Por segunda semana consecutiva, la Presidencia de la República y el candidato priista José Antonio Meade Kuribreña defendieron la construcción del Nuevo Aeropuerto Internacional de México (NAIM, antes NAICM), en un rechazo total a la propuesta de Andrés Manuel López Obrador, quien el viernes se comprometió ante empresarios a revisar el proyecto.

El candidato de las izquierdas lleva dos años alertando que cancelará la construcción del Nuevo Aeropuerto, pero hasta ahora se ha lanzado una ofensiva desde el oficialismo. AMLO argumenta que se entregaron contratos a empresas favorecidas por este gobierno; que representa un gasto honeroso en un país con 53 millones de pobres; que tiene un sobrecosto inaceptable y que está rodeado por la sospecha de corrupción y la opacidad.

Según José Antonio Meade, el NAIM es un proyecto licitado al amparo del cual ya hay convenios y contratos. Federico Patiño Márquez, director general del Grupo Aeroportuario, defendió la legalidad de la obra y aseguró que su cancelación implicaría pérdidas para el Gobierno por 120 mil millones de pesos.

Ciudad de México, 26 de marzo (SinEmbargo).- La Presidencia de la República salió hoy, por segunda semana consecutiva, a defender el Nuevo Aeropuerto Internacional, apena unas horas después de que el candidato del Revolucionario Institucional (PRI), partido del Presidente Enrique Peña Nieto, hiciera lo mismo.

Los argumentos de José Antonio Meade Kuribreña, ex Secretario de Hacienda, y los de Presidencia, son los mismos. Van en contra de Andrés Manuel López Obrador, candidato del Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), quien lleva dos años al menos advirtiendo que rechazará el Nuevo Aeropuerto porque se entregaron contratos a empresas favorecidas por este gobierno; porque representa un gasto honeroso en un país con 53 millones de pobres; porque tiene un sobrecosto inaceptable y porque está rodeado por la sospecha de corrupción y la opacidad.

Unas horas antes, José Antonio Meade, abanderado de los partidos Revolucionario Institucional (PRI), Verde Ecologista de México (PVEM) y Nueva Alianza, aseguró que los contratos, infraestructura y los derechos no son motivo de consultas, por lo que deben respetarse pero aceptó participar en una mesa de diálogo.

Meade agregó que se encuentran en la mejor disposición para acudir y participar en las mesas a las que sea convocado como muestra del “compromiso con la modernidad, con la competitividad” sin que esto signifique el apoyo a la propuesta hecha por López Obrador.

“Lo hacemos en la convicción que es independiente de la participación en las mesas, de que este es un proyecto con adecuada planeación, de que este es un proyecto que se está realizando el único lugar físicamente posible, de que esta es una apuesta de futuro, de modernidad, de competitividad, de comunicación”, aseguró el candidato de la coalición “Todos por México”.

Según José Antonio Meade, el NAIM es un proyecto licitado al amparo del cual ya hay convenios y contratos y el que se “está fincada nuestra competitividad, nuestro desarrollo, la competitividad del valle de México, 450 mil empleos”, afirmó.

Esto surgió después de que el candidato de la coalición “Juntos Haremos Historia”, Andrés Manuel López Obrador, desató la polémica al refrendar ante empresarios su postura en contra de la construcción del Nuevo Aeropuerto. Propuso revisar la construcción y licitación con 15 expertos que determinarían si la obra debe continuar.

Esta tarde el político tabasqueño pidió que se cumpla el compromiso de transparentar los contratos del Nuevo Aeropuerto y revisar su viabilidad técnica y económica

“Yo espero de manera paciente que se cumpla el compromiso que hizo Juan Pablo Castañón, presidente de Consejo Coordinador Empresarial, para que se forme una comisión tripartita: del Gobierno actual, de nosotros, y del Consejo Coordinar Empresarial, para revisar la constitución del nuevo aeropuerto de Texcoco. Que se conozcan los contratos, se transparenten, y se analice la viabilidad de esta obra, que se estima en 300 mil millones de pesos”, dijo López Obrador en un video subido a sus redes.

Agregó que los principales contratistas de esta obra, Carlos Slim, Carlos Hank Ron e Hipólito Gerrard, cuñado de Carlos Salinas de Gortari, no se opondrían a la revisión de la obra.

La Presidencia de la República rechazó, ya en una ocasión, a través de su vocero Eduardo Sánchez la propuesta del tabasqueño. Sánchez dijo que mover el NAIM a la base militar de Santa Lucía ha sido calificado como inviable por consultores aeronáuticos internacionales.

Ahora, en conferencia conjunta con Federico Patiño Márquez, director general del Grupo Aeroportuario de la Ciudad de México (GACM), volvió a defender la construcción del NAIM y sus avances.

Eduardo Sánchez resaltó que la obra tiene una inversión de 140 mil millones de pesos comprometidos en 321 contratos, y el NAIM es hoy el principal generador de empleos del país.

“El esquema de financiamiento y los procesos de contratación de obra del Nuevo Aeropuerto se llevan a cabo conforme a las recomendaciones de la Organización para la Cooperación y Desarrollo Económicos”, destacó el Vocero de la Presidencia.

En su turno, Federico Patiño Márquez defendió la legalidad de la obra y aseguró que la cancelación del NAIM implicaría pérdidas para el Gobierno por 120 mil millones de pesos.

“Al final de año tendremos aproximadamente unos 70 mil millones de pesos, pero si consideramos que esa inversión que se está haciendo no va a poder recuperarse, porque va a ser una cancelación, además de las penas y comisiones que también tendremos habrá seguramente demandas de daños y perjuicios, de penas comisionales que lo establecen los propios contratos”, explicó en conferencia.

Mencionó que Texcoco es la única opción cercana a la Ciudad de México y permitirá “incrementar casi cuatro veces la capacidad actual y concentrar las operaciones nacionales e internacionales en un solo aeropuerto”, agregó.

Por su parte, la aspirante independiente a la Presidencia, Margarita Zavala Gómez del Campo, señaló este día que el NAIM saldrá adelante, porque en su Gobierno –si llega a ganar las próximas elecciones–,  protegerá el Estado de derecho.

Durante la presentación de su equipo de coordinación de campaña, consideró que si el Consejo Coordinador Empresarial invitó a los aspirantes presidencial a una mesa de debate, en torno al NAIM, ella tendría que estar invitada: “yo supongo que el consejo coordinador empresarial al invitar a todos los candidatos me esté invitando a mí”, dijo la esposa del ex mandatario Felipe Calderón Hinojosa.

“Vamos a proteger al Estado mexicano, y los compromisos del Estado mexicano no son de un Gobierno en turno, los compromisos son del Estado mexicano y la certeza mexicana es fundamental. Por eso digo que el aeropuerto saldrá, sin prejuicio como siempre de la transparencia y de la rendición de cuentas, que a eso está obligado cualquier Gobierno”.

El candidato de la coalición “Por México al Frente”, Ricardo Anaya Cortés, también se ha pronunciado al respecto. La semana pasada señaló que cancelar la construcción del NAIM era “un abosluto disparate”.

“Me parece un absoluto disparate la idea de dar marcha atrás a la construcción del aeropuerto, es una obra que ya está en proceso. Cancelarla implicaría tirar mucho dinero de los mexicanos que han invertido en esa obra”, aseguró el panista.

El NAIM se construye en un terreno donado por la Comisión Nacional del Agua (Conagua) de 4 mil 960 hectáreas. Para octubre de 2020 se estima tener tres pistas donde se realizarán 540 mil 500 operaciones simultáneas por año, un Edificio Terminal para 68 millones de pasajeros anuales y una Torre de Control del Tráfico Aéreo.

A dos años de arrancar la construcción, los avances sólo se registran en las obras preliminares y cimentación del suelo, el Grupo Aeroportuario de la Ciudad de México (GACM) estima que el Presidente Enrique Peña Nieto entregará “obra negra” de manera simbólica antes de terminar su gestión.