Mitos y realidades sobre el embarazo de las adolescentes en México; algunos datos que debes conocer

25/09/2012 - 12:00 am

De los dos millones de nacimientos que ocurren en México cada año, 480 mil corresponden a mujeres de entre 14 y 19 años, de acuerdo con datos de la Secretaría de Salud federal dados a conocer este año. Según expertos, más del 60 % de los embarazos en adolescentes no fueron planeados.

El desconocimiento o mal uso de los métodos anticonceptivos, la poca información sobre la sexualidad, la baja escolaridad, la inadecuada comunicación familiar y el contexto cultural, son algunos  factores que han provocado el aumento de embarazos no planeados entre jóvenes. De acuerdo con la  Organización Mundial de la Salud (OMS), cada año 16 millones de niñas en el mundo, entre los 15 y 19 años de edad, tienen embarazos y partos. En México, de acuerdo con información del Consejo Nacional de Población, uno de cada seis nacimientos ocurre en mujeres menores de 19 años.

En promedio, las mujeres mexicanas tienen su primera relación sexual a los 15 años y la mayoría no usan algún método anticonceptivo, reveló el Instituto Nacional de las Mujeres (INMUJERES). Detalló que apenas cuatro de cada 10 adolescentes usan condón en su primera relación sexual, pues uno de los mitos es que no se pueden embarazar en su primera relación, lo cual es falso, ya que en cada relación sexual existe la posibilidad real de que la mujer quede embarazada.

Alejandro Rosas Solís, subdirector de Salud Sexual y Reproductiva del Centro Nacional de Equidad, Género y Salud Reproductiva, asegura que un embarazo en la adolescencia eleva cinco veces el riesgo de morir durante la atención obstétrica. También hay repercusiones en la salud del recién nacido, señaló, como bajo peso, inmadurez pulmonar y problemas de control de temperatura. Por otra parte, la falta de uso de algún método anticonceptivo en la primera relación sexual, alertó, aumenta el riesgo de presentar embarazos no planeados y el contagio de infecciones de trasmisión sexual como el virus del papiloma humano y el VIH/ Sida.

Por otra parte, expertos coinciden que los padres adolescentes presentan una disminución de oportunidades de educación y trabajo, así como también el truncamiento de muchos planes de vida. Por otra parte, el embarazo a temprana edad se asocia con mayor fecundidad; el Consejo Nacional de Población ha reportado que las mujeres que tuvieron su primer hijo antes de los 18 años, alcanzaron una descendencia de 4.8 hijos 12 años después del nacimiento del primogénito. Mientras que aquellas que tuvieron su primer hijo a partir de los 23 años presentaron una fecundidad de 3.2 hijos.

Actualmente, el Internet, las redes sociales y la telefonía móvil han dado pie a un fenómeno que según investigadores puede terminar en embarazos a temprana edad. Se trata de “sexting”, que es el envió de archivos digitales eróticos o sexuales (fotografías, videos, audios…) por medio de dispositivos de comunicación.

El “sexting” no es una alternativa al comportamiento sexual del “mundo real” en los adolescentes, según la investigación publicada en la revista Pediatrics. “Los mismos adolescentes que están involucrándose en los riesgos sexuales digitales que implica el sexting son los mismos que se involucran en un riesgo sexual con sus cuerpos en términos de ser sexualmente activos y no usar condones”, dijo el autor principal del estudio, Eric Rice, profesor asistente en la Escuela de Trabajo Social de la Universidad del Sur de California en Los Ángeles, Estados Unidos. Un reporte de 2009 del Pew Research Center encontró que algunos adolescentes “ven el sexting como una alternativa más segura para la actividad sexual en la vida real”. Según los investigadores, la apertura que existe en Internet han provocado que esta práctica sea considerada por los jóvenes como una conducta normal.

El Centro Nacional de Equidad de Género y Salud Reproductiva, dependencia de la Secretaría de Salud, recomienda a los jóvenes que se han dado cuenta que serán padres, acudir de inmediato a una institución de salud para que el médico identifique las semanas de gestación y solicite a la jóvenes practicarse estudios de sangre y orina, así como un ultrasonido, a fin de verificar el estado del producto y la madre.

en Sinembargo al Aire

Lo dice el Reportero

Opinión

Opinión en video