A pesar del reconocimiento de debilidad y vulnerabilidad de instituciones de seguridad y justicia, los gobernadores, jefe de Gobierno del Distrito Federal y el presidente Felipe Calderón, acordaron concluir la depuración de cuerpos policiacos hasta 2013, con la advertencia de que sin soldados leales y confiables ni el mejor general puede ganar una batalla.
El anuncio tuvo lugar luego de que se llevara a cabo en Palacio Nacional la primera sesión extraordinaria del Sistema Nacional de Seguridad Pública.
En ella, el Secretariado Ejecutivo de ese organismo estimó que en los próximos meses el 30 por ciento de los elementos policiacos activos no acreditarán los exámenes de confianza y 60 por ciento de los candidatos a ingresar a las corporaciones no serán aptos, con base en los resultados de las evaluaciones que se realizaron durante este año, dice un balance realizado por El Diario de Juárez con datos nacionales.
En esas pruebas, por ejemplo, de 8 mil 291 mandos medios y superiores examinados, reprobaron 2 mil 98 funcionarios, y de 71 mil 273 agentes operativos, 22 mil 209 fueron declarados no aptos.
En ese sentido, el jefe de Gobierno del DF, Marcel Ebrard, estimó que para enero de 2013 unos 135 mil elementos policiales, tanto municipales como estatales de todo el país, habrán dejado sus funciones por no pasar la prueba del polígrafo.
En la sesión del Sistema Nacional de Seguridad Pública, el presidente Calderón aseguró que la depuración de las instituciones de seguridad es apremiante, pues los ciudadanos no quieren de los políticos más explicaciones, sino que demandan soluciones.
“Un refrán de la milicia dice que ‘ni el mejor general puede ganar una batalla si no tiene bajo su mando soldados leales, confiables y bien disciplinados’ advirtió.
En la sesión del Consejo Nacional de Seguridad Pública (CNSP), del pasado 20 de octubre, Calderón había urgido a completar al menos la certificación de mandos medios y superiores en marzo de 2012, pero los mandatarios estatales rechazaron la idea por ser imposible técnicamente, por lo que acordaron reunirse ayer viernes para analizar un esquema.
“Dentro del Estado mexicano debe haber las capacidades para poder evaluar a nuestros policías. Me parece que si no tenemos esa capacidad, bueno, hagamos las maletas y dediquémonos a otra cosa”, dijo María Elena Morera, presidenta de Causa Común, quien realizó una revisión de proceso de los centros estatales de control de confianza.
Datos del Consejo Nacional de Seguridad Pública (CNSP) muestran avance de 84% en altos mandos evaluados; 44% en mandos medios y superiores, y 16.20% en operativos. “Es una preocupante realidad”, dijo Calderón al respecto.
Por ejemplo, al 31 de octubre, al Estado de México, de 54 mil 684 le faltan por evaluar 47 mil 138; al DF, de 91 mil 324 tiene un faltante por revisión que suma 73 mil 338, o Jalisco, que de 23 mil 612 no ha revisado a 22 mil 971.
“Que la sesión de hoy (viernes) sirva para apretar el paso y que cumplamos con esa obligación legal de depurar y profesionalizar a nuestros cuerpos policiacos en enero de 2013”, puntualizó Calderón.
Al término de la sesión extraordinaria del CNSP, el gobernador José Eduardo Calzada, de Querétaro, y quien preside la Conferencia Nacional de Gobernadores (Conago), afirmó en entrevista que de manera gradual y diferenciada todos los estados concluirán su procedimiento para que “absolutamente todos los cuerpos policiacos” cumplan las disposiciones hasta enero de 2013; así lo estipula la ley.
“Debemos acelerar el paso para que los ciudadanos vean con claridad una disminución de la inseguridad en el país que aún no perciben”, dijo.
Se propuso para la próxima sesión del CNSP, en seis meses, hacer una evaluación respecto al secuestro, uno de los cinco ilícitos de mayor impacto en la gente que se comprometieron a atacar en la sesión pasada.
José Óscar Vega Marín, titular del Sistema Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública dio a conocer que para cumplir con las metas de evaluación de todos los policías que operan en el país, se acordó realizar un “esquema de evaluación diferenciada para el personal en activo y por filtros para nuevo ingreso”.
Esto es, que los mandos y aquellos agentes que forman parte de unidades especializadas y con acceso a información sensible, como los que laboran en los llamados C4, sean sometidos a pruebas poligráficas, toxicológicas, médicas, sicológicas y socioeconómicas.
En tanto, que no todos los elementos operativos serán sometidos al polígrafo, pero si llegaran a reprobar alguna de las evaluaciones, ya no continuarán con el procedimiento y tendrán que ser dados de baja.
El jefe de Gobierno capitalino, Marcelo Ebrard, celebró los acuerdos establecidos ayer.
Consideró que la depuración policiaca “significa que de esta fecha a diciembre de 2012 en el país van a dejar de ser polícas unos 135 mil ementos que, estimamos, no van a pasar exámenes; me refiero a policías municipales y estatales”, dijo.
Descartó, sin embargo, que los 135 mil agentes que posiblemente no pasen pruebas de control de confianza se traduzcan en 135 mil problemas más, pues el hecho de no pasar la prueba del polígrafo “no quiere decir que seas un delincuente”.
Precisó que el objetivo es hacer un programa para que todos aquellos que dejen de ser policías no tengan un antecedente penal, que sería similar a lo que se hace con los jubilados.
Y es que “no porque un policía esté jubilado se va a hacer delincuente. Es lo que se va a plantear para enero próximo”, recalcó.