Una ceñida mayoría de estadounidenses aún ven con malos ojos las redadas masivas contra los migrantes, y las políticas más radicales de Trump, pero también está a favor del muro fronterizo con México y ha endurecido su postura con respecto a aquellos que llegan al país sin papeles.
Ciudad de México, 19 de junio (SinEmbargo).– Estados Unidos se ha visto sacudida las últimas semanas por el inicio de las redadas masivas contra migrantes llevadas a cabo por el Gobierno de Donald Trump. En ese contexto, una encuesta revela que todavía hay una mayoría, que ha decrecido con el tiempo, que se mantiene en contra de este tipo de medidas más radicales, pero ha cambiado ya su postura con respecto a la construcción del muro fronterizo con México y con otros temas, como el camino a la ciudadanía para los que no tienen papeles y el asilo para ciudadanos extranjeros.
La encuesta realizada a principios de junio por el Centro de Investigaciones Pew, una de las encuestadoras más prestigiosas de Estados Unidos, concluye que ya hay una mayoría de ciudadanos que están a favor de ampliar el muro en la frontera con México: un 56 por ciento lo aprueba, un aumento de 10 puntos porcentuales con respecto a 2019.
Incluso entre los demócratas, el apoyo al muro creció casi al doble en estos seis años: pasó de un 14 por ciento de aprobación a un 27 por ciento en 2025.
Pero la resistencia a las medidas migratorias más radicales aún se mantienen como las opiniones mayoritarias: el 61 por ciento de los encuestas desaprueba la deportación de migrantes sin papeles a una prisión en El Salvador, mientras que un porcentaje mucho menor (37 por ciento) aprueba esta política. Las opiniones son similares respecto a la suspensión de las solicitudes de asilo de quienes buscan residir en Estados Unidos.
La gente desaprueba redadas de ICE… por poco margen
Los estadounidenses muestran una gran división con respecto al uso de las agencias policiales estatales y locales en los procesos de deportación (50 por ciento lo aprueba, 49 por ciento lo desaprueba), dice la encuesta. A la mitad también se dividen sobre si ofrecer dinero a migrantes que se encuentran en EU sin papeles para salir por su propia voluntad: 49 por ciento lo aprueba, 50 por ciento lo desaprueba.
Las medidas menos populares son la suspensión de mayoría de las solicitudes de asilo, pues un 60 por ciento está en contra y un 39 por ciento a favor. Un 59 por ciento también está en contra de eliminar el Estatus de Protección Temporal (TPS) para muchos migrantes que llegaron a EU huyendo de guerras u otros desastres en su país, con un 39 por ciento a favor.
Uno de los datos claves es que, incluso antes de que se llevaran a cabo las redadas masivas en Los Ángeles, el 54 por ciento desaprueba el aumento de estos operativos del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE, por sus siglas en inglés) en lugares de trabajo donde podrían trabajar personas que se encuentran en EU sin papeles. Pero el 45 por ciento está a favor.
De hecho, la mitad de los estadounidenses encuestados por el Pew afirma que el enfoque de la administración para deportar a los migrantes sin papeles es "demasiado descuidado". Aproximadamente cuatro de cada diez (39 por ciento) afirman que el enfoque de la administración ha sido correcto, mientras que el 9 por ciento dice que ha sido demasiado cuidadoso.
Además, una ligera mayoría de estadounidenses, el 55 por ciento, afirma que sería inaceptable que una ciudad o un estado no colaborara con las iniciativas federales de deportación en sus comunidades, por el 43 por ciento que lo ve aceptable.
¿Qué hacer con los migrantes?
La encuesta del Pew indica que la mayoría de los estadounidenses, un 65 por ciento, concuerda con que debería existir una manera para que los migrantes sin papeles permanezcan legalmente en el país, y el 36 por ciento, poco más de un tercio, afirma que estos inmigrantes deberían ser elegibles para la ciudadanía si cumplen ciertos requisitos.
Aproximadamente un tercio de los estadounidenses (el 34 por ciento) afirma que no se debería permitir que los migrantes sin documentos permanezcan legalmente, y casi la totalidad de este grupo –el 31 por ciento del total de estadounidenses– opina que debería haber una iniciativa nacional de las fuerzas del orden para deportarlos.
En este apartado, las líneas entre los que se identifican como demócratas y como republicanos abre una gran grieta. El 55 por ciento de los republicanos afirma que sería aceptable deportar a inmigrantes a otro país si no pueden regresar a su país de origen.
En comparación, el 13 por ciento de los demócratas opina que esto sería aceptable.
Ahora, concluye Pew más estadounidenses afirman que no se debería permitir que los migrantes sin papeles permanezcan en EU y que debería haber un programa nacional de deportación, en comparación con hace unos años. "Este cambio general se debe a la evolución de las actitudes del Partido Republicano. Como resultado, la brecha partidista en estas opiniones es mayor que en el pasado", detalla.
Hace ocho años, el 34 por ciento de los republicanos y el 8 por ciento de los demócratas afirmaban que no se debería permitir que los migrantes que residen sin papeles en EU permanecieran en el país y que debería haber un programa nacional de deportación (una brecha de 26 puntos porcentuales). Hoy, el 56 por ciento de los republicanos y el 8 por iento de los demócratas opinan lo mismo, una brecha de 48 puntos.
Ven más impacto en crimen que economía
El Centro de Investigaciones Pew encontró que los estadounidenses son más propensos a decir que esperan que las políticas cuesten dinero a los contribuyentes (53 por ciento) en lugar de ahorrarle dinero (29 por ciento). De hecho, un 46 por ciento cree que estas políticas "debilitarán a la economía" de EU, por 34 por ciento que cree que la fortalecerán. El resto, 19 por ciento, dice que no habrá impactos económicos.
Pero un 41 por ciento, en una proporción de aproximadamente dos a uno en este apartado, espera que las políticas resulten en una menor delincuencia. El 20 por ciento, por su parte, cree que habrá un mayor nivel de delincuencia. Casi cuatro de cada diez (37% por ciento) afirman que tendrán poco impacto en los delitos.
Esto, a pesar de que un estudio del Instituto Cato encontró que todos los migrantes –tanto los que tienen papeles como los que no– tienen menos probabilidades de ser encarcelados que los estadounidenses nativos.
"La tasa de encarcelamiento de estadounidenses nativos en 2023, de mil 221 por cada 100 mil, es la más alta de los tres grupos analizados. Los migrantes con papeles tienen la tasa de encarcelamiento más baja, con 319 por cada 100 mil, en 2023. Los que no tienen papeles presentan una tasa de encarcelamiento de 613 por cada 100 mil, una cifra mayor que la de los migrantes con documentos, pero también menor que la de los estadounidenses nativos", concluye.
Blancos y asiáticos, a favor de deportaciones de migrantes
La mayoría de los estadounidenses opina que debería haber maneras para que los migrantes sin documentos en el país puedan permanecer legalmente si cumplen ciertos requisitos; el 65 por ciento lo afirma actualmente. Sin embargo, dice Pew, este porcentaje es menor que hace unos años, y ahora son más los que opinan que no debería haber una vía para obtener un estatus legal y que debería haber un programa nacional de deportación.
Hoy en día, el 31 por ciento de los adultos estadounidenses opina que debería haber un programa nacional de deportación. Si bien esto ha cambiado poco en el último año, ha aumentado de forma constante en los últimos años: en 2017, el 19 por ciento apoyó un programa nacional de deportación.
Los grupos demográficos claves de esta opinión: el 38 por ciento de los adultos blancos y el 30 por ciento de los adultos asiáticos opinan que debería haber un programa nacional para deportar a los inmigrantes que se encuentran ilegalmente en el país, mientras que porcentajes mucho menores de adultos negros (17 por ciento) e hispanos (14 por ciento) comparten esta opinión.
Precisamente estos grupos minoritarios son los que más dudan de estas políticas. Menos de cuatro de cada diez hispanoamericanos aprueban siete de las ocho políticas incluidas en la encuesta. Un porcentaje mayor (45 por ciento) aprueba ofrecer dinero y fondos de viaje a personas que se encuentran sin permiso en Estados Unidos para que salgan del país voluntariamente. Solo un tercio de los adultos afroamericanos aprueba alguna de estas políticas migratorias.
En general, las medidas migratorias de Trump generan más apoyo entre las personas de 50 años o más que entre los adultos más jóvenes. Casi seis de cada diez adultos mayores (58 por ciento) aprueban el uso de las fuerzas del orden estatales y locales para apoyar las deportaciones y el aumento del personal federal que trabaja en estas iniciativas. En comparación, aproximadamente cuatro de cada diez adultos menores de 50 años aprueban cada una de estas políticas.
El Centro de investigaciones Pew realizó la encuesta del 2 al 8 de junio, en el inicio de las redadas masivas y antes de los disturbios en Los Ángeles y el envío de marinos por parte de Trump. Estas opiniones podrían cambiar en los próximos meses de acuerdo con la intensidad de estos operativos, ya que hay denuncias de que los agentes de ICE realizan estas capturas vestidos de civil, sin mostrar las órdenes de aprehensión, con las caras cubiertas e incluso la detención indiscriminada de ciudadanos estadounidenses y migrantes "con papeles" y sin antecedentes criminales.
La encuestadora también detalló que realizó las entrevistas en línea y de forma telefónica en vivo, con un margen de error de 1.6 puntos porcentuales y una "sobremuestra de adultos asiáticos no hispanos, adultos hispanos y adultos de entre 18 y 34 años que votaron por Donald Trump en las elecciones presidenciales de 2024", con el fin de proporcionar estimaciones más precisas de las opiniones y experiencias de estos subgrupos demográficos más pequeños. "Estos grupos sobremuestreados se ponderan para reflejar sus proporciones correctas en la población", advierte.