Berlín, 28 Ago (Notimex).- Integrantes de la oposición siria presentaron hoy aquí el documento “El día después”, con propuestas para un futuro gobierno sin Bashar al-Assad, y solicitaron a la comunidad internacional ayuda que vaya “más allá de las palabras”.
Los portavoces del grupo de opositores de Siria recalcaron la necesidad de una intervención militar en ese país árabe para crear zonas de protección y zonas cerradas al tráfico aéreo, al tiempo que solicitaron que se proporcione armas potentes a los rebeldes.
El exiliado sirio Amar al-Azm señaló durante la conferencia de prensa en Berlín: “necesitamos esos medios para impedir que el régimen sirio mate a su propio pueblo”.
El grupo de opositores, que conforman alrededor de 45 personas, se pronunció en su plan de propuestas en su título original en inglés “The day after” (El día después) en favor de una pronta conformación de una Asamblea Constitucional y del cierre de cárceles clandestinas.
La Fundación alemana de Ciencia y Política (SWP) apoyó junto con otras organizaciones el trabajo de ese grupo de la oposición siria, que desde inicios de 2012 comenzó sus reuniones en forma secreta para elaborar dichas propuestas para la “era después de al-Assad”.
Los reunidos en Berlín pertenecen a la principal alianza opositora de ese país, el Consejo Nacional Sirio (SNC), así como por representantes de fuerzas de diferente línea política, étnica y religiosa, entre ellos sunitas, chiítas, cristianos y musulmanes.
En el documento se destacó la importancia de crear un estado de derecho “en un país en el que domina el régimen de arbitrariedad de unos cuantos”.
Esa agrupación de la oposición de Siria desea asimismo hacer frente mediante dicho documento a las acusaciones de las que han sido blanco y según las que “los opositores del régimen están peleados entre sí”.
Los representantes de la oposición siria destacaron que el documento “El día después” debe entenderse como una “propuesta” y no como una “hoja de ruta”.
Acerca de la interrogante sobre cuándo llegará a su fin el régimen de al-Assad, los opositores rechazaron hacer pronósticos, si bien recalcaron que Siria enfrentará entonces grandes retos, tanto en el ámbito económico y social, como en cuestiones de seguridad.
El trabajo de la oposición siria en Berlín contó asimismo con el apoyo financiero de los ministerios de Asuntos Exteriores de Suiza y Estados Unidos, así como de dos organizaciones no gubernamentales de Holanda y Noruega.
La presentación del documento “The day after” coincidió con una intensificación de los ataques aéreos por parte del régimen de al-Assad, que según informaciones de la prensa alemana bombardeó calles enteras en barrios de los alrededores de la capital, Damasco.
