Author image

Redacción/SinEmbargo

30/12/2017 - 5:14 am

Entre coaliciones y candidatos / Rounds de precandidatos / 2018 confuso

Las coaliciones de cara al proceso electoral de 2018 siguen llamando la atención de la opinión pública, que ha desmenuzado los diversos interese ocultos detrás de la unión de fuerzas políticas contrarias en su esencia. Las coaliciones han avanzado pese a las sospechas de dificultades para llegar a acuerdos, destacando que el motivo de la unión es debido a sus debilidades y no a sus fortalezas

Entre coaliciones y candidatos
Las coaliciones de cara al proceso electoral de 2018 siguen llamando la atención de la opinión pública, que ha desmenuzado los diversos interese ocultos detrás de la unión de fuerzas políticas contrarias en su esencia. Las coaliciones han avanzado pese a las sospechas de dificultades para llegar a acuerdos, destacando que el motivo de la unión es debido a sus debilidades y no a sus fortalezas. Al respecto en Milenio, el columnista Liébano Sáenz, escribe que: “a diferencia del pasado inmediato, esta vez los comicios presidenciales habrán de ser protagonizados por tres grandes coaliciones […]. Pero eso no es todo en el nuevo escenario que se nos presenta en 2018. Ahora tendremos candidatos independientes, […] y todo ese conglomerado de aspirantes no solo significa recursos económicos y prerrogativas mediáticas, sino una disputa real por los votos, como nunca antes, en el territorio […]. Dos coaliciones han llamado la atención: la del PAN con PRD y Movimiento Ciudadano y la del PES con el Morena […]. Lo relevante de hoy es que la disputa es en el nivel nacional, y ocurre no por la fortaleza de las dos organizaciones, sino por su debilidad […]. Pero más allá de intereses y de coyunturas, lo cierto es que las coaliciones se suscriben porque han perdido peso las ideologías y los programas partidarios. Los partidos se encaminan con mayor contundencia hacia objetivos electorales. Ganar el poder es de lo que se trata […]. Por otro lado, el peso que pierden los partidos se traslada a los candidatos […]. Esto es más evidente en el caso de López Obrador, quien mantiene una postura propia incluso respecto al grupo de trabajo por él designado para preparar el programa de gobierno. Un candidato sin ataduras partidarias pudiera aparecer como un candidato fuerte; sin embargo, esto debe matizarse con una propuesta racional, viable y bien estudiada. Esta es una debilidad más que fortaleza de López Obrador […]. Un candidato que promete sin cuidar los términos de su compromiso, se vuelve vulnerable en la medida en que se incrementa el escrutinio y el debate […]. En el horizonte de la elección, los candidatos presidenciales independientes pueden ser disruptores del sentido convencional del debate. Pueden capitalizar el descontento con los partidos y las formas convencionales de ejercicio del poder, pero también resultarían poco creíbles en la medida en que se les viera aislados en la contienda y particularmente sin ‘músculo’ legislativo. Los candidatos presidenciales resultan ‘cuerpeados’ no tanto por la estructura partidaria, sino por las campañas que realizan sus correligionarios en elecciones concurrentes […].Candidatos, partidos y coaliciones resultan buenas intenciones, pero una realidad sumamente compleja al trasladar al territorio los términos de la competencia. Lo que a muchos les parece más o menos claro en la perspectiva nacional se vuelve incierto al considerar la dinámica local y regional. De modo que la coalición que mejor articule las múltiples realidades del país es la que tendrá mejores posibilidades de éxito”.

Pese a que la coalición “Por México Al Frente” se ha dicho más unida que nunca, muchos comienzan a preguntarse si el perredismo apoyará a Anaya en 2018. Sobre el tema en El Universal, su Editorial, asegura que: “en la dirigencia nacional del PRD, que encabeza Manuel Granados, se tomó la decisión de acompañar en todas las giras al precandidato de la coalición Por México al Frente, Ricardo Anaya. Uno de los motivos es que hay preocupación en las filas perredistas porque la candidatura de Anaya no jale con el voto perredista y la votación en el sol azteca se les caiga en 2018. Nos cuentan que hay integrantes del PRD que, a pesar de que su partido va en alianza con el PAN y MC, no les cuadra todavía votar por el panista y es necesaria una campaña de identificación en todo el país para que asocien a Anaya con el PRD. Muestra de ello es que el secretario general del sol azteca, Ángel Ávila, lo acompañó el pasado jueves a un evento en Tlalnepantla, Estado de México. Así que no sólo es el mexiquense Juan Zepeda quien está tratando de acercar al panista a la izquierda, sino que en la cúpula perredista hay una verdadera preocupación por que los militantes amarillos los abandonen”.

Rounds de precandidatos
Los precandidatos parecen estar preocupados por mantenerse vigentes entre la militancia de sus respectivos partidos a fin de asegurar su lugar en la boleta. Sobre este tema en Milenio, su columna de trascendidos Trascendió, asegura que: “los rounds de sombra y bostezo parecen ser el tono de las precampañas de los aspirantes presidenciales, fijando algunas posiciones, lanzando uno que otro alfilerazo, pero nada que conmueva a una opinión pública ocupada más en las festividades de fin de año que en los tibios retos que dejan asomar Andrés Manuel López Obrador, José Antonio Meade y Ricardo Anaya. Más movidos andan los precandidatos a suceder a Miguel Ángel Mancera, salvo la perredista Alejandra Barrales, quien acaso piense que tiene tan segura la postulación del Frente que está más activa en el ciberespacio que en el mundo real, a diferencia de sus compañeros Salomón Chertorivski y Armando Ahued, y no se diga el neopriista Mikel Arriola. Habrá que ver si con el arranque de 2018 le ponen más carácter a la contienda”.

En el diario Reforma, su columna de trascendidos Templo Mayor, asegura que: “el que casi se priva del berrinche fue el Senador, ahora ex perredista, Fernando Mayans Canabal, quien dio el monrealazo en Tabasco. Como no resultó candidato del Frente PAN-PRD-MC a la gubernatura, decidió denunciar el proceso que originalmente había avalado, acusó que hubo dedazo sin presentar alguna prueba y, por supuesto, terminó sumándose a Morena de la mano de Andrés Manuel López Obrador. Quien resultó ganador de la consulta vía encuestas que hizo el PRD en Tabasco -donde actualmente es gobierno- fue el Alcalde Gerardo Gaudiano, quien era, según dicen, el favorito del Gobernador Arturo Núñez. Para más señas, Mayans Canabal se hizo famoso hace un año cuando fue exhibido bromeando, junto con otro Senador, sobre la aprobación de la ley contra la trata de personas, al argumentar que él como “usuario” también tenía derechos. Al verse derrotado, Mayans salió con que hubo imposición, que él tenía otras encuestas y se cambió la camiseta, aunque en Morena no tiene tampoco ninguna posibilidad de ser candidato, ya que ahí fue el propio AMLO quien designó a Adán Augusto López. Y ya se sabe que lo que diga su dedito es lo que se hace”.

2018 confuso
En el Excélsior, el columnista Julio Faesley, escribe que: “destacan las ventas de automóviles a Estados Unidos. La información hay que tomarla con cautela […]. Nadie puede pronosticar lo que en 2018 nos espera. Pocas veces se han presentado incógnitas tan espesas como ahora que avanza un año nuevo en el que, para complicar más el asunto, se realizarán elecciones para Presidente de la República y unos 3000 funcionarios más en todos lo niveles. Al que dude de la importancia de las decisiones que tomen los votantes el 1 de julio se le debe invitar a aquilatar los resultados que se han desprendido de los comicios en un sinnúmero de países en los últimos tiempos. Gracias a las elecciones en el Reino Unido, el rumbo de los cuatro países que lo componen ha variado sensiblemente. Francia ha cambiado diametralmente de curso y ha alejado el peligro de irse a una inflexible derecha […]. En nuestro continente, las elecciones aún recientes en Argentina, Perú, Ecuador y Brasil resuenan en los cambios que están en marcha. El clima de inestabilidad es perceptible. El caso de Estados Unidos se cuece aparte […]. La completa pérdida de una conciencia de responsabilidad colectiva que el Presidente Trump preconiza, conforme a crudas ambiciones localistas, destierran el espíritu de colaboración entre países que es más urgente que nunca. Lo que es aun más grave es que, dada la dimensión económica, política y militar de los Estados Unidos, el destructivo mensaje que hace ya un año irradia desde la Casa Blanca ha llevado a la comunidad internacional a alterar rutas estratégicas nacionales para acomodarlas a nuevos equilibrios políticos, económicos y de mutua seguridad […]. 2018 no se presenta fácil para nadie […]. Para México, el tablero presenta la opción de seguir con su vacilante paso, avanzando con pasos esporádicos y aleatorios o aprovechar el espacio que ofrece el enigmático capítulo en que se encuentran los acontecimientos internacionales, para organizar nuestros recursos humanos y materiales en un plan de acción bien articulado que nos dote de personalidad y fuerza internacional, el cual usaremos cuando nos convenga para ocupar la posición de influencia efectiva que nos corresponde. En 2018, México debe emprender la realización de desarrollo completo integral del que su pueblo es capaz. Los próximos meses son vitales para que el electorado tome conciencia de la trascendencia de su voto del que, como sucede en el resto del mundo, depende el rumbo y calidad del próximo gobierno mexicano. Hasta ahora ha desperdiciado ese instrumento. El mensaje tiene que llegar hasta la profundidad síquica de cada ciudadano. Los líderes políticos tienen que afrontar su deber y no eludirlo en recíprocas acusaciones estériles”.

Adiós turismo
Sobre la tensa relación entre México y Estado Unidos luego de las estrictas políticas migratorias impuestas por Donald Trump, en el Excélsior, su columna de trascendidos, Frentes Políticos, asegura que: “toda acción, corresponde una reacción y eso lo está comprobando el Presidente de Estados Unidos. Más de un millón de mexicanos dejó de visitar el país vecino del norte, entre noviembre de 2016 y junio pasado, de acuerdo con datos de la Oficina Nacional de Viajes y Turismo de dicha nación. Este descenso se presentó desde que Donald Trump llegó a la Casa Blanca, en gran parte por sus declaraciones en contra de los migrantes mexicanos, las cuales han sido muy polémicas. Algunas personas con familiares en EU han desistido de viajar, unas por seguridad y otras por enojo ante las políticas del mandatario estadunidense. Ellos son los que pierden. Tourism Economics, que analiza datos sobre viajes internacionales, señala que el descenso de mexicanos que viajan a EU representa una pérdida de casi dos mil 700 millones de dólares en la derrama económica”.

Los contenidos, expresiones u opiniones vertidos en este espacio son responsabilidad única de los autores, por lo que SinEmbargo.mx no se hace responsable de los mismos.

en Sinembargo al Aire

Opinión

Opinión en video