Caracas, 14 Jul (Notimex.- El internacionalista Milos Alcalay criticó hoy la condena incondicional del presidente Nicolás Maduro a Israel por sus ataques a Palestina, y exhortó a que Venezuela trate de lograr una solución negociada en la actual crisis árabe-israelí.
Alcalay destacó a Notimex que el gobierno venezolano debe abandonar su postura de condena incondicional a Israel y asumir una posición de equilibrio que ayude a alcanzar una solución a la actual crisis palestina.
El ex embajador venezolano ante las Naciones Unidas (ONU), estimó que "no debe la diplomacia venezolana inclinarse hacia un solo lado porque lo que hay que hacer es establecer los mecanismos de solución pacífica", algo que apuntó, pasa por el equilibrio.
"La posición lógica, sensata, que debe asumir una diplomacia es el rol constructivo para que haya un cese al fuego y haya una solución pacífica", que es lo contrario a lo que habría hecho en los últimos días el gobierno venezolano.
Recordó que en el pasado Venezuela practicó una diplomacia equilibrada en el conflicto árabe-israelí, que consistía en defender el derecho palestino a tener un Estado propio, pero siempre respetando la integridad territorial de Israel.
El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, condenó en días pasados la "masacre" israelí contra Palestina, en referencia a la operación militar que ha causado más de un centenar de muertes en represalia por un ataque terrorista que mató a tres judíos.
Venezuela rompió relaciones diplomáticas con Israel hace cinco años por orden del fallecido presidente, Hugo Chávez, una decisión ratificada por Maduro, que para Alcalay es una "irresponsabilidad" porque significa culpar únicamente al Estado hebreo.
Esa "visión ideologizada", sostuvo el internacionalista, causa que Venezuela "minimice" los ataques terroristas árabes pero condene siempre las represalias israelíes, una política que "pone problemas a las soluciones y no soluciones a los problemas".
Alcalay contrastó la forma como el gobierno se niega a calificar la utilización de misiles o escudos humanos por parte del grupo "Hamas" como "terrorismo", pero utiliza esta etiqueta para condenar las protestas opositoras de Israel ocurridas durante el año.
"Además de ponerle problemas a las soluciones, ocasiona un desequilibrio que puede generar un bumerang muy serio, porque no se puede llamar terrorista en Venezuela a lo que no es terrorismo, y aplaudir a los que sí lo son en otras regiones del mundo", dijo finalmente.
