La cotización de las mezclas retrocedió ante los renovados temores a que nuevas restricciones para frenar la pandemia de coronavirus golpeen a la demanda global de petróleo.
El mercado mantuvo asimismo su atención en conflicto entre Armenia y Azerbaiyán, en una zona especialmente sensible por sus infraestructuras energéticas.
Ciudad de México, 29 de septiembre (SinEmbargo/EFE).- En medio de la persistente preocupación por el aumento de casos de COVID-19 en todo el mundo y su impacto sobre la demanda de crudo, los petroprecios sufrieron este martes una fuerte caída.
La mezcla mexicana de petróleo de exportación registró una caída de 2.73 por ciento, desde el cierre anterior. El barril de crudo nacional se vendió 1.04 dólares menos, hasta 37.11 dólares.
El precio del barril de petróleo Brent para entrega en noviembre terminó hoy en el mercado de futuros de Londres en 40.96 dólares, un 3.51 por ciento menos que al finalizar la sesión anterior. El crudo del mar del Norte, de referencia en Europa, concluyó la jornada en el International Exchange Futures con un descenso de 1.49 dólares respecto a la última negociación, cuando cerró en 42.45 dólares.
El precio del petróleo intermedio de Texas (WTI) cerró este martes con una caída del 3.2 por ciento, hasta 39.29 dólares el barril. Al final de las operaciones en la Bolsa Mercantil de Nueva York (Nymex), los contratos de futuros del WTI para entrega en noviembre recortaron 1.31 dólares respecto a la sesión previa del lunes.
El precio del barril vivió una jornada negativa marcada por la incertidumbre respecto a la recuperación de la demanda; la previsión de que mañana el Gobierno de EU revele un aumento semanal en las reservas de crudo y la expectativa por el primer debate presidencial.
Ya se ha alcanzado un millón de fallecidos en todo el mundo a causa de la COVID-19, de los cuales una quinta parte corresponden a EU, donde se acumulan 33.4 millones de casos, y los inversores temen que se reimpongan restricciones a la movilidad por su efecto sobre la demanda de combustible.
El mercado está pendiente de conocer los datos sobre reservas que divulgará primero esta tarde el Instituto de Petróleo de EU, un grupo privado, y mañana el Gobierno de EU, y que puede dar pistas sobre el crecimiento de la demanda.
Los analistas prevén de media un aumento en torno a 1.9 millones de barriles en los inventarios nacionales para la semana terminada el 25 de septiembre, de acuerdo a una encuesta de la firma S&P Global Platts.
“Los precios del crudo siguen oscilando cerca de los 40 dólares tras finalmente subir este lunes, y la debilidad del dólar está dando al mercado de productos básicos un empujón. Pero sigue enfrentando una resistencia hacia arriba, por una buena razón”, dijo en una nota el analista Craig Erlam, de la firma Oanda.
Además, en el plano político, los mercados están pendientes del debate que mantendrán esta noche el presidente Donald Trump y su rival a la Casa Blanca, el demócrata Joe Biden, donde observarán si puede haber un vencedor claro de cara a los comicios de noviembre.
En cuanto a la geopolítica, los inversores tienen la mirada en el conflicto entre Armenia y Azerbaiyán, ya que una escalada de tensión podría afectar a las exportaciones de petróleo y gas de este segundo país.
Por otra parte, los contratos de gasolina con vencimiento en octubre restaron más de 4 centavos hasta los 1,20 dólares el galón, y los de gas natural para entrega en noviembre, el nuevo mes de referencia, restaron 23 centavos, hasta 2,56 dólares por cada mil pies cúbicos.