10.7 por ciento más que en 2013. Este aumento se debió a una mayor quema de gas amargo con alto contenido de nitrógeno en el Activo de Producción Ku- Maloob-Zaap en la Región Marina Noroeste".
Pemex también informó que las fugas y derrames en ductos registraron un incremento de 4 por ciento, en comparación con 2013.
LA CONTAMINACIÓN DE PEMEX
Datos del Informe de 2014 detallan que Pemex invirtió recursos en efectivo y especie por 2 mil 856 millones de pesos a municipios y organizaciones para fortalecer la infraestructura básica, promover acciones de salud, educación y proyectos productivos, así como para conservar nuestro patrimonio natural y proveer combustibles para la operación del parque vehicular de los gobiernos locales.
Bajo ese concepto, que aglomera las acciones respecto a la procuración del ambiente, informó que el monto fue de 2 mil 800 millones de pesos, en tanto que en 2012 se destinaron mil 978 millones de pesos a este rubro.
Asimismo, la empresa mexicana cuenta con inversiones que destina para el funcionamiento y producción de cada una de sus subsidiarias. Así, en 2012 Pemex Exploración y Producción, Pemex Refinación, Pemex Gas y Petroquímica Básica y Pemex Petroquímica tuvieron un monto de inversión total por 231 millones de pesos, 253 en 2013 y 277 en 2014.
De acuerdo con la Empresa Productiva del Estado, Pemex Exploración y Producción representa, en promedio, más del 80 por ciento de la inversión total de la empresa; sin embargo esta subsidiaria es la que más problemas causa al ambiente, ya sea por la emisión de gases contaminantes o por los derrames de hidrocarburos durante alguna operación.
“Además, seguimos cumpliendo con nuestros compromisos ante el Pacto Mundial de Naciones Unidas alineando nuestras estrategias y operaciones con los diez principios del Pacto en materia de derechos humanos, estándares laborales, medioambiente combate a la corrupción”, asegura el último Informe.
Aroa de la Fuente agregó que la Reforma Energética no está alineada con los objetivos y los compromisos internacionales que tiene el país en reducciones, emisiones y transición energética.
En esa vía, México se comprometió en marzo de este año a reducir para 2030, el 25 por ciento de la emisión de gases y compuestos de efecto invernadero ante la Organización de las Naciones Unidas (ONU), a ese porcentaje se sumó la secretaría de Energía; por su parte, Pemex ha firmado una serie de compromisos en esta materia que la mayoría se sustentan bajo un esquema de inversión.
Al respecto Gustavo Ampugnai, líder del proyecto de Megaciudades de Greenpeace, dijo que “podemos identificar a Pemex porque es la empresa petrolera estatal que contamina, así como podemos señalar a Repsol o algunas empresas americanas que invirtieron y que pusieron una enorme cantidad de frenos para que la comunidad internacional pueda tener un marco de cambio climático que realmente atienda el problema”.
Por su parte, Pemex reconoció en su último informe que las emisiones de CO2 durante 2014, fueron 10.7 por ciento más que el año anterior.
“Lo que necesita el país y el planeta es transitar hacia un enfrentamiento de disminuir políticas publicas para la eficiencia energética y transitar hacia una matriz energética de energías renovables que respeten el ambiente y los derechos humanos”, agregó la experta en industrias extractivas.
PROMESAS INCUMPLIDAS
Desde 2006 la Petrolera mexicana quedó comprometida a cumplir con los 10 Principios del Pacto Mundial “iniciativa que solicita a las empresas apoyar y llevar a la práctica un conjunto de valores en materia de derechos humanos, normas laborales y medio ambiente”, desde este modo a partir de ese año, la petrolera ha puesto en marcha una serie de proyectos para llevar a cabo esos diez principios, pero para los especialistas, dichas iniciativas no se han traducido en grandes cambios, ya que el cambio climático representa un problema no sólo para México sino para todo el mundo.
En ese sentido, Gustavo Ampugnai explicó que las empresas petroleras tienen un papel sumamente relevante por las fuentes originarias que provocan el cambio climático y agregó que “la industria petrolera quiere sacar el mayor provecho posible del negocio que hoy por hoy representa la producción y venta del energético”.
De acuerdo con el Informe 2014, Pemex cuenta con dos proyectos de reducción de emisiones registrados ante la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (CMNUCC) como proyectos de Mecanismo de Desarrollo Limpio (MDL).
El documento detalla que el proyecto MDL de “eliminación de quema de gas en el campo Tres Hermanos”, con un potencial de reducción de emisiones cercana a 80 mil toneladas de dióxido de carbono equivalente (CO2e) por año”.
Pemex explica que el otro proyecto se denomina “Recuperación de Calor en la Terminal Marítima Dos Bocas” de la Región Marina Suroeste de PEP, está registrado con un potencial similar a 88 mil toneladas de CO2e por año”.
Ampugnai explicó que cuando el petróleo, el carbón o el gas cuando se queman generan el gas que es el dióxido de carbono (Co2) y este gas se concentra en la atmósfera “y todos estos gases forman una película alrededor del planeta y muchos de ellos de sol se reflejan en la corteza terrestre y luego no pueden ir hacia el espacio por la masa del aire y se genera el efecto invernadero lo que afecta todo el sistema climático”.
Por su parte, Aroa de la Fuente agregó que “hay daños que no se pueden compensar; si acaban con la fuente de agua potable ¿cómo se compensa?; si ya no queda nada de agricultura tampoco ¿Cómo se compensa?; si se afectan los centros ceremoniales de las personas, no hay forma de compensar. Hay que repensar el modelo que lleve a reducir los impactos al mínimo y no mitigarlos o contrarrestarlos monetariamente, hay que apostarle a un modelo energético que suponga”.