El Caso Goyo sacude a equipo de Duarte; los cambios no harán justicia ni frenarán la impunidad, dicen activistas

21/02/2014 - 12:05 am
Foto del 15 de marzo de 2013. En Tlalixcoyan se reportaron grupos armados y la agencia Cuartoscuro lo documentó. “Es una vacilada”, dijo Javier Duarte de Ochoa, amenazante. Foto: Tona Navarro, Cuartoscuro
Javier Duarte Ochoa, Gobernador del estado de Veracurz Foto: Cuartoscuro

Ciudad de México, 21 de febrero (SinEmbargo).– A 10 días de que fuera localizado el cuerpo del periodista de de la comunidad de Villa de Allende, en Coatzacoalcos, Veracruz, Gregorio Jiménez de la Cruz, y ante la presión de la sociedad y de activistas, el Gobernador Javier Duarte de Ochoa anunció dos cambios que sacudieron su gabinete: primero, el del Procurador General de Justicia del Estado, Amadeo Flores Espinosa , y posteriormente el cese de su polémica y poderosa vocera, Georgina Domínguez Colío.

Activistas y periodistas “vieron con buenos ojos” la reciente reestructuración en el primer cuadro del gobierno de Duarte. Sin embargo, insistieron, relevar a un funcionario por otro no es la respuesta para frenar la violencia contra periodistas y ciudadanos en Veracruz, y menos para tener una mejor procuración de justicia. El cambio verdadero sería, dicen, atacar con todo a la impunidad que reina en ese estado.

Autoridades estatales y federales, así como comunicadores y la sociedad en general, deben permanecer alerta para que cesen las agresiones contra la prensa, expuso Darío Ramírez, director en México de la organización Artículo 19, y agregó: “Los cambios en sí son positivos, pero deben tomarse con cautela”, pues la actuación del Gobernador y de sus funcionarios en el caso de Gregorio Jiménez "fue vergonzosa", así como la investigación sobre el caso.

“Removiendo a una persona no se va a tener mayor procuración de justicia. Habría más qué hacer para tener una Procuraduría eficiente que investigue los 10 casos de periodistas asesinados en la región”, afirmó el activista respecto a la designación de Luis Ángel Bravo Contreras al frente de la Procuraduría General de Justicia del Veracruz (PGJE),  después de que Amadeo Flores Espinosa renunciara “por motivos personales”.

Ayer, el Gobernador de Veracruz  confirmó el cambio de actividades de Georgina Domínguez, ex vocera y  encargada de la Comunicación Social de su gobierno. La funcionaria fue removida del cargo que ocupaba desde que Duarte asumió la gubernatura del estado para pasar a la recién creada Secretaría Técnica. Su lugar fue ocupado por Alberto Silva Ramos, ex titular de la Secretaría de Desarrollo Social, y  allegado a Duarte de Ochoa.

Sobre el movimiento de Domínguez,  el Director de Artículo 19 opinó que “era bien documentado que la vocera presionaba, que hostigaba a medios de comunicación locales.  Su salida es positiva, pero tampoco vemos con mucho optimismo la llegada de alguien tan cercano al Gobernador, que evidentemente no tiene la experiencia del tratamiento con la prensa”.

Algunos medios denunciaron que Domínguez ejerció presiones y amenazas indirectas contra los periodistas para dejar en claro el control y poder que tenía Duarte sobre los comunicadores, además del mal manejo descontrolado que le dio a la publicidad del Gobernador y que se ejercía bajo presiones. También se le acusó de persecuciones contra aquellos periodistas que “no se cuadraron”.

Gina Domínguez, conocida hasta ayer en Veracruz como la "Vicegobernadora",  fue ampliamente criticada por medios independientes, periodistas y activistas por “el férreo control” que ejerció sobre la prensa oficialista para mantener una imagen de Duarte muy distinta a la realidad. Domínguez, se dice ampliamente, manejó la publicidad gubernamental como un recurso para mantener a raya a esos medios de comunicación, mientras que desató críticas y persecuciones contra los opositores, según denunciaron medios como Notiver.

“El derecho a la información y de la libertad de expresión vive acechado, no sólo por el crimen sino también por gobiernos que no cumplen con la garantía de esos derechos”, condenó también la integrante del colectivo Periodistas de a Pie, Elia Baltazar, sobre la violencia que sufren los periodistas no sólo en Veracruz, sino en todo el país.

Periodistas y organizaciones protestaron en la Ciudad de México por la liberación de Grergorio Jiménez. Foto: Francisco Cañedo
Periodistas y organizaciones protestaron en la Ciudad de México por la liberación de Grergorio Jiménez. Foto: Francisco Cañedo

GOYO PUSO EN JAQUE A DUARTE

El caso de Gregorio Jiménez puso en jaque el desempeño del Procurador de Justicia del Estado, así como del Gobernador estatal.

Jiménez de la Cruz  fue secuestrado afuera de su casa el  5 de febrero de este año y nadie lo volvió a ver vivo.  Fue hallado seis días después en una fosa de la comunidad de  Las Choapas, junto al cuerpo de Ernesto Ruiz Guillén, líder de la Confederación de Trabajadores de México (CTM , la Confederación de Trabajadores de México (CTM).

Gregorio investigaba el levantamiento del líder la CTM, quien había desaparecido desde el 18 de enero tras haber sostenido una reunión con otros líderes sindicales.

El periodista que trabajaba pera el periódico NotiSur, seguía las pistas de ese caso, además de realizar la investigación del confinamiento

Ante dicho panorama, Darío Ramírez dijo que las exigencias siguen siendo las mismas, pedir protección para los periodistas, que los casos de agresiones en su contra no queden impunes.

Además dijo que sostendrán la petición de que se considere como línea de investigación el trabajo periodístico de Gregorio Jiménez y no como un “acto de venganza” como informó la PGJ de Veracruz.

Para Ramírez, “la remoción de una persona no quita la responsabilidad que tiene una institución como la Procuraduría  en investigar de manera diligente el homicidio del periodista.”

Agregó que con la actuación por parte de la Procuraduría de dictar el auto de formal prisión a los detenidos es evidentemente , para ellos,  seguirán en su lógica de que el caso está serrado, sin embargo, la exigencia seguirá siendo la misma, puntualizó el director de Artículo 19.

Darío Ramírez expresó que la primer demanda que se le tiene que hacer al nuevo Procurador es resolver los diez casos, pues dijo que todas las agresiones y hostigamiento a periodistas “pasan porque se puede hacer, es decir, porque hay una impunidad absoluta. El mensaje que debe mandar el Procurador y el Ejecutivo Estatal es asegurar una procuración de justicia total”,  demandó.

EL PELIGRO EN VERACRUZ

Veracruz ocupa el primer lugar de los estados de la República Mexicana al registrar 15 asesinatos de periodistas, de los cuales, 10 han sido detectados durante el gobierno de Duarte Ochoa.

Además, en esa entidad, se tienen  documentados 38 casos de atentados contra los trabajadores de la prensa, de los cuales, ocho fueron privados de su libertad, según cifras de Artículo 19 antes de finalizar el año pasado.

En el puerto se han registrado de 2009 a 2013, 132 agresiones contra la prensa; 15 periodistas asesinados y cuatro desaparecidos, de acuerdo con la organización.Por su parte, organismos como Reporteros Sin Fronteras, la Sociedad Interamericana de Prensa, Periodistas de a Pie y la Casa de los Derechos de Periodistas, también han detectado otro tipo de ataques contra los comunicadores.

Periodistas de todo el país han denunciado que sus colegas trabajan con bajos salarios, falta de contratos y de seguridad social, condiciones de riesgo en su labor periodística (sobre todos para los que trabajan la nota roja) presiones de gobiernos municipales y estatales, criminales, y la asignación de publicidad discrecional sigue siendo un factor de presión, reveló Elia Baltazar.

La también periodista celebró que el asesinato de Goyo provocó una movilización de los trabajadores de la prensa para exigir justicia y la impunidad hacia los trabajadores de la prensa.

“Estamos satisfechos con los resultados de esa misión porque pudimos cumplir el primer propósito que fue llevar el reconocimiento de periodistas de Veracruz, particularmente de la zona de Coatzacoalcos, ya que ha sido posible gracias a su valentía y compañerismo, el poyo a Gregorio y a los compañeros periodistas, porque salieron a las calles incluso bajo de amenazas de que podían perder sus trabajos” explicó.

ALTO A LA IMPUNIDAD

Periodistas y organizaciones piden que protección a comunicadores y justicia en el caso de Gregorio Jiménez. Foto: Facebook
Periodistas y organizaciones piden que protección a comunicadores y justicia en el caso de Gregorio Jiménez. Foto: Facebook

El próximo domingo 23, activistas y periodistas se reunirán en el Ángel de la Independencia en la Ciudad de México, así como en otras ciudades del país, para alzar la voz y exigir a las autoridades de los diferentes órdenes del gobierno el respeto a sus derechos, pues ejercer el periodismo en México en estas condiciones es contrario a los estándares internacionales.

“El objetivo es unir una misma voz, unir una fuerza y dar a conocer que no debemos tolerar la violencia contra la prensa. Eso, al final, daña a toda la sociedad”, dijo Ramírez.

Con el lema "¡Prensa, no disparen!", organizaciones y comunicadores se manifestarán en distintas plazas de la República Mexicana para exigir protección y un alto a las persecuciones y agresiones en contra de los periodistas.

“Los reporteros somos los ojos, oídos y la boca de la sociedad y para seguir cumpliendo esa función, necesitamos la solidaridad de la ciudadanía. A esa sociedad apelamos porque estamos defendiendo nuestro derecho a la libertad de expresión y el de la ciudadanía a estar informada. Frente a las balas de la intolerancia, sólo quedan nuestras palabras: No podemos callar”, planteó el colectivo en un comunicado.

Elia Baltazar expuso que “la concentración de este domingo nace del asesinato de Gregorio Jiménez y tiene como propósito apoyar y respaldar a los periodistas de Veracruz, pero también es una concentración en memoria de todos los reporteros y periodistas muertos en este país. Es una expresión de solidaridad a quienes han sido víctimas y para sus familias”.

También explicó que la manifestación tiene como propósito llamar la atención de los distintos sectores de la sociedad en cuanto al panorama de violencia que viven los periodistas en México, especialmente en estados como Veracruz.

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