Hermosillo, 14 Jun. (Notimex).- Las ex funcionarias de la tesorería estatal en la administración de gobierno del ex mandatario, Eduardo Bours Castelo, que presuntamente desviaron 186 millones de pesos, rechazaron las acusaciones que se les imputan.
En un comunicado de prensa, la ex titular de la Tesorería estatal, Paola Vanezza García Estrada y quien fuera su asistente, Dulce María Huerta Meza, aclararon que el presunto acto señalado fue del conocimiento del Congreso local.
Mencionaron que “fue discutido, dictaminado y analizado por el H. Congreso del Estado de Sonora con motivo de la revisión anual de la Cuenta Pública estatal para el período 2009”.
Asimismo, en su reporte sobre el estudio a la Cuenta Pública 2009 el Instituto Superior de Auditoría y Fiscalización (ISAF) descarta que el presunto acto o cualquier otra operación dentro del ejercicio fiscal sea daño patrimonial a las finanzas estatales, indicaron.
Señalaron que en la auditoría externa practicada por el despacho contable de Sotomayor Elías S.C. también quedó descartado que cualquier acto, operación u omisión constituya daño patrimonial a las finanzas públicas estatales.
“Por lo tanto, exigimos que las autoridades estatales actúen conforme a derecho y no pretendan distorsionar la información con intereses ajenos a la verdad”, puntualizaron las ex funcionarias del gobierno estatal en la pasada administración de gobierno.
El secretario de la Contraloría General del Estado, Carlos Tapia Astiazarán, informó hoy que se giraron órdenes de García Estrada y Huerta Meza por los delitos de uso indebido de atribuciones, ejercicio indebido del servicio público, peculado y falsificación.
A ellas se les acusa de ser las presuntas responsables de cobrar 74 cheques por un monto de 186 millones de pesos en el importe mencionado entre febrero y julio de 2009, durante la administración del ex gobernador Bours Castelo.




