Rocco Buttiglione envió una carta a los miembros de la Academia Internacional de Líderes Católicos para asegurarles que el Papa Francisco lo respaldó ante la crisis que detonó el plan de El Yunque de apoderarse de las universidades católicas del mundo, pero omitió toda referencia a la organización secreta de ultraderecha.
Ciudad de México, 27 de abril (SinEmbargo).-La muerte del Papa Francisco atizó las intrigas en la Iglesia y hasta su figura fue utilizada políticamente por el presidente de la Academia Internacional de Líderes Católicos, Rocco Buttiglione, para mitigar la “difícil crisis” que originó en ese organismo y hasta en El Vaticano la organización secreta mexicana El Yunque, que el político italiano defiende por estar ligado política, ideológica y hasta familiarmente a ella.
El mismo día que falleció el Papa Francisco, el lunes 21 de abril, Buttiglione envió una carta a los miembros del organismo que capacita a políticos católicos para asegurarles que el Pontífice lo respaldó ante la crisis que detonó el plan de El Yunque de apoderarse de las universidades católicas del mundo, revelado por el reportero el 17 de marzo en SinEmbargo, pero omitió toda referencia a la organización secreta de ultraderecha nacida en México y extendida a varios países.
Mensaje_Rocco_Buttiglione_Muerte_Papa_Francisco“En un momento difícil, en el que la Academia estaba siendo atacada, acusada de ser conservadora y de derechas, fui a verle y le dije:'Si cree que la Academia no sirve a la Iglesia o que es un obstáculo para la renovación que usted desea, dígamelo libremente. La cerraré en 48 horas'. Él se echó a reír, me preguntó si me había vuelto loco y nos animó poderosamente a continuar, dándonos la confianza y la ayuda que necesitábamos en ese momento”.
La carta obtenida por este medio, publicada horas después de la muerte de Francisco y que no precisa la fecha del encuentro, ha concitado dudas en la propia Academia Internacional de Líderes Políticos y hasta en El Vaticano sobre la autenticidad de la reunión, incluyendo los términos relatados por Buttiglioni, sobre todo por el grave estado de salud del Pontífice entre lo revelado por este medio, el 17 de marzo, y su fallecimiento.
Más aún, cinco días antes del fallecimiento de Francisco, el 16 de abril, el político italiano envió una carta al cardenal Luis José Rueda Aparicio, arzobispo de Bogotá —copia de la cual tiene este medio— para explicarle la “difícil crisis” por la que atraviesa la Academia Internacional de Políticos Católicos, pero no consigna ninguna reunión con el Papa, aunque en este documento sí se refiere a la organización secreta El Yunque y por primera vez admite sus relaciones políticas y hasta familiares.
En su carta al cardenal Rueda Aparicio, Buttiglione confirma lo publicado por el reportero en el sentido de que, desde hace muchos años, mantiene relación política e ideológica con los jefes de El Yunque, entre ellos Bernardo Adavín Migoni y Guillermo Velasco Arzac, y que es consuegro de otro de los jerarcas, el panista Francisco Javier Salazar Sáenz, cuyo seudónimo es Capablanca, secretario del Trabajo de Vicente Fox.
Carta_Cardenal_Rueda_Abril_2025Consuegro Yunque
Aunque niega que la Academia de Líderes Católicos y él mismo participen en la conjura de El Yunque para que uno de sus integrantes, Emilio Baños Ardavín, Rector de la Universidad Popular Autónoma del Estado de Puebla (UPAEP), sea electo presidente de la Organización de las Universidades Católicas de América Latina y el Caribe (Oducal), en junio, sí admite una estrecha relación con esa organización:
“1. Mi hija se casó con un joven mexicano que es hijo de uno de los jefes del Yunque en años pasados. Se trata de Francisco Salazar, que yo conocí como político del PAN y ministro del presidente Fox. Es una persona de rectitud intachable cuya honestidad y fidelidad al Papa nunca ha sido cuestionada por nadie.
“2. Durante mi campaña en defensa del Papa Francisco contra las acusaciones de haber traicionado la doctrina católica con la Exhortación Apostólica Amoris Laetitia, me reuní con los líderes del Yunque para explicarles Amoris Laetitia y lacontinuidad sustancial (aunque con diferencias legítimas) entre San Juan Pablo II y el Papa Francisco. Creo que mi misión tuvo un éxito sustancial porque el Yunque no se unió a los ataques contra el Papa, excepto algunos sectores marginales en polémica incluso con las autoridades centrales del propio Yunque.
“3. Participé en un Congreso de los Círculos de Cultura Católica Latinoamericana que se celebró en la UPAEP en septiembre del año pasado. Defendí, como siempre, el Magisterio del Papa Francisco. En el mismo congreso también intervinieron el Prof. Rodrigo Guerra, el cardenal Tolentino, Prefecto del Dicasterio para la Educación Católica, y Mons. Lizardo, secretario general del CELAM.
“4. La UPAEP me ha ofrecido un doctorado honoris causa que estoy dispuesto a aceptar”. Salvo porque niega ser parte de la conjura de El Yunque para apoderarse de las universidades de Latinoamérica con Baños Ardavín y la Federación Internacional de Universidades Católicas con el costarricense Fernando Sánchez Campos, el político italiano se expone como un conocedor de El Yunque, sus orígenes y sus propósitos. El presidente de la AILC le dice al cardenal colombiano: “El Yunque es una asociación mexicana fundada en 1953, en un período en el que la libertad religiosa en México estaba severamente limitada. Los miembros estaban obligados a mantener en secreto su pertenencia y a menudo se infiltraron en otras organizaciones legales tratando de orientarlas hacia un proyecto de reconquista católica conservadora”.
Agrega: “Tras el retorno de un régimen democrático y de libertad religiosa en México, El Yunque inició un proceso de transformación que incluye el abandono del secreto y la asimilación de la reforma conciliar. El desarrollo de este proceso es desigual en los diferentes países y, a menudo, también en las diferentes diócesis de un mismo país. La Academia no busca conflictos con nadie, se defiende si es calumniada y defiende el Papa y los obispos unidos con el si son atacados”.
También se refiere a mecanismos de violencia que esta organización secreta ha tenido desde su origen y hasta la fecha: “Sobre El Yunque se uniforma al juicio de la autoridad eclesiástica local. Donde El Yunque es agresivo y los obispos los condenan lo mismo hace la Academia. Donde El Yunque está en diálogo con los obispos la Academia no se pelea con El Yunque. Nos preocupamos, en todo caso, de no ser infiltrados y instrumentalizados ni por El Yunque ni por cualquiera organización secreta”.
El Yunque bueno
A lo largo de la carta al cardenal colombiano, Buttiglione no hace ni una sola condena a los mecanismos del secretismo de El Yunque ni a sus mecanismos de violencia, pero sí defiende a sus jerarcas y a su amigo Rodrigo Guerra López, el secretario de la Pontificia Comisión para América Latina de El Vaticano, quien tuvo que admitir que militó durante 12 años en la organización secreta, después de que fue exhibido como parte de la trama en este medio y por el director y fundador de la Academia de Líderes Políticos, José Antonio Rosas, también exjuramentado, quien tuvo que renunciar en medio de la crisis.
Sobre Rosas, quien fundó la Academia Internacional de Líderes Políticos, recuerda que “fue en sus años mozos miembro del Yunque, del que más tarde salió tras sufrir graves agravios e injusticias”, pero no lo respaldo como a Guerra López. Expone: “Debido a la dolorosa historia vivida en El Yunque, José Antonio es extraordinariamente, diría obsesivamente sensible, al tema del Yunque. A partir de septiembre del año pasado, José Antonio acusó sin pruebas a uno de los miembros del Consejo, el profesor Rodrigo Guerra López, secretario de la Pontificia Comisión para América Latina, de ser agente del Yunque y de participar enuna conspiración para elegir a Emilio Bastos Ardavin, rector de la universidad UPAEP de Puebla, como presidente de la ODUCAL (Organización de Universidades Católicas Latinoamericanas).
“El profesor Guerra fue miembro del Yunque en una época anterior a la de José Antonio, pero lo abandonó hace treinta años, e informó en su momento a la autoridad eclesial competente la violencia y los abusos sufridos a manos de algunos miembros de esa organización. Luego se convirtió en uno de los mayores conocedores y defensores del magisterio de San Juan Pablo II y del papa Francisco en el mundo y, en particular, en América Latina. Él ha contrastado eficazmente la tentativa –especialmente de la extrema— derecha de oponer un a otro los dos pontífices y de atacar la ortodoxia católica de Papa Francisco”.
Y añade: “En mi calidad de Presidente de la Academia, convoqué una sesión extraordinaria del Consejo e invité a José Antonio a presentar las pruebas de sus acusaciones. José Antonio no se presentó a esta sesión y envió su dimisión. En su lugar, llevó a cabo una intensa campaña de acusaciones sin pruebas contra el profesor Guerra. Algunos periodistas intentaron involucrar en esta campaña el cardenal Aguiar (primado de México) y el cardenal Pierre (nuncio del Papa en Estados Unidos y anteriormente nuncio en México)”. El reportero envió a Buttiglione, vía su correo electrónico personal, el 23 de abril, un cuestionario para preguntarle, entre otras dudas, en qué fecha precisa se reunió con el papa Francisco, lo que le contó sabe El Yunque y en qué lugares y países del mundo “El Yunque inició un proceso de transformación que incluye el abandono del secreto”.
Hasta el cierre de este reportaje, Buttiglione no había remitido las respuestas, pero lo que sí hizo fue borrar todos los documentos sobre El Yunque de la página oficial de la Academia, incluidas las renuncias de varios consejeros que sí rechazan a esa organización secreta que el Papa Francisco ya no prohibió.
