Berlín, 19 ene (dpa) - La canciller alemana, Angela Merkel, advirtió hoy de la necesidad de cultivar la amistad entre Francia y Alemania.
En la historia no hay nada presupuesto, dijo Merkel en un mensaje emitido por video en Internet con motivo del cincuentenario del Tratado del Elíseo que selló la amistad entre los antiguos enemigos tras la Segunda Guerra Mundial y sentó las bases para una nueva cooperación.
"No se puede decir: (el primer canciller de la República Federal de Alemania, Konrad) Adenauer y (el presidente francés Charles) De Gaulle lo lograron bastante bien entonces y ahora esto queda así durante los próximos siglos", previno Merkel.
La canciller afirmó que existe una "gran cercanía" entre Berlín y París, pero admitió que los gobiernos disienten en algunas cuestiones. "Pero cuando acercamos posiciones suele salir de ello una buena solución".
El sintonía que existía entre ambas capitales cuando gobernaba el conservador Nicolas Sarkozy quedó atrás al llegar al poder el socialista François Hollande.
El nuevo jefe de Estado galo se opuso a las recetas de estricta austeridad favorecidas por Merkel para afrontar la crisis económica europea y aboga por poner el acento en el políticas estatales que fomenten el retorno al crecimiento.
Pese a las disonancias existentes, Alemania y Francia se preparan para festejar los cincuenta años del Tratado firmado en el Palacio del Elíseo en París por Adenauer y De Gaulle.
Las celebraciones comenzarán el lunes con un debate que protagonizarán Merkel y Hollande con jóvenes de ambos países en la sede de la cancillería en Berlín y una cena posterior de los mandatarios.
El martes, los gabinetes de gobierno de ambos Estados sesionarán de forma conjunta. El Reichstag, la sede del Parlamento alemán, será por primera vez escenario de un pleno de la Asamblea Nacional francesa y del Bundestag germano. Se espera la llegada de hasta 577 diputados de París. Merkel y Hollande pronunciarán los principales discursos.
Los dos Parlamentos emitirán una declaración conjunta para resaltar el carácter especial de las relaciones francoalemanas. Francia y Alemania fueron enemigos en las dos guerras mundiales. Su acercamiento tras la guerra convirtió al "tándem" francoalemán en un motor de la Unión Europea.
Una de las principales bases de esta amistad es el Tratado del Elíseo, firmado 18 años después del fin de la Segunda Guerra Mundial. Este tratado fomentó el intercambio de ocho millones de jóvenes franceses y alemanes y más de 2.000 cooperaciones entre ciudades.
El Tratado del Elíseo contempla las consultas periódicas de gobernantes así como de ministros de Exterior, Defensa y Juventud y una mayor cooperación en materia de política exterior y de seguridad.
Aún así, las diferencias han acompañado la relación entre París y Berlín en los últimos tiempos. Incluso se llegó a discutir la posibilidad de firmar un nuevo Tratado.




