Durante la COVID-19 han brotado en redes sociales memes respecto al “pico del pico” del contagio, derivado de ajustes anunciados por la Secretaría de Salud. El Subsecretario de Salud Hugo López-Gatell ha reiterado que al ser México un país extenso, pero por “modificaciones de la conducta social”, como el no respetar la sana distancia, se han prolongado los puntos máximos de transmisión volviéndose “mesetas”. Ya en el conjunto de curvas, se estima un punto medio en verano a nivel nacional, el cual bajaría en octubre.
Ciudad de México, 25 de junio (SinEmbargo).– En abril se proyectaba que hoy 25 de junio se tendría “resuelta” el 95 por ciento de la curva epidémica de casos de la COVID-19 en los sitios con mayor contagio activo, y comenzaría a verse un descenso constante en la transmisión por región. Pero el 5 de mayo, antes del término de la Jornada Nacional de Sana Distancia, el Subsecretario de Salud Hugo López-Gatell anunció que se extendería más allá de este inicio de verano.
“Posiblemente el 95 por ciento de los casos se van a completar más allá del 25 de junio”, dijo aquel martes en conferencia vespertina. Hoy se reportan alrededor de 25 mil activos, principalmente en el Valle de México, Puebla, Guanajuato, Tabasco y Veracruz. “Esto desafortunadamente así funciona, no hay manera de ganar en todos los temas, porque precisamente el propósito es que esta cantidad de casos se distribuya en el tiempo para al final tener menos casos. El objetivo principal es recorrer el momento del pico (que se retrase para hacer las reconversiones hospitalarias y adquisición de insumos) y el hacer que sea más pequeña su altura (que sean menos casos)”, expuso entonces.
Este jueves, el doctor López-Gatell mostró un video de sus participaciones tanto en la mañanera del Presidente Andrés López Obrador como en la conferencia que diariamente por la tarde ofrece desde Palacio Nacional. Ahí se mostró las decenas de veces que el Epidemiólogo ha advertido que México se tiene que preparar para “una epidemia larga”, sin dar una fecha específica para el fin de la pandemia que, ahora comenta, se puede prolongar hasta octubre, sí y sólo sí se mantiene la disciplina en el país. La epidemia, insistió, no se acaba de un día para otro.
“Desde febrero dijimos que nos preparáramos para una epidemia larga, que se prolongará al menos hasta octubre de 2020. Tenemos esta prolongada epidemia porque es la consecuencia benéfica de haber reducido los contagios diarios, en lugar de una curva grande, tenemos menos casos durante más tiempo”, dijo el funcionario.
“Si y solo si. Como lo hemos dicho en múltiples ocasiones, predicción es válida si se cumplen las condiciones como la reducción de la movilidad. Si no se reduce movilidad, hay más casos, más contagios y mayor presión sobre los hospitales”, agregó.
“Que se prolongue la epidemia es una manifestación de éxito, de éxito de las medidas de mitigación. Esto puede ser difícil de visualizarlo. No es que la intención es prolongar la epidemia, no queremos que se prolongue. Las medidas no son con el objetivo de prolongar la epidemia, son con el objetivo de reducir el número de personas que diariamente presentan la enfermedad”, enfatizó.
Antes, a 11 días del inicio de la Nueva Normalidad –hoy estamos en el día 25–, con semáforos estatales de riesgo, cuando se le preguntó por qué cambió su estimación del punto máximo de contagio para mediados de junio, recordó que las curvas y picos se miden por región, ya que el país es muy extenso y dependen del respeto a la sana distancia y movilidad de la población.
“El pico no ocurrió en abril, sino desde el 8 de mayo [solo en el Valle de México]. Por distintas modificaciones de la conducta social y los contagios se ha prolongado la epidemia; ya se desdibujó el pico, porque en lugar de pico, se volvió una meseta y llevamos 22 días de meseta. No es indeseable ni representa un problema mayúsculo”, afirmó.
El Epidemiólogo ha reiterado su explicación sobre el concepto “aplanamiento de la curva”, ya que la oposición acusa erróneamente que no se aplana porque, dicen, los casos se siguen acumulando. Pero aplanar la curva epidémica significa intervenir para reducir el número de contagios posibles mediante medidas como la sana distancia, lavado de manos y estornudo de etiqueta. En México, afirmó López-Gatell, la curva se está aplanando porque se han registrado menos positivos de los que hubieran existido sin intervenciones.
“No es posible detener una enfermedad epidémica. Lo que sí es posible es mitigarla (reducirla, hacerla menos impactante). Aplanar la curva no quiere decir desaparecer la epidemia”, planteó. “Esto no se improvisa, eso se basa en evidencia científica y obviamente en conocimiento claro; lo que sí puede ir cambiando es las intervenciones al interior de una estrategia”, afirmó.
López-Gatell ha venido haciendo pronósticos sobre la pandemia y sobre la marcha ha corregido fechas, como lo han hecho en otras partes del mundo. En Estados Unidos, por ejemplo, se creía haber alcanzado el pico máximo a finales de abril, pero este jueves los casos nuevos de coronavirus por día en ese país se mantuvieron cerca de un máximo histórico.
Si bien la amplia cantidad de pruebas diagnósticas podrían explicar parte del aumento, los expertos dicen que otras medidas indican que el virus está regresando.
Hasta este jueves 25 de junio se han registrado 25 mil 060 muertes por la pandemia en México, y hay 25 mil 529 casos activos confirmados–esto es, los que en los últimos 14 días se han contagiado con el virus, reportó la Secretaría de Salud. De la semana del 22 al 28 de junio, 17 entidades se encuentran en semáforo naranja y el resto en rojo. Mientras el Valle de México sigue acumulando el mayor número de contagios, Colima, Zacatecas, Baja California Sur, Nayarit y Durango son los que menos han reportado positivos acumulados este periodo.
“Preparémonos para una epidemia larga”, dijo el 11 de junio cuando se acumulaban más de 133 mil casos y el país había reactivado actividades en construcción, minería y manufactura. “Un punto medio estaría en la primera quincena de junio y aquí ya no me estoy refiriendo solo al Valle de México, sino para todo el país. El conjunto de curvas epidémicas tomadas todas juntas nos llevaría a un punto medio, donde generalmente en el punto medio está la máxima carga diaria de casos y luego un descenso hasta llegar a octubre […] Puede haber curvas con más de un pico”.
“Solo si se mantiene el grado de control de la movilidad pública durante los siguientes tres meses (junio, julio y agosto), las predicciones serán fieles y posiblemente estaremos con una cifra de entre 25 mil y 30 mil defunciones. Si no, podríamos tener una mayor mortalidad”, advirtió.
El Presidente Andrés Manuel López Obrador retomó sus giras viajando por tierra desde este mes intercalando por semana. Ha inaugurado los proyectos de infraestructura del sureste y la semana pasada estuvo en el centro del país.
EL PICO SOLO EN EL VALLE DE MÉXICO
Durante abril, cuando comenzó la fase 3 de contagio y hubo un llamado a no salir de vacaciones por Semana Santa, el Subsecretario Hugo López-Gatell informó que el punto máximo de transmisión se estimaba que ocurriría en la segunda semana de mayo, solo en el Valle de México por concentrar más del 20 por ciento de la población nacional.
El riesgo del pico es que se presente una saturación en la atención hospitalaria. Además del Valle de México, Baja California, Sinaloa, Tabasco y Quintana Roo vivieron un aumento en el número de contagios durante inicios de mayo.
“Sin intervenciones, el punto máximo lo hubiéramos tenido el 2 de abril, un pico muy temprano. Hemos ganado tiempo (para adecuaciones hospitalarias)”, expuso el vocero de la pandemia el 5 de mayo. “La predicción es que lo tendremos el 8 de mayo, y estoy consciente que yo previamente dije 6 de mayo”.
Para el punto máximo de transmisión se registraron 10 mil 263 casos acumulados en el Valle de México, el 26 por ciento de los que hubieran existido sin intervenciones a través de la Jornada Nacional de Sana Distancia. Eso es aplanar la curva.
El esperado 8 de mayo, previo al festejo por el Día de las Madres, el Presidente Andrés Manuel López Obrador informó que la fase de mayor contagio de la COVID-19 se extendería de ese día hasta el 20 de mayo en la Ciudad de México, y posteriormente, estimó, comenzarían a reducirse. Aquel viernes había 31 mil 522 casos acumulados.
“Es muy importante que continuemos con la disciplina siguiendo al pie de la letra las recomendaciones. Cuidemos a las madrecitas. Ya va a haber tiempo de apapacho. Ya falta poco, ya vamos a salir; ya se ve la luz al final del túnel”, dijo el Mandatario esa mañana, hace más de un mes.
Una noche antes su equipo revisó el comportamiento en los cinco sitios más complicados: Cancún, Villahermosa, Culiacán, Tijuana y el Valle de México. “En ningún caso nos han faltado camas ni ventiladores ni especialistas”, destacó.
El plan era que cuando estos cinco estados llegaran al pico de contagios alrededor del 20 de mayo, se podrían concentrar los recursos a disposición de otras ciudades y regiones que pudieran tener necesidad.