México, 26 Sep. (Notimex).- El secretario General de la Central Campesina Cardenista (CCC), Max Correa Hernández, propuso que en la reforma a la Ley Federal del Trabajo se incluya un salario mínimo vital para los trabajadores del agro.
En rueda de prensa, Correa Hernández consideró necesario incluir a 3.5 millones de ejidatarios y seis millones de jornaleros agrícolas para que puedan acceder a un ingreso que les permita satisfacer sus necesidades básicas como alimentación, salud y educación.
En el acto, en el que presentó cinco ejes del proyecto “Otro Campo es Posible: Soberanía alimentaria, Respeto a los Derechos de la Tierra, Cambio Climático, Respeto a los Derechos Humanos y Democracia Sindical”, el dirigente habló de la situación que enfrentan quienes viven en el medio rural y carecen de ingresos seguros por su trabajo.
Es momento de que durante el proceso de discusión de las modificaciones a la Ley Federal del Trabajo, tanto el Ejecutivo federal como el Congreso de la Unión incluyan el concepto denominado “mínimo vital” para el sector campesino.
Llamó al presidente electo, Enrique Peña Nieto, y al Congreso de la Unión a considerar propuestas de modificación al Programa Especial Concurrente 2013 para fortalecer la producción de alimentos en México.
Correa Hernández también propuso superar la pobreza alimentaria a través del programa “Todos Comen”, el cual se basa en que las familias campesinas produzcan sus propios alimentos de autoconsumo y a partir de ahí se genere una reserva alimentaria.
Recordó que el 16 octubre próximo es el Día Mundial de la Alimentación y en México la celebración será entre el encarecimiento y escasez de alimentos, situación que propicia que los pequeños productores abandonen la tierra.
A su vez, Santiago Domínguez, secretario de Desarrollo Rural de la CCC, calculó que los aumentos en los insumos van de 200 a 300 por ciento como sucede en los fertilizantes, lo que también ha provocado la desaparición de pequeños establos.
Refirió que Liconsa paga 5.70 pesos por litro de leche, lo que es insuficiente; en tanto que los 700 millones de litros de leche que ésta compra a diario también son insuficientes pues la producción supera esa cantidad.
Santiago Domínguez informó que la tonelada de fertilizante fosfatado que se ubicaba en cuatro mil pesos subió su previo hasta 12 mil pesos por tonelada; la Urea pasó de tres mil 500 pesos a ocho mil 500 pesos la tonelada.
También comentó que el precio del maíz aumentó de dos mil 500 a cinco mil 400 pesos la tonelada, pero esa diferencia no representa un ingreso adicional para el productor.