Las mordidas en el deporte no son buenas ni en intenciones: desde la de Suárez a Ivanovic hasta la de Tyson

24/04/2013 - 1:00 am

Ciudad de México, 24 de abril (SinEmbargo).- La técnica individual del atacante uruguayo Luis Suárez pocas veces ha sido criticada en el campo de futbol, inclusive sus goles suelen destacar cualquier resumen de calidad.

Sin embargo la mordida que le propinó a Branislav Ivanovic el pasado domingo en el empate 2-2 entre Chelsea y Liverpool podría afectarle vía daños colaterales al delantero “rojo”, a un par meses para que inicie el mercado de traspasos del futbol y a semanas de que se entregue el premio al líder de goleo y al mejor jugador de la Liga Premier de Inglaterra.

En cualquier de los casos Suárez se verá perjudicado en el bolsillo, al margen de la sanción monetaria que ya le puso el Liverpool. Suárez volvía a ser vinculado a los principales clubes de Europa, que ven al atacante de 26 años como una garantía ofensiva, pero a la vez una amenaza de polémicas.

Dos de las designaciones individuales más importantes en el futbol de Inglaterra están aun en juego, aunque si bien la del “Mejor Jugador” depende del gusto de quienes elijan al futbolista “top”, en donde compite con Gareth Bale, Robin van Persie, Michael Carrick, Eden Hazard y Juan Mata.

Es precisamente contra Robin Van Persie contra quien también compite por el liderato de goleo, que de momento comanda el holandés (24 goles) por un tanto de ventaja, aunque la posible sanción en partidos de liga pudiera poner al uruguayo muy detrás de Van Persie, quien ya aseguró el campeonato inglés.

Poca duda cabe en que la mordida más recordada en el deporte es la de Mike Tyson sobre Evnader Holifield,por lo que la realizada en Holanda el 2010 debería ser olvidada más fácil, salvo por el hecho de que tiene a un protagonista reincidente: Luis Suárez.

El delantero uruguayo protagonizó un escándalo en el clásico de Ajax contra PSV en 2011, cuando mordió a Otman Bakkal y volvió a pasar desapercibido para el silbante en turno, mas no para el organismo rector del futbol en Holanda que suspendió 7 partidos.

En tanto que la realizada por “Iron Mike” se efectuó 28 de junio de 1997 sobre el ring del casino MGM Grand, que hasta la fecha escucha anécdotas de la forma en cómo Tyson ideó la forma de arrancar un pedazo de oreja de Evander Holyfield, al momento en que este último dominaba el tercer asalto.

El desplante le costó 3 millones de dólares, así como una sanción de 1 año y 3 meses de licenciada revocada en Nevada (que originalmente había sido indefinida). Tras este acto, la carrera de Tyson se desplomó al grado de retirarse con 10 peleas más, en las que perdió 3, se le anularon 2, y triunfó en 5.

La última víctima de una mordida en la Liga Premier se remonta al 2006, cuando el atacante del Tottenham, Jermaine Defoe, mordió en el hombro al argentino Javier Mascherano, entonces mediocampista del West Ham United.

En aquella ocasión, la indignación del futbolista sudamericano ocupó varios de los diarios británicos que no se pudieron explicar como el delantero inglés solo fue amonestado por el árbitro.

Al haber sido sancionado por el silbante con tarjeta amarilla, el organismo rector del balompié en Inglaterra indicó que no podían aplicar un castigo extra, y tampoco suspender al agresor porque fue sancionado en el momento con la cartulina preventiva.

Otro de los que ha protagonizado eventos de esta índole es el finlandés Jarkko Ruutu, quien fue sancionado con 2 partidos sin paga (37 mil 700 dólares) de la Liga Nacional de Hockey de Estados Unidos, luego de que el el 6 de enero del 2009 mordió el pulgar de su rival Andrew Peters.

También se ha dado el caso opuesto, ese en el que la acción reflejó aprecio por un compañero de equipo, al menos así lo sintió Francisco Gallardo cuando mordió a José Antonio “La Perla” Reyes en el festejo de un gol del Sevilla, caso en el que también se investigó al futbolista, mostrando que ninguna mordida resulta positiva.

 

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