Alejandro Gómez Sánchez, titular de la PGJEM, indicó que en un periodo aproximado de 48 se conocerán las causas patológicas que detonaron el infarto.
Ciudad de México, 21 de marzo (SinEmbargo).– Los estudios periciales al cuerpo de Sergio González, escolta de Alberto Sentíes denunciado en video de haber golpeado a una persona en Tlalpan, confirmaron que la causa de su muerte fue un infarto al miocardio, informó Alejandro Gómez Sánchez, Procurador General de Justicia del Estado de México (PGJEM).
En conferencia de prensa Gómez Sánchez aseveró que tras analizar el contenido gástrico del occiso, las sábanas y el colchón donde fue encontrado muerto, se descartó la presencia de alguna sustancia tóxica que pueda dar indicios de envenenamiento. Sin embargo, dijo que el estómago de González presentaba una fuerte hemorragia, la cual se está analizando, aunque también adelantó que puedo haber ocurrido tras una situación de gran estrés o por alguna gastritis.
El Procurador indicó que en un periodo aproximado de 48 se conocerán las causas patológicas que detonaron el infarto. Asimismo, informó que resultaron negativas las pruebas de alcoholemia, marihuana, cocaína o de otras sustancias tóxicas.
Respecto al peritaje grafológico el Procurador aseguró que la carta hallada entre la ropa de González sí corresponde con su caligrafía, pues fue comparada con el registro del hotel al momento de su ingreso.
El 18 de marzo la Procuraduría General de Justicia capitalina informó: “#InformaPGJ Muere Sergio González Ibarra, escolta de Alberto Sentiés. Es localizado en un hotel de Atizapán de Zaragoza, en el Edomex”, publicó la dependencia en su cuenta oficial de Twitter [@PGJDF_CDMX]
El cuerpo del hombre fue encontrado por personal de limpieza del hotel las primeras horas de aquel jueves y la mañana del viernes se confirmó su identidad.
El pasado viernes 11 de marzo los escoltas de Alberto Santíes agredieron y robaron a un automovilista en Viaducto Tlalpan. El 15 de marzo Sentíes Palacios, dueño del Ferrari rojo, rindió su declaración sobre el incidente ante la Coordinación Territorial Número tres de la Fiscalía Oficial de la Delegación Tlalpan.
La Procuraduría General de Justicia (PGJ) de la Ciudad de México informó que el empresario se presentó de manera voluntaria a las instalaciones del Ministerio Público de la Delegación Tlalpan acompañado por su abogado y su chófer, quien también declaró sobre la agresión.
Detalló que él no se percató del incidente hasta que observó que su escolta agredía a “Jair”, entonces le ordenó que lo dejara. Aseguró que al llegar a su domicilio se dio cuenta de que la agresión había sido captada en video y subida a Internet, por lo que decidió despedirlo.
Sin embargo, en la misiva encontrada junto al cadáver de Sergio González, él responsabiliza de la golpiza al empresario Alberto Santíes Palacios, conocido como #LordFerrari.
En la carta, que consta de dos hojas y está escrita a mano, el escolta narra lo sucedido ese día, desde que salieron de la oficina de Alberto Santíes, localizada en la carretera Picacho Ajusco, y detalla que al llegar al viaducto Tlalpan una camiones blanca se le cerró al Ferrari.
“Por medio del radiotransmisor que traemos él (Sentíes) da la indicación u orden de bajar al de la camioneta y ya que ve que no quiere”, detalla la carta difundida por diversos medios.
Posteriormente, dice la misiva, “da la orden de golpearlo y cuando ve que lo graban, me dice que ya lo deje, y el video es la prueba de todo”.
Y agrega: “al poco rato me marca y me dice que en su casa me atiende. Asimismo llego a su domicilio y nada a firmar (sic.) la renuncia de la empresa Jess, con dirección en Picacho Ajusco 130-301 y otro de la cual estaba con él de escolta y me dijo ‘no tengas miedo, tengo todo arreglado’”.
De acuerdo con la carta, Santíes no ayudó al escolta: “Y vea, cuál arreglo, solo me empinó a mí y me deja solo con todo el paquete ya que él da la orden de golpearlo y cuando ve que lo graban me dice que ya lo deje. […] No se vale todo lo que sacan en los medios por parte del acusado y que no fue así, el video es prueba de todo”.