Ginebra, 28 Ene (Notimex).- Un grupo de expertos de Naciones Unidas (ONU) urgió al gobierno de Teherán a detener las ejecuciones de cinco activistas pertenecientes a la minoría árabe Ahwazi, después de que el Tribunal Supremo confirmó sus sentencias a muerte.
Mohammad Ali Amouri, Sayed Jaber Alboshoka, Sayed Mokhtar Alboshoka, Hashem Shabain Amouri y Hadi Rashidi, todos ellos miembros y fundadores del instituto Al-Hiwar, fueron condenados a muerte por cargos de Moharebeh ("enemistad contra Dios").
Además por Mufsid-fil Arz-("corrupción en la tierra") y por difundir propaganda contra el sistema en 2012.
"Es absolutamente inaceptable que las personas sean encarceladas y condenadas a muerte por ejercer sus derechos a la libertad de reunión pacífica, de asociación, de opinión y de expresión, a la afiliación a grupos minoritarios y a las instituciones culturales", dijo.
Esa situación fue dada a conocer en un comunicado por el Relator Especial de la ONU sobre la situación de los derechos humanos en la República Islámica de Irán, Ahmed Shaheed.
Por su parte, el Relator Especial de la ONU sobre los derechos a la libertad de reunión pacífica y de asociación, Maina Kiai, recordó a las autoridades de Irán sus obligaciones internacionales.
Recordó que "Irán es Parte en el Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos, que garantiza el derecho a la libre expresión, libre asociación y reunión pacífica".
Los cinco activistas fueron arrestados en el sexto aniversario de las protestas de la comunidad Ahwazi, y fueron condenados en procesos que no cumplieron con los estándares de la justicia internacional en sus hogares en Ahwaz en 2011.
"Según el derecho internacional, la pena de muerte sólo puede emplearse cuando se cumplen condiciones muy estrictas", aseguró el relator especial en Ejecuciones Extrajudiciales, Sumarias y Arbitrarias, Christof Heyns.
Ejemplificó que "cuando se cometen crímenes graves y sólo después de un juicio y procedimientos de apelación que respeten los principios internacionales".
"Además de nuestra grave preocupación, se ha alegado que los cinco individuos fueron sometidos a tortura y otros malos tratos bajo custodia y se vieron obligados a firmar confesiones", agregó el Relator Especial sobre la tortura, Juan E. Méndez.
"Esto no es sólo en la violación de las obligaciones internacionales de Irán en virtud del Pacto Internacional, que impone una prohibición absoluta de la tortura, es también una violación de la Constitución de Irán que prohíbe explícitamente el uso de todas las formas de tortura con el fin de extraer confesiones o adquirir información", agregó Méndez.
"El número de casos de personas que pertenecen a minorías que están condenadas por sus actividades relacionadas con la defensa de sus derechos es alarmante", dijo la experta independiente de la ONU sobre cuestiones de las minorías, Rita Izsak.
"Insto al gobierno de Irán a detener estas ejecuciones y a revisar las decisiones de los tribunales para hacer que se respeten en la práctica todos los derechos humanos, incluidos los derechos de las minorías" , llamó la experta.




