México, 27 Ene. (Notimex).- La diputada local Dinorah Pizano Osorio consideró que no se debe modificar el Programa de Desarrollo Urbano de la delegación Benito Juárez para evitar construcciones, y pidió dar continuidad a la Norma 26 en la materia.
Explicó que dicha norma puede aplicarse sin violar las modificaciones realizadas por la Secretaría de Desarrollo Urbano y Vivienda (Seduvi), que protegen suelo de conservación, zonas de alto riesgo y la vulnerabilidad.
La asambleísta exhortó al titular de esa demarcación para que realice las verificaciones correspondientes y aplique sanciones, no sólo en lo referente a la Norma 26 sino a todas las irregularidades de las construcciones que se llevan a cabo en esa zona.
Con ello, dijo, se protege el patrimonio histórico y la visión urbana de colonias como Mixcoac y San José Insurgentes, Niños Héroes de Chapultepec, Parque San Lorenzo, Parque Tlacoquemécatl, San Juan Extremadura Insurgente, donde se han detectado construcciones irregulares.
“El Programa Delegacional de Desarrollo Urbano de Benito Juárez, que data del 2005, es importante que no sea modificado y la delegación continúe omisa ante las construcciones irregulares, la proliferación de vivienda, que debería ser de interés social y que viola la Norma 26”, advirtió.
La diputada de la Asamblea Legislativa del Distrito Federal (ALDF) expuso que dicha Norma permite justamente incentivar la producción de vivienda sustentable de Interés Social y Popular.
Sin embargo, la Seduvi la suspendió el pasado 8 de Octubre de 2012 al 23 de enero de este año, debido al abuso de la iniciativa privada que con artimañas solicitó permisos de construcción con un fin, y en la preventa triplicó los costos, advirtió.
Agregó que la Seduvi hizo algunas modificaciones a la Norma 26 en las que se establece que ésta no aplica en suelo de conservación, zonas de alto riesgo y vulnerabilidad, predios que no tengan acceso a vía pública o ésta sea menor a seis metros de ancho.
Ni tampoco en predios cuya factibilidad de servicios sea negativa y áreas de conservación y valor patrimonial, a fin de garantizar el rescate y mejoramiento del Patrimonio Cultural Urbano de la Ciudad de México.
Indicó que para dar permisos de construcción se debe contar con espacios libres, cajones de estacionamiento, tamaños determinados de los departamentos y el precio establecido es de 20 a 30 veces el mínimo como máximo, es decir, un departamento costaría de 360 mil a 700 mil pesos.
Explicó que derivado de la reforma a la Norma 26 publicada el 23 de enero, aquellas construcciones que se hayan tramitado antes del 8 de Octubre de 2012, y que aún se les pudo otorgar el permiso respectivo quedan prohibidas.
