El recorte presupuestal anunciado por el Secretario de Hacienda, Luis Videgaray, el pasado 18 de febrero, se vio reflejado en diversos programas de infraestructura; algunos tuvieron un recorte de casi el 100 por ciento en el dinero requerido para llevarse a cabo. Pero también se vieron afectados programas de mantenimiento de las ya existentes, como es el caso del Sistema Cutzamala, a través del cual llega agua potable a 5 millones de personas.
Ciudad de México, 17 de julio (SinEmbargo).– Febrero pasado fue el mes de un nuevo recorte presupuestal en México. La Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) anunció un recorte de 132 mil 301 millones de pesos, la mayoría provenientes de Petróleos Mexicanos (Pemex) y Comunicaciones y Transportes. En menor medida se afectó al sector Medio Ambiente y Recursos Naturales, donde se notó un recorte de 297 millones 666 mil 980 pesos al programa de mantenimiento, conservación y rehabilitación del Sistema Cutzamala.
En el Presupuesto de Egresos de la Federación (PEF) 2016, fueron aprobados 299 mil 660 millones 885 mil 683 pesos para proyectos de inversión en diferentes rubros de infraestructura, tanto inmobiliaria como económica. Sin embargo, tras los recortes aplicados, el dinero modificado al tercer trimestre es ya de 195 mil 767 millones 724 mil 317 pesos. Es decir, hay una variación de 103 mil 893 millones 161 mil 365 pesos, respecto a lo aprobado al inicio del año fiscal.
Para el sector Medio Ambiente y Recursos Naturales, el Congreso aprobó 6 mil 712 millones 996 mil 183 pesos y Hacienda restó 2 mil 927 millones 605 mil 720 pesos; el 56.38 por ciento del total.
En lo que se refiere al Sistema Cutzamala, a inicio de año se previeron, 800 millones de pesos para el programa de mantenimiento, de los cuales sólo quedaron 502 millones 333 mil 020 pesos. Es 37.02 por ciento menos de lo proyectado.
El Sistema Cutzamala es considerada la única fuente de agua sustentable para el abastecimiento de la Zona del Valle de México. De ahí se aportan 16 mil litros por segundo y cubre la necesidad de 5 millones de habitantes; provee aproximadamente la cuarta parte del agua que se consume en esa región.
Para su funcionamiento tiene que revisarse que no se sobrepasen los límites de su capacidad y que no se dañe el entorno ecológico. La Comisión Nacional del Agua (Conagua) ha señalado que la demanda de agua en esa región ha crecido de manera vertiginosa, al mismo tiempo que la disponibilidad de agua se ha reducido en forma alarmante; la disponibilidad per cápita es de 290 litros por día.
Esta red hidráulica abastece a 13 municipios del Estado de México (Atizapán, Coacalco, Cuautitlán Izcalli, Ecatepec, Huixquilican, Lerma, Naucalpan, Nezahualcóyotl, Nicolás Romero, Ocoyoacac, Tlalnepantla, Tultitlán y Toluca) y a 10 delegaciones de la Ciudad de México (Álvaro Obregón, Azcapotzalco, Benito Juárez, Coyoacán, Cuajimalpa, Cuauhtémoc, Iztacalco, Iztapalapa, Magdalena Contreras, Miguel Hidalgo), esto es gran parte de la Zona Metropolitana del Valle de México, una superficie de aproximadamente mil 800 kilómetros cuadrados, con una población de 20 millones de habitantes, lo que representa una de las concentraciones humanas más grandes y complejas del mundo.
LA DEPENDENCIA DEL CUTZAMALA
A pesar de la importancia del Sistema Cutzamala y de la cantidad de gente que dependen de él, los problemas en cuanto a distribución, calidad y sustentabilidad, son recurrentes a lo largo de todo el año. Apenas en abril pasado se presentó una falla en la Línea 1 del Sistema, debido a un alto grado de corrosión en uno de los tubos.
Claudia Campero, Coordinadora de la organización Food & Water Watch, calificó como riesgoso, ya que por años se ha creado una fuerte dependencia al agua proveniente del Cutzamala, por lo que el recorte agudiza los problemas que ya se viven.
“El sistema Cutzamala es un sistema muy caro. Toda la infraestructura que se requiere para trasladar agua por una gran cantidad de kilómetros, en contrapendiente y con todo un sistema de bombeo, hace que todo el sistema sea muy costoso. La dependencia que se ha generado en este sistema por parte de la Ciudad de México y de los municipios del Estado de México, ya es muy alta”, comentó en entrevista con SinEmbargo.
También Vidal Llerenas, Diputado federal por el partido Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), consideró que mientras el Sistema Cutzamala presenta fallas por lógica su programa de mantenimiento debería contar con un presupuesto suficiente y estar dentro de las prioridades gubernamentales.
“El Sistema Cutzamala es clave, el 60 por ciento del agua de la Ciudad de México llega por ahí y si se registran fallas, hay un requerimiento de una mayor atención, por el riesgo que conlleva. Ahora la consecuencia serán mas recortes… pero al agua”, dijo a SinEmbargo.
Respecto a la reacción del Congreso, comentó que el problema es que son cuestiones que no se han discutido ni dentro de las Cámaras ni a nivel federal. “No hay mayor discusión respecto a las decisiones de Hacienda”, afirmó.
La Ciudad de México ocupó el sitio 43 de 50 urbes evaluadas, en el Índice Mundial del Agua, que califica los sistemas de agua en cuanto a su capacidad para la Distribución, Eficiencia del sistema de producción y en la Calidad del líquido.
En Calidad, el sitio que ocupó fue el 44, el más bajo de las tres evaluaciones. ¿En qué medida las ciudades del mundo pueden proporcionar un suministro de agua limpia y sana? En este rubro fueron tomados en cuenta los programas de inversión.
Los investigadores plantean que una mejor economía puede brindar mayor calidad del agua, y abordar adecuadamente el saneamiento, las hace más competitivas.
De acuerdo con Campero, la preocupación que provoca el recorte presupuestal, es por las consecuencias que se verán en el largo plazo. Insistió en que el alto costo del sistema refleja un manejo que ya no es viable y que se deberían buscar nuevas opciones y no profundizar la dependencia al Cutzamala, que además trae problemas ecológicos y sociales a otras cuencas.
“En el corto plazo, el recorte es una gran preocupación porque se pueden generar problemas como rompimiento de tuberías u otros relacionados con la infraestructura, que hiciera que la Ciudad de México sufriera problemas de desabasto […] el 40 por ciento del agua se va en fugas y esa es la que viene del Cutzamala. Es desquiciado este manejo de agua. Ya tiene años que se trabaja bajo una lógica que en realidad ha generado muchos problemas”, concluyó.
