Los ingresos de locales operados por McDonald’s cayeron hasta mil 593.7 millones de dólares y la facturación de los restaurantes franquiciados bajó hasta 2 mil 088 millones de dólares.
El viernes anunció que a partir del 1 de agosto requerirá el uso de cubrebocas en todos sus restaurantes de Estados Unidos.
Chicago, EU, 28 de julio (Europa Press/EFE).- La cadena estadounidense de restaurantes de comida rápida McDonald’s registró un beneficio neto de 483.8 millones de dólares en el segundo trimestre de 2020, lo que representa una caída del 68 por ciento respecto de las ganancias contabilizadas por la compañía un año antes y su peor resultado trimestral en los últimos 13 años.
La cifra de negocio de McDonald’s entre abril y junio alcanzó los 3 mil 761.5 millones de dólares, situándose un 30.5 por ciento por debajo de los ingresos correspondientes al segundo trimestre de 2019, lastrados por el cierre temporal de restaurantes, particularmente en Reino Unido y Francia.
En el segundo trimestre, los ingresos de locales operados directamente por McDonald’s cayeron un 33.6 por ciento, hasta mil 593.7 millones de dólares, mientras que la facturación de los restaurantes franquiciados bajó un 29 por ciento, hasta 2 mil 088 millones de dólares.
De este modo, en los seis primeros meses de 2020 la multinacional contabilizó un beneficio de mil 590.7 millones de dólares, un 44 por ciento menos que en la primera mitad de 2019, mientras que sus ingresos cayeron un 18.8 por ciento, hasta 8 mil 475.9 millones de dólares.
Al 30 de junio, McDonald’s estimaba que el 96 por ciento de sus restaurantes estaban operativos, incluyendo el 99 por ciento de los locales de EU y un 94 por ciento a nivel internacional, señalando que Latinoamérica era la región donde más restaurantes permanecían cerrados.
“Vimos una mejora continua en nuestros resultados durante el segundo trimestre a medida que los mercados reabrieron en todo el mundo”, declaró el presidente y consejero delegado de McDonald’s, Chris Kempczinski.
ORDENA USO DE CUBREBOCAS
McDonald’s anunció el viernes que va a requerir el uso de cubrebocas en todos sus restaurantes de Estados Unidos a partir del 1 de agosto, sumándose así a otras grandes cadenas como Starbucks o el gigante minorista Walmart que ya hacen lo propio para frenar el avance del coronavirus.
La empresa de comida rápida explicó que casi el 82 por ciento de los más de 14 mil establecimientos que tiene en EU están en lugares que ya requieren el uso de mascarillas, pero defendió la conveniencia de proteger a “todos los empleados y clientes”.
Según dijo en una nota, McDonald’s formará a sus empleados para que puedan hacer cumplir esta política de forma “amistosa y positiva” y preparará protocolos para servir en áreas separadas a los clientes que no puedan usar mascarillas o se nieguen a hacerlo.
Aunque en Estados Unidos las normas para protegerse de COVID-19 varían de un lugar a otro, varias grandes empresas han apostado por requerir el uso de mascarillas a escala nacional.
McDonald’s, además, anunció este viernes que colocará en todos sus restaurantes nuevos paneles para separar a clientes y empleados con el fin de aumentar las precauciones y que no permitirá durante 30 días más la reapertura de más restaurantes para servicio en el interior.
Este mes, la compañía ya había decidido poner en pausa las reaperturas durante tres semanas a la vista del rápido avance del coronavirus en numerosos estados del país.
