Un huerto urbano se puede ubicar en la azotea de una casa, incluso en un balcón y se pueden reutilizar elementos como un bote para cultivar tomates, la mitad de una llanta y botellas de PET para chiles o hierbas aromáticas. Existen diversos beneficios de tener huerto verde, entre ellos están que permite comer alimentos frescos y de temporada, además de contar en casa con un espacio verde.
Ciudad de México, 22 de noviembre (SinEmbargo).- Actualmente se busca comer más sano y consumir alimentos que estén lo más que se pueda libres de químicos, si bien existen lugares especializados en vender productos orgánicos también existe la opción de los huertos urbanos, estos espacios verdes que han ganado popularidad en los últimos años. Con esto en mente te compartimos lo que debes saber de esta opción para cultivar tus propias verduras en casa.
¿QUÉ ES UN HUERTO URBANO?
De acuerdo con la Guía de Huertos Urbanos de la Ciudad de México, un huerto urbano es “un espacio limitado que se ubica dentro de la ciudad y donde se siembra una gran diversidad de plantas (medicinales, aromáticas, hortalizas y ornamentales)”. Al tener un huerto urbano en casa se pueden cultivar los alimentos que cada uno consumirá.
Un huerto urbano se puede ubicar en la azotea de una casa, incluso en un balcón y se pueden reutilizar elementos como un bote para cultivar tomates, la mitad de una llanta y botellas de PET para chiles o hierbas aromáticas.
Los inicios de los huertos urbanos se remontan a la difícil situación económica que dejó la Segunda Guerra Mundial, los alimentos no llegaban a las zonas urbanas o eran vendidos a precios elevados lo que influyó en la calidad nutricional de sus habitantes, ante esto sembrar y producir alimento en la ciudad se volvió esencial. Durante los años 80 esta practica tomó fuerza y se extendió en el mundo.
BENEFICIOS
Existen diversos beneficios de tener huerto verde, a continuación compartimos algunos de ellos:
-Se conoce el proceso de los alimentos, desde sembrarlos hasta cosecharlos, lo que asegura su calidad.
-Permite comer alimentos frescos y de temporada.
-Contar en casa con un espacio verde.
-Incrementar los espacios verdes en la ciudad.
-Fomentar y participar en la educación ambiental.
-Consumir de hortalizas libres de químicos.
De acuerdo con un estudio de la Universidad Politécnica de Madrid (UPM), los huertos urbanos pueden mejorar la salud de la ciudadanía, ya que contribuyen a reducir el impacto de las ciudades sobre el cambio climático, además mejoran la calidad del aire al filtrar contaminantes atmosféricos.
¿CÓMO HACER UN HUERTO URBANO?
Lo primero es considerar el espacio en el que se colocará el huerto, se puede cultivar directamente en el suelo o en recipientes comos macetas, huacales o recipientes resistentes, incluso tubos de PVC. Si el huerto se colocarán en un jardín hay que delimitar el espacio e identificar en qué parte da el sol preferentemente por la mañana, si estará en el patio lo más recomendable es que tenga cerca una toma de agua.
En un huerto urbano se pueden sembrar diversas hortalizas como: lechuga, fresa, rábano, tomate, chile, espinaca y betabel. También plantas aromáticas y medicinales. Pero es importante identificar desde el inicio lo que se desea sembrar para planificar y elegir el lugar en el que se ubicará el huerto, por ejemplo, el jitomate, calabaza, chayote y el chile necesitan por lo menos seis horas de sol; mientras que la lechuga, acelga y espinaca necesitan tres horas.
Existen factores a tomar en cuenta para garantizar la germinación de las semillas como la humedad, es decir, controlar la cantidad de agua que se aplicará; la temperatura, una semilla germina a una temperatura promedio de 20 y 30 grados centígrados; y oxígeno por lo que se prestar atención a la profundidad a la que se siembra la semilla.
Se recomienda iniciar con hortalizas o plantas medicinales, esto porque son más resistentes y fáciles de cultivar. Hay que tomar en cuenta la distancia entre las plantas, por ejemplo, si se siembra lechuga y acelga se debe tener presente que ambas son de hojas largas yse siembran muy juntas no se desarrollarán de manera óptima. Entonces ¿A qué distancia hay que sembrar? Las acelgas deben tener 15 centímetros de separación con otras plantas, el betabel 10 cm, el brocoli 40 cm, la espinaca 8, el jitomate 30 cm, y la zanahoria entre 3 y 4 centímetros.
Una recomendación es asociar cultivos lo que ayudará a que los insectos no se acerquen debido al aroma de algunas plantas que fungen como repelentes naturales como lo son ajo, romero, manzanilla, tomillo, epazote y cebolla.
BIOFERTILIZANTES
Las plantas requieren de nutrientes como sales y minerales para crecer, estos los obtienen del suelo en el que están establecidos. Esto se puede complementar con soluciones elaboradas con extractos naturales.
Los biofertilizantes se dividen en dos: de extractos vegetales, es decir, aquellos que se obtienen de macerados de plantas; y los lixiviados de fermentación que se obtienen de los procesos de fermentación de abonos orgánicos como una composta.
Su uso ayuda a mejorar la biología del suelo, no contaminar el ambiente ni dañar al ser humano, no contaminan el aire y son más baratos que los químicos.
La Guía de Huertos Urbanos de la Ciudad de México propone algunos biofertilizante como el té de humus, este fertilizante se obtiene de la fermentación de humus de lombriz. Para obtenerlo debe colocarse 1 kilo de humos en 19 litros de agua y mezclar hasta que se disuelva, dejar reposar 24 horas y después colar la mezcla obtenida, el fertilizante estará listo para usarse.
