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Es urgente repensar para qué queremos zoológicos, alerta ONG internacional tras muertes en Chapultepec

19/07/2016 - 12:03 am

El cautiverio nunca permitirá que los animales puedan gozar enteramente de bienestar, ya que siempre existirán limitaciones tanto de comportamiento como psicológicas, alertó World Animal Protection, organización que insiste en que los modelos tradicionales de los zoológicos en México y el mundo no pueden prevalecer.

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Ciudad de México, 19 de julio (SinEmbargo).- El modelo tradicional de los zoológicos no puede prevalecer si se busca velar por el bienestar y la conservación de los animales no sólo en México, sino alrededor del mundo, advirtió Roberto Vieto, oficial de Vida Silvestre para Latinoamérica en la organización internacional World Animal Protection.

“Como organización de bienestar animal nosotros siempre decimos que los animales salvajes pertenecen a la naturaleza y por ello debemos trabajar por mantenerlos en su hábitat, libres de cautiverio”, dijo en entrevista para SinEmbargo.

No obstante, señaló que los zoológicos pueden tener un importante papel en los esfuerzos de conservación de especies silvestres amenazadas o al borde de la extinción, siempre y cuando sean apegados a los más altos estándares de bienestar animal.

“Jamás se justificará la tenencia de animales para entretenimiento de las personas. Si las especies se mantienen en cautiverio debe ser por un esfuerzo real de conservación, porque en su hábitat natural se vean amenazados y puedan potencialmente llegar a la extinción”, puntualizó.

Sin embargo, reconoció que “el cautiverio nunca va a permitir que el animal pueda gozar enteramente de un bienestar, siempre habrá limitaciones tanto de comportamiento, como psicológicas”.

Por ello, urgió a las autoridades, organizaciones en pro de los animales y a la sociedad en general, a repensar sobre los objetivos de los zoológicos, y subrayó la necesidad urgente de “evolucionar el concepto”.

Familias visitan el zoológico de Chapultepec con fines recreativos. Foto: Cuartoscuro.
Familias visitan el zoológico de Chapultepec con fines recreativos. Foto: Cuartoscuro.

ANIMALES ENCERRADOS Y ENFERMOS

Vieto advirtió que el cautiverio provoca limitaciones en el comportamiento de las especies silvestres.

En el mismo sentido, la Red Activa por la Liberación Animal ha denunciado que las especies en dichas condiciones llegan a padecer zoocosis, una patología que genera inapetencia, tristeza, claustrofobia e incluso automutilación.

Los animales frustrados –señalan– pasan la mayoría del tiempo paseándose de un lado a otro, dando vueltas, meciendo el cuerpo y mostrando otras señales de angustia, entre ellas, lamer y/o morder los barrotes, arrancarse el pelo o las uñas, e incluso llegan a matar a sus crías o a suicidarse.

La organización internacional AnimaNaturalis señala en su página oficial, que además los animales con zoocosis pueden presentar otros síntomas como agresividad, apatía y coprofilia (modo antinatural de comer y jugar con los excrementos).

“Si un animal presenta alguno de estos comportamientos ‘estereotipados’ quiere decir que está en un estado de estrés continuo y que por lo tanto no tiene las condiciones de vida necesarias para su bienestar”, destacan.

Agregan que dicho trastorno se puede presentar no sólo en las especies que habitan los zoológicos o los circos, sino también en animales de granja, en laboratorios o en otras situaciones de cautividad, y puntualizan en que esos comportamientos “anormales y obsesivos” no se dan en el entorno libre de la vida salvaje.

El 14 de julio murió una hembra de bisonte americano en las inmediaciones del zoológico de Chapultepec. En la imagen se observa uno de los ejemplares de esta especie que se mantiene en exhibición en el recinto. Foto: Cuartoscuro.
El 14 de julio murió una hembra de bisonte americano en las inmediaciones del zoológico de Chapultepec. En la imagen se observa uno de los ejemplares de esta especie que se mantiene en exhibición en el recinto.
Foto: Cuartoscuro.

CHAPULTEPEC EN LA MIRA

El 7 de julio pasado, Bantú, un gorila de 24 años de edad que vivía en el Zoológico de Chapultepec, murió de un infarto mientras se encontraba sedado para ser trasladado a Guadalajara con fines reproductivos.

Días después se filtraron fotografías de la necropsia donde se demostró que el cuerpo del animal había sido totalmente abierto, decapitado y destazado, por lo que activistas calificaron el hecho como “brutal”.

Aunado a ello, el 14 de julio la Secretaría de Medio Ambiente de la Ciudad de México (Sedema) informó que una hembra bisonte de cuatro años de edad falleció a causa de un golpe propinado por otro de su especie.

No obstante, el diario El Universal aseguró que empleados del recinto –quienes pidieron guardar el anonimato– informaron a dicho medio que el animal cayó a una fosa de seguridad dentro de su jaula, por lo que reportó temperatura alta y finalmente murió durante la madrugada.

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¿LA SOLUCIÓN?

Vieto comentó que especialmente en países de América Latina, los zoológicos se mantienen con la única idea de entretener al visitante o “educar”, y no se comprometen con el bienestar de los animales.

“Es importante valorar cuáles son las necesidades físicas y psicológicas de la especie para poder ofrecerle un entorno que asegure su vida en las mejores condiciones posibles, siempre y cuando el cautiverio sea parte de un esfuerzo de conservación y no para la exhibición simplemente”, remató.

Por ello, mencionó que existen zoológicos virtuales y otras actividades tecnológicas que permiten educar a la gente respecto a la vida silvestre e hizo un llamado a la sociedad a no acudir a espectáculos o sitios donde se promueva el cautiverio de los animales sin fines de conservación.

Y aseguró que no buscan la desaparición de los zoológicos, sino la transformación.

en Sinembargo al Aire

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