París, 12 Jun (Notimex).- La zona euro requiere una verdadera supervisión bancaria comunitaria, pues sin ello cada miembro interpondrá sus intereses nacionales inmediatos y dejará a la unión monetaria en riesgo, estimó hoy el diario francés Le Monde.
En su editorial “Del buen uso de la crisis financiera europea”, el periódico comentó que el episodio español, su crisis bancaria y la ayuda que recibirá de la Eurozona, es parte de la interminable saga del euro, por lo que debe aprenderse la lección.
La necesidad de que exista una supervisión bancaria en la zona euro ha sido mencionada desde hace mucho tiempo y el único recordatorio de ello es la actual crisis española, que ahora debe convencer a los más escépticos, indicó el rotativo.
España ha obtenido un préstamo de 100 mil millones de euros (125 mil millones de dólares) de financiación de la Unión Europea (UE), enorme suma que debe permitir la recapitalización de un sector bancario en malas condiciones, refirió.
Hace unos días aún el presidente del gobierno español, Mariano Rajoy, aseguró que su país no necesitaba el dinero de Europa, que Madrid lograría sobre la marcha los fondos necesarios para el rescate de sus bancos, que encontraría los recursos para inyectar a Bankia, recordó.
Hace unos meses, se dijo en Madrid que Bankia necesitaba, a lo sumo, mil 300 millones de euros (mil 623 millones de dólares), “una bagatela en términos del dinero gastado durante más de dos años para salvar al euro”, indicó.
El banco español apenas cruzó con éxito las pruebas a su estado de salud organizadas con la complicidad de las autoridades bancarias nacionales gracias a “una agencia europea sin poderes”, fustigó.
Por último, hace varios años ya que los economistas sonaron la alarma. España basa su crecimiento en “una burbuja inmobiliaria: la construcción a ciegas, financiada por créditos difusos de las cajas de ahorros en las manos de los políticos”, señaló.
“La receta perfecta para una catástrofe, pero su membresía al euro hace que las patología que ella (España) sufre puedan desestabilizar al conjunto de la zona”, advirtió.
Según Le Monde, es el mismo escenario con Grecia, Irlanda o Portugal, pero con efectos de contagio más pesados, pues España es la cuarta mayor economía en la zona euro, por lo que el clima de desconfianza predomina en los mercados.
El caso español muestra que los Estados miembros de la zona abandonados a su propia suerte sí desean aprovechar las ventajas del euro pero sin respetar ninguna de las restricciones, “fuera de la supervisión, hacer hincapié en sus intereses nacionales inmediatos”.




