El Departamento de Defensa anunció que enviará más de mil soldados más a la frontera con México con lo que suman 10 mil los efectivos desplegados por la Administración de Trump.
Por María Ortiz
Los Ángeles, 24 de mayo (LaOpinión).- El Departamento de Defensa aprobó el despliegue de mil 115 soldados más en servicio activo en la frontera suroeste de Estados Unidos con México, asumiendo un mayor rol del ejército en el apoyo al control de la inmigración bajo la segunda Administración de Trump.
Las tropas se desplegarán en la Fuerza de Tarea Conjunta Frontera Sur para brindar apoyo logístico, ingeniería, asistencia médica y capacidades operativas, según informó el Comando Norte de Estados Unidos en un comunicado.
El grupo de trabajo conjunto incluirá:
- Aproximadamente 65 refuerzos individuales conjuntos del Ejército, el Cuerpo de Marines, la Armada y la Fuerza Aérea de EU.
- Aproximadamente 250 soldados de un comando de sostenimiento expedicionario para coordinar la logística y gestionar el sostenimiento.
- Aproximadamente 140 soldados de una compañía de alimentación de campaña de intendencia para proporcionar alimentación de campo al personal desplegado.
- Aproximadamente 125 soldados de un cuartel general de brigada de ingenieros y 145 soldados de un batallón de ingenieros para coordinar las misiones de construcción.
- Aproximadamente 310 soldados de dos compañías de construcción de ingenieros para construir rutas de movilidad y proteger la infraestructura y las instalaciones.
- Aproximadamente 75 soldados de una compañía de apoyo del área médica para brindar protección sanitaria al personal desplegado.
- Aproximadamente cinco aviadores de un elemento de apoyo logístico de la fuerza aérea de la Base Aérea Tyndall para coordinar la logística y la planificación del sostenimiento.
Hay alrededor de ocho mil 600 tropas federales estacionadas en la frontera. Dos Áreas de Defensa Nacional (ADN) que se extienden a lo largo de 230 millas (370 kilómetros) a lo largo de la frontera entre Nuevo México y Texas se han declarado como zonas que son extensiones de bases militares.
En abril, el Secretario de Defensa, Pete Hegseth, declaró que cualquier persona que intente ingresar al país ilegalmente en esas zonas ingresará a una base militar y será detenida por la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP, por sus siglas en inglés) y el Departamento de Defensa.
La semana pasada, el Departamento de Seguridad Nacional también solicitó 20 mil efectivos de la Guardia Nacional para apoyar las deportaciones masivas.
Con el anuncio del jueves, el despliegue de militares en la frontera con México aumenta a unos 10 mil efectivos.