Ciudad de México, 17 may (Sin Embargo).- El consenso generalizado que existe en México acerca de las capacidades de Alfonso Cuarón (1961) para hacer cine, agregan siempre una cuota extra de expectativa en torno a sus proyectos.
Para hablar claro, no son pocos los que en nuestro país afirman que es el mejor director de estos tiempos, por lo que su anunciada Gravity, el filme de ciencia ficción y efectos especiales que veremos este año, marca el regreso a las salas de un artista respetado y querido como pocos.
No es detalle menor que Sandra Bullock y George Clooney sean los protagonistas, pero tampoco es poca cosa reconocer el largo tiempo que ha pasado desde que Alfonso estrenara su aclamada Los niños del hombre, nada más ni nada menos que siete años desde que nos deslumbrara con esa perturbadora historia del fin del mundo, a cargo de Clive Owen y sus ya míticas chanclas.
Gravity es un filme ambicioso, a la medida del prestigio de su director y de lo que él se espera. Es una historia centrada en el personaje de Bullock, quien interpreta a la doctora Ryan Stone, una brillante ingeniero médica que afronta su primera misión de un transbordador espacial y se queda varada en el espacio, después de que su nave sufre una rotura.
Para compensar su falta de experiencia, a la doctora la acompaña Matt Kowalsky (Clooney), un veterano astronauta que dirige un último vuelo antes de retirarse.
La famosa actriz estadounidense, de 48 años, es la única en la pantalla durante la mayor parte del tiempo en que transcurre la película, cuya fecha de estreno está prevista para el próximo 4 de octubre, del que hace una semana se ha dado a conocer el primer tráiler.
LOS NUEVOS DIRECTORES DEL CONTINENTE
Guillermo del Toro, Alejandro Amenábar, Alejandro González Iñárritu, Adrián Caetano, Pablo Trapero, el ganador del Oscar Juan José Campanella y tantos otros, son fruto de una nueva expresión fílmica en Latinoamérica, conformada por directores que propician el recambio generacional merced a instituir nuevos lenguajes y formas creativas de producción.
Para el realizador mexicano, esto se debe a que nuestro cine “vive una explosión creativa después de décadas de dictaduras militares”, según dijo en una entrevista otorgada a latinoweek.com a principios de mes.
“Si Hollywood domina el mercado del entretenimiento, los cineastas latinoamericanos ahora son tan influyentes como los asiáticos en la cultural del cine mundial”, manifestó Cuarón, para quien “grandes movimientos cinematográficos suceden 15 años después de grandes cambios sociales. Sucedió en Irán, 15 años después de la caída del Sha. Y 10 o 15 después de la caída de varios gobiernos militares en América latina, comenzaron a a pasar cosas. En México está sucediendo lo mismo que en el resto del continente”.
Para llevar a cabo sus proyectos, Alfonso ha fundado la productora Esperanto Filmoj, inspirado en el idioma que conoció a través de la lectura de Miguel de Unamuno y que lo sedujo por la pretensión que tiene, como lenguaje universal, de unir al mundo.
“Creo que las personas primero son seres humanos y luego viene el pasaporte”, explicó el director, quien se considera un optimista irredento y que confía en un buen futuro para la humanidad, a pesar de todos los males y todas las adversidades.
Perteneciente a una familia que ha decidido dedicarse de lleno al cine, con el hermano menor, Carlos, escritor y director, y un hijo mayor, Jonás, que ya ha debutado como cineasta y que participa como guionista junto a su padre en Gravity, Alfonso ha marcado una huella profunda en un oficio que alaba espíritus libres y osados como el suyo.
Desde la revolucionaria Solo con tu pareja, que inventó el lenguaje moderno de la comedia mexicana, hasta la súper producción de Harry Potter, cada uno de sus trabajos es sinónimo de creatividad y compromiso, un cheque al portador con muchos números que le permite ser todavía más optimista con vistas al estreno de su nuevo filme.
